VALÈNCIA. Semanas atrás, las distintas partes que compondrán el Pacto del Botánico II -PSPV, Compromís y Unides Podem-, acordaron que no entrarían a fondo en las negociaciones de cara al futuro gobierno hasta que pasaran las elecciones municipales y europeas que se celebraron este domingo. Las razones eran varias, aunque por encima de todas se situaba el deseo de la coalición que encabeza Mónica Oltra de poder abordar las conversaciones desde un plano general con todos los resultados en la mano.
En aquel momento, algunas fuentes de Compromís apuntaban a que existía cierta desconfianza en que los socialistas pudieran coquetear con Ciudadanos en determinados municipios importantes o incluso en alguna de las diputaciones provinciales si los números se lo permitían, por lo que el deseo de la coalición valencianista era el de afrontar una negociación global que garantizara que todos los acuerdos en la Comunitat tuvieran un carácter progresista.
Bien. Los presagios de Compromís no iban desencaminados en cuanto a las posibilidades numéricas: los socialistas que lidera Ximo Puig tienen la opción de gobernar las tres corporaciones provinciales con el apoyo de Ciudadanos. Así, en Castellón el PSPV ha logrado 12 diputados provinciales, por los 11 del PP, los dos de Ciudadanos y los dos de Compromís. En Valencia, los socialistas se han despegado hasta lograr los 13 escaños, por ocho del PP, cinco de Compromís, tres de Ciudadanos, uno de Vox y uno de La Vall ens Uneix. Por último, en Alicante los socialistas han empatado a 14 con el PP -si bien está pendiente de revisión el escaño de Villena-, mientras que Cs ha conseguido dos representantes y Compromís, uno.
En los dos primeros casos, a los socialistas les valdría un acuerdo tan solo con Ciudadanos o Compromís para ser investidos. En Alicante, no obstante, la única posibilidad que tendría el PSPV de gobernar es lograr el apoyo del partido de Albert Rivera, dado que el respaldo de la coalición valencianista sería insuficiente.
¿Qué posibilidades reales hay de que se produzcan pactos entre PSPV y Ciudadanos al margen de Compromís? Hasta ahora, eran casi inexistentes: el propio Rivera lleva meses descartando públicamente acuerdos con los socialistas pero, tras estos últimos comicios, la portavoz nacional, Inés Arrimadas, dejaba la puerta abierta a pactos con los del puño y la rosa. "El partido irá caso a caso", señaló la dirigente de Cs, una afirmación que ha venido acompañada de la creación de comités para decidir sus acuerdos como es el caso de Alicante ciudad.
Mientras, el presidente de la Generalitat en funciones, Ximo Puig, pedía precisamente este lunes a Ciudadanos que no se "abrazara" a la "extrema derecha" en Alicante y tendía la mano a un posible acuerdo hablando de "máxima generosidad" en la negociación tanto respecto a la ciudad como a la diputación. Unas afirmaciones fuentes socialistas ya interpretaban como un posible trueque: alcaldía para Cs y corporación provincial para el PSPV.
Distintos estrategas de diferentes formaciones consultados por este diario ven "difícil" que PSPV y Cs puedan llegar a algún tipo de acuerdo en las diputaciones. Es cierto que en el caso de la corporación alicantina Compromís no es decisivo, por lo que difícilmente podría oponerse a que los socialistas pudieran gobernarla y quitarle el 'caramelo' de la boca al PP. Ahora bien, parece evidente que si existiera un acuerdo de esas características podría acarrear condiciones ya fuera en otras diputaciones o en grandes municipios: por poner un ejemplo, el PSPV ha logrado un resultado en Elche con el que le basta el apoyo de Compromís o de Ciudadanos. En cuanto a Alicante, la ciudad es para el PP a priori, pero el candidato popular Luis Barcala necesita a la formación naranja y a Vox, por lo que tampoco se puede dar por seguro nada y más aún cuando el partido de Rivera deberá consultar sus movimientos con Madrid para cuadrar la estrategia nacional. ¿Cambio de hacer alcaldesa a Mari Carmen Sánchez de Ciudadanos por la Diputación de Alicante para el PSPV? A algunos no les suena mal la música, aunque en la ciudad deberían encontrar el beneplácito de Compromís o de Unides Podem para esa maniobra.
Por otro lado, se antoja complicado que puedan existir pactos entre PSPV y Ciudadanos que salten la frontera de la provincia de Alicante dado que Ximo Puig depende de Compromís y Unides Podem para ser presidente de la Generalitat. Tal y como apuntaban fuentes de dos de los partidos implicados, sería también muy contradictorio que la formación naranja pudiera ostentar acuerdos en diputaciones con los socialistas mientras está ejerciendo de oposición crítica en Les Corts con Toni Cantó al frente.
No obstante, conviene no descartar la posibilidad de acuerdos puntuales y concretos. Una situación esta que, aunque resultaría también compleja para el PSPV, deja en una posición negociadora más débil a Compromís y Unides Podem-EUPV. Todo apunta a que los socialistas se centrarán ahora en el Botànic II con sus socios progresistas, pero la existencia de una puerta lateral en instituciones tan importantes abre el abanico de posibilidades en caso de bloqueo.
Más aún cuando los resultados de sus socios en las locales no han sido buenos. Compromís, excepto el éxito de Joan Ribó en València, puede sacar pecho en pocos municipios grandes y menos aún en Alicante, donde ha perdido dos de sus tres diputados provinciales, lo que ha significado precisamente que la izquierda no haya logrado la mayoría en la diputación. En cuanto a Unides Podem-EUPV, solo han conseguido representación en Castellón de la Plana de las tres capitales de provincia.