BRUSELAS. (EFE) El precio medio de la electricidad en los hogares españoles durante la segunda mitad de 2017 fue de 21,8 euros por cada 100 kilovatios por hora, un 4,7 % más bajo que en el mismo periodo del año anterior, según informó este miércoles la oficina estadística Eurostat.
En el conjunto de la Unión Europea (UE) apenas hubo diferencia entre la segunda mitad del 2017 y el mismo periodo del año anterior, con un 0,2 % menos, situándose en los 20,5 euros por cada 100 kilovatios por hora, mientras que en la zona euro el precio se situó en 21,8 euros, un 0,1 % menos.
Los mayores aumentos en el precio de la electricidad en los hogares entre la segunda mitad del año 2017 y el mismo periodo del año anterior se registraron en Chipre (12,6 %), seguido de Rumanía (7,2 %), Malta (7,1 %) y Estonia (6,5 %); mientras que las mayores bajadas se produjeron en Italia (11,1 %), Croacia (7,5 %), Eslovaquia (6,2 %) y Grecia (6,0 %).
Si se miden los precios en el estándar de poder adquisitivo (PPS), que elimina las diferencias generales de precios entre los países, los precios más bajos fueron los de Finlandia (13 PPS por cada 100 kWh), Luxemburgo (13,4) y Países Bajos (14,0); mientras que los más altos fueron los de Alemania (28,8), Portugal (28,0) y Bélgica (26,4). En España esta cifra fue de 24,2 PPS.
Los impuestos sobre el precio de la electricidad ascendieron a un 40 % en los Veintiocho, con las mayores proporciones vistas en Dinamarca (69 %), Alemania (55 %) y Portugal (52 %), frente al 5 % en Malta, mientras que en España supusieron un 21 %.
Por otra parte, el importe del gas en territorio español fue de 8,65 euros por cada 100 kilovatios por hora en la segunda parte del año, un 0,9 % más que en el mismo periodo del año anterior.
En la Unión Europea, la caída fue también ligera, con un 0,5 % de media, hasta situarse en 6,3 euros por cada 100 kilovatios hora, mientras que en la zona euro esta cifra se mantuvo en 7,19 euros, la misma cantidad que en la segunda parte de 2016.
Las mayores aumentos de precios entre la segunda mitad de 2016 y la segunda mitad de 2017 se encontraron en Estonia (25,9 %), Bulgaria (20,6 %) y Dinamarca (18, 1 %), mientras que las mayores caídas se produjeron en Eslovenia (5,5 %), Alemania (5,1 %) y Luxemburgo (4,8 %).
En el estándar de poder adquisitivo (PPS), los precios de gas más bajos en los hogares fueron los de Luxemburgo (3,3 PPS por cada 100 kWh), seguidos del Reino Unido (4,5) y Bélgica (5,1); en contraste con las mayores subidas, encontradas en Portugal (10,0), España (9,6) e Italia (8,9).
Los impuestos supusieron un el 27 % de los precios del gas en el club comunitario, que supera con creces en el caso de Dinamarca (56 %), Países Bajos (51 %) y Suecia (45 %), y fueron las más bajas las de Reino Unido (9 %), Luxemburgo (10 %), Bulgaria, República Checa y Eslovaquia (las tres con un 17 %).