VALÈNCIA (EFE). El PSPV ha presentado una iniciativa en Les Corts Valencianes para fomentar la independencia de las personas mayores y el uso de viviendas colaborativas, entre otras medidas, que ayuden a mejorar la calidad de vida de la población mayor de 65 años. El objetivo de la propuesta es fomentar el envejecimiento activo y la autonomía personal de la gente mayor residente en la Comunitat a través de la mejora del entorno urbano y promoviendo acciones y espacios que les permitan continuar residiendo en su vivienda habitual o desarrollar su autonomía personal, han informado fuentes del grupo parlamentario en un comunicado.
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2017 la población mayor de 65 años en la Comunitat Valenciana se situó por encima de 940.000 y la previsión para 2030 es que este colectivo superará el 1,2 millones de personas, es decir, un 25 % de la población valenciana.
La portavoz socialista de Bienestar Social, Concha Andrés, ha afirmado que ante estas previsiones los socialistas valencianos quieren impulsar iniciativas que fomentan el envejecimiento activo de este segmento de la población. Andrés ha recordado que actualmente la Generalitat destina recursos a la mejora de accesibilidad e impulsa proyectos y programas que mejoren la calidad de vida de la gente mayor, de manera que puedan permanecer en su casa todo el tiempo que puedan.
No obstante, ha considerado que se pueden plantear nuevas propuestas que recomienda la Organización Mundial de la Salud a través de la iniciativa 'Red Mundial de Ciudades Amigables con las Personas Mayores'. Así, la propuesta de los socialistas insta a "contemplar los criterios integradores y accesibles para las personas mayores en los futuros desarrollos urbanos contemplando aspectos arquitectónicos pero también otros como transporte, vivienda, participación social, respeto e inclusión, comunicación e información, servicios sociales, salud, ocio y esparcimiento".
Asimismo, propone avanzar en el concepto previo de residencia, potenciando las unidades de convivencia en centros residenciales y favoreciendo una forma de vida activa y solidaria. "La soledad es la enfermedad del siglo XXI", ha afirmado Andrés, quien ha destacado que el 59 % de las personas mayores asegura sentirse sola. Por ello, ha dicho, "es importante trabajar en planes específicos que faciliten y mejoren las relaciones sociales y la participación en su entorno, eliminando barreras físicas y avanzando en la planificación de los servicios básicos".