MADRID (EFE/EP)). El PSOE ha rectificado el acuerdo alcanzado con EH-Bildu y ya no derogará integramente la reforma laboral del PP antes de que acaben las medidas extraordinarias por el coronavirus, un acuerdo que había permitido la abstención de los abertzales en la prórroga del estado de alarma.
En una "nota aclaratoria" difundida a última hora de este miércoles, el PSOE informa de que queda anulado el punto primero del acuerdo con Bildu que establecía que se derogaría "de manera íntegra" la reforma laboral del año 2012 y que esa derogación debería ser efectiva antes de la finalización de las medidas extraordianarias adoptadas por el Gobierno por la covid-19.
En un comunicado, el partido liderado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha aclarado que se derogarán únicamente la posibilidad de despido por absentismo causado por bajas por enfermedad -ya derogado el pasado mes de febrero-; las limitaciones al ámbito temporal del convenio colectivo, haciéndolo llegar más allá de las previsiones contenidas en el mismo, tras la finalización de su vigencia y hasta la negociación de uno nuevo, y la prioridad aplicativa de los convenios de empresa sobre los convenios sectoriales.
En concreto y de manera urgente, según el nuevo texto, se modificarán tres aspectos de la misma: la posibilidad de despido por absentismo causado por bajas por enfermedad, las limitaciones al ámbito temporal del convenio colectivo y la prioridad aplicativa de los convenios de empresa sobre los convenios sectoriales.
El Consejo de Ministros ya aprobó el pasado mes de febrero la derogación del artículo 52.d del Estatuto de los Trabajadores, que permitía a las empresas despedir a trabajadores y trabajadoras que estuviesen de baja por causas médicas justificadas, una medida con la que quería beneficiar particularmente a las personas con discapacidad o con enfermedades de larga duración, que suelen tener más bajas de corta duración por razones vinculadas a sus patologías.
En cuanto a las limitaciones al ámbito temporal del convenio colectivo, el objetivo de la reforma es el de hacerlo llegar "más allá" de las previsiones contenidas en el mismo, tras la finalización de su vigencia y hasta la negociación de uno nuevo.
El tercer aspecto hace referencia a otros de los puntos que están contemplados en el acuerdo programático de gobierno de coalición entre el PSOE y Unidas Podemos como es la prioridad aplicativa de los convenios de empresa sobre los convenios sectoriales.
El acuerdo entre PSOE, Unidas Podemos y EH Bildu para la derogación de la reforma laboral se ha conocido poco después de finalizar el Pleno en el Congreso de los Diputados en el que se ha aprobado la quinta prórroga del estado de alarma, que se extenderá hasta el 7 de junio, una votación en la que la formación vasca se ha abstenido.
El resto de los puntos del acuerdo contemplaban la flexibilización de la regla de gasto para entidades locales, forales y autonómicas. En concreto, el documento difundido recoge que estas entidades "dispondrán de mayor capacidad de gasto para políticas públicas destinadas a paliar los efectos sociales originados por la crisis del Covid-19", que no se computarán en la regla de gasto en el caso de las entidades locales.
Asimismo, se establece que la capacidad de endeudamiento del País Vasco y de Navarra "se establecerán exclusivamente en función de sus respectivas situaciones financieras".
Además de estos dos puntos, el acuerdo señala que tanto PSOE como Unidas Podemos "darán cuenta al Grupo Parlamentario Euskal Herria Bildu del avance en el desarrollo y grado de implementación de los acuerdos alcanzados".
Las tres formaciones afirman suscribir este acuerdo con el fin de "adoptar las medidas necesarias para profundizar en las garantías de escudo social y económico para el conjunto de pueblos y trabajadores del Estado".
Durante el debate en el Pleno del Congreso, la portavoz de EH-Bildu, Mertxe Aizpurua, ha aludido a esta negociación con el Gobierno para culminar una derogación "íntegra" de esta reforma laboral, asegurando que este acuerdo "supondría recuperar una parte de dignidad para los trabajadores y devolverles un mínimo de seguridad".
Asimismo, ha señalado su voluntad de que, a la vuelta de la normalidad tras concluir las medidas extraordinarias adoptadas en materia laboral por la crisis de la covid-19, los trabajadores estén "un poco más protegidos ante las ansias de los grandes empresarios de hacer pagar, una vez más, esta crisis a los trabajadores para asegurar sus grandes beneficios".
Entre otras medidas extraordinarias, el Gobierno ha adoptado la prohibición del despido objetivo por causas relacionadas con esta pandemia, lo que supone un encarecimiento del mismo, y facilidades a los ERTE para que las empresas puedan recurrir a este instrumento ante la parálisis y el descenso de la actividad.
Sin embargo, en su réplica, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha enmarcado esta derogación como parte de un compromiso de legislatura, asegurando que su voluntad de acabar con la reforma se mantiene "indeleble", y que esperaba poder contar con ello con las fuerzas "progresistas".
Pese a recogerse la derogación de la reforma laboral, en el programa de coalición de PSOE y Unidas Podemos también se citan diferentes modificaciones de la regulación laboral, sin que se aluda a una derogación "íntegra" de la misma, ni tampoco se establecen plazo.