MADRID (EFE). El Tesoro Público español ha colocado 3.763 millones de euros en deuda a largo plazo de varias denominaciones, incluida una de obligaciones a diez años indexadas a la inflación, que ha sido la única que ha logrado reducir el interés.
En concreto, en las obligaciones a diez años indexadas a la inflación, el Tesoro ha adjudicado 739 millones de euros, a un interés marginal del 0,167%, inferior al 0,441% aplicado previamente.
Por el contrario, en los bonos a cinco años, de los que España ha colocado 577 millones de euros, el rendimiento ha subido al 0,177% desde el 0,104% previo, al igual que en las obligaciones a diez años, de las que se han adjudicado 1.375 millones, donde el interés marginal también se ha elevado al 1,233%, desde el 1,086% anterior.
Por último, en obligaciones a quince años, el Tesoro ha vendido 1.071 millones, a un interés del 1,571%, también superior al 1,463% aplicado en la puja previa. En total, el Tesoro ha colocado 3.763 millones de euros, aunque los inversores han solicitado 8.218,5 millones. Así, la ratio de cobertura, que es la diferencia entre lo demandando y lo que finalmente se ha adjudicado se ha elevado a 2,1 veces.
Con la subasta celebrada, el Tesoro Público español ha inaugurado el calendario de noviembre, un mes en el que también está previsto que lleven a cabo otras tres pujas más. La siguiente será el próximo 15 de noviembre, cuando se subastarán letras a seis y doce meses. Igualmente, el 17 de noviembre, el Tesoro colocará bonos y obligaciones, y el día 22, letras a tres y nueve meses.
La subasta de este jueves es la primera que lleva a cabo el Tesoro tras la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno, que justamente hoy, desvelará los nombres de sus ministros.
