El traje a medida de la hija de la secretaria autonómica de Sanidad

VALENCIA. La polémica por la contratación de la hija de la secretaria autonómica de Sanidad, Dolores Salas, por parte de la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana (Fisabio) sigue siendo tema de polémica. La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, que el jueves anunció que la contratación fue un proceso “público y transparente”, aseguró este viernes que aún así, “no es estético que los familiares de las personas que ostentan cargos públicos estén trabajando en el ámbito donde ostentan esos cargos”, algo que ya dijo en diciembre de 2015 respecto al nombramiento del marido de la consellera de Sanidad, Carmen Montón, como gerente de la empresa de aguas de la Diputación de Valencia.

 La hija de Salas fue contratada en condición de "técnico de apoyo a la investigación". La convocatoria de esta plaza fue publicada tan sólo en la página de Fisabio y a ella se presentaron sólo cuatro aspirantes, a pesar de los 529.000 parados (datos EPA) que hay en la Comunitat Valenciana.

La oferta consideraba tres requisitos indispensables y tres méritos valorables para puntuar a los aspirantes, y en caso de empate –algo que no se dio–, una entrevista que haría decidir durante el proceso de selección.

Tanto la experiencia laboral previa como los estudios en ciencias sociales eran los apartados que baremaban mayor puntuación. Dentro del primero, la "Experiencia acreditada en la realización de revisiones bibliográficas sobre desigualdades en cáncer", la "Experiencia acreditada de participación en proyectos de investigación europeos en cáncer" y la "Colaboración en proyectos científicos relacionados con el cáncer y Salud Pública" podían llegar a sumar 12 puntos, tres en cada uno de los apartados.

Mientras el resto de candidatas no sumaban ningún punto en estas secciones, la hija de Salas alcanzó un total de siete puntos por haber participado previamente en proyectos europeos sobre el cáncer al colaborar entre 2009 y 2014 en el proyecto que coordinaba su madre, Research Group Background and Accomplishments. Cancer and Public Health, cuando estaba vinculada a Fisabio.

Pero el requisito en el que más puntos obtuvo la hija de Salas fue en la “Formación acreditada en ciencias sociales”, donde consiguió la máxima puntuación -4- al formarse durante cuatro años en Sociología, a falta de terminar el último año de carrera según publicó Las Provincias. Unos estudios específicos no cursados por el resto de aspirantes, ya que, generalmente, los aspirantes a las convocatorias de la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica provienen del ámbito científico y no sociológico.

Entre el resto de requisitos que tan solo sumaban 2 puntos del total y que alcanzaron todas las aspirantes por ser más genéricos, se encontraba tener la titulación de bachiller o equivalente y acreditar un nivel de inglés alto.

La diferencia entre la puntuación que obtuvo Julia Moreno Salas y la segunda en la lista tras la resolución distaba en 10 puntos. Ninguna pasó de los tres puntos, y ella alcanzó los 13 sobre 17.

Por este trabajo, la hija de la secretaria autonómica, cobró aproximadamente 700 euros netos mensuales, ya que el salario bruto anual estimado para el desempeño de esta función durante 25 horas semanales es de 11.064,75 euros.