Ximo Puig y Mónica Oltra. Foto: VPVALÈNCIA. El PSOE que lidera Pedro Sánchez se proclamó ganador en las elecciones de este domingo con 123 escaños. Unos resultados que situaron a los socialistas como fuerza más votada, algo que no ocurría desde que José Luis Rodríguez Zapatero ganó los comicios generales en 2008.
Ahora bien, más allá de clarificar qué bloque gobernará en la próxima legislatura tanto a nivel nacional como en la Comunidad Valenciana, esta cita en las urnas sirve como termómetro para los partidos de cara a las próximas elecciones municipales a las que se enfrentarán los ciudadanos el próximo 26 de mayo.
Los resultados de las generales en la ciudad de València son significativamente diferentes a los que se produjeron en los últimos comicios, los de 2016, cuando el PP consiguió ser el partido más votado con 159.079 apoyos; A la Valenciana, la coalición formada por Podemos y Compromís, fue la segunda fuerza con 119.236 votos; el PSOE tercera con 76.793; y Ciudadanos cuarta con 67.957.
Ahora, tres años después, sin embargo, el PSOE de Sánchez es la formación más respaldada en la ciudad con 113.216 votos; seguida de Ciudadanos con 84.907; el PP es la tercera más votada en estas generales con 83.615 apoyos; Unidas Podemos se convierte en el cuarto partido más respaldado en València con 65.979; Vox quinto con 54.645 votos; y Compromís, que sufre la consecuencia de no ser un actor principal en los comicios estatales, desciende hasta la sexta posición con 35.033 apoyos para las generales en la capital del Túria.
Los datos son favorables para los socialistas, que pasan a situarse en el primer puesto con un aumento de más de 36.000 votos, y Ciudadanos, que gana dos puestos en la lista hasta situarse como el partido más respaldado en la ciudad en las generales. El PP, no obstante, pierde casi la mitad de sus apoyos en la ciudad, y Compromís cae hasta el último puesto.
Conviene recordar que en estas elecciones la coalición valencianista acudía a unas elecciones generales en solitario pese a ser una fuerza eminentemente autonómica, mientras en las anteriores lo hizo con Podemos y eso le valió para obtener mayor representación. Así, el voto en clave nacional con los partidos estatales como actores principales y con el PSOE apelando al "voto útil" para evitar una mayoría de derechas, ha perjudicado a la coalición, que ha quedado relegada al sexto lugar en la ciudad de València.
Un mal resultado que, sin embargo, la coalición valencianista revierte en las elecciones autonómicas, donde se consolida como fuerza más votada en València con un total de 93.531 apoyos. Una posición que refleja una mayor fortaleza de la UTE electoral formada por Bloc, Iniciativa, VerdsEquo y los adheridos de Gent de Compromís en unos comicios en su ámbito de implantación.
Así, casi un 21% de los votantes de València que acudieron a las urnas secundaron a Compromís, mientras el 19,7% lo hizo al PSPV. Con esto los socialistas subieron a la segunda posición -en las autonómicas de 2015 fueron el cuarto partido más votado en la ciudad- y obtuvieron un respaldo de 88.294 votos. Tercero quedó Ciudadanos, con 84.707 apoyos; cuarto, el PP, que obtuvo 82.234 votos; Vox, quinto al reunir 47.843 papeletas; y Unidas Podemos, sexto con 31.117.
En 2015, sin embargo, el PP quedó primero (107.539); Compromís, segundo (96.151); Ciudadanos, tercero (60.441); PSPV, cuarto (55.423); y València en Comú -Podemos-, quinto (50.964).
El ranking en estas elecciones, no solo evidencia por tanto que el respaldo a Compromís en València en unas elecciones autonómicas es mayor, sino que también refleja la caída en picado en la que se encuentran los populares. A nivel estatal el partido de Pablo Casado ha perdido más de la mitad de representación y en la autonomía Isabel Bonig ha obtenido 12 diputados menos que hace cuatro años. En esta ocasión, en las elecciones generales y autonómicas de 2019, en la ciudad de València han recibido menos votos de los que obtuvieron en los comicios pasados donde quedaron primeros.
