VALÈNCIA. (EP). La portavoz de Vivienda y Medio Ambiente del Grupo Popular en Les Corts, Elisa Díaz, ha señalado este sábado que Compromís "no puede seguir poniendo freno al crecimiento económico de la Comunitat y paralizando proyectos a su antojo por puro sectarismo", en relación al nuevo proyecto de Puerto Mediterráneo -que a partir de ahora tendrá por nombre Intu Mediterrani- presentado este jueves.
Así se ha pronunciado Díaz en un comunicado, en el que ha criticado que Compromís en el Ayuntamiento de Paterna "ya ha dicho que va a seguir oponiéndose al proyecto, poniendo de nuevo trabas a la inversión y creación de puestos de trabajo que supone", ha criticado.
Por el contrario, la diputada 'popular' ha manifestado que el PPCV "se ha mostrado siempre de acuerdo con este proyecto, que ahora además ha aumentado la inversión hasta los 860 millones de euros y que prevé la creación de 5.000 puestos directos". "No entendemos la cerrazón de Compromís en oponerse", ha lamentado.
En esta línea, Díaz ha indicado que con la presentación del nuevo proyecto y los cambios oportunos, como la distancia del complejo a 100 metros de la CV-35, es "el momento de que el 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, demuestre si tiene autoridad en el Consell".
De igual modo, ha señalado que "el problema no es solo Compromís en el Ayuntamiento de Paterna, sino la Conselleria de Medio Ambiente, que es la que debe dar el visto bueno y donde ya se puso freno al proyecto por parte del anterior secretario autonómico, Julià Álvaro, también de Compromís", ha señalado.
Por otro lado, la portavoz 'popular' ha indicado que la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, "señaló hace meses que si se adecuaba el proyecto saldría adelante, pero ayer ya deslizó que el proyecto debe adaptarse a criterios no solo técnicos, sino también políticos". "No sabemos si a Oltra le traicionó el subconsciente, pero esta afirmación es una declaración de intenciones gravísima", ha añadido.
Para Díaz, "es hora de que Compromís deje a un lado la ideología y apueste por la creación de empleo y el futuro de la Comunitat Valenciana". "Con su negativa a todo está mandando un mensaje peligroso a los empresarios, que es el riesgo de querer invertir y que se paralicen los proyectos por una cuestión de ideología", ha concluido.