El Salón Noble del Ateneo Mercantil de València acoge hasta el próximo 29 de enero Superpop con Warhol, una muestra en la que a través de 112 originales se demuestra la faceta menos conocida de Andy Warhol, el rey del Pop Art
VALÈNCIA. Desde sus comienzos en el mundo de la publicidad hasta sus retratos más oscuros, todas las aristas de Andy Warhol quedan al descubierto en València. El Salón Noble del Ateneo Mercantil acogerá hasta el próximo 29 de enero la muestra Superpop con Warhol, en la que se puede conocer la vida del artista a través 112 originales que van desde su serie de fotografías oscuras, Vida y Muerte, hasta sus retratos a la comunidad transexual estadounidense a través de la serie Ladies and Gentlemen (1974). Todo ello aderezado con sus coqueteos con el mundo de la moda, la música y la publicidad. Juan Jesús Montiel Rozas, coordinador de la exposición, explica que la muestra se conforma de originales que rara vez son expuestos de cara al público, que permiten que el público valenciano conozca a Warhol “como nunca antes se ha mostrado”, ampliando la mirada más allá de la figura de Marilyn Monroe y sus clásicas sopas Campbell para acercarse también a su visión más intimista sobre el mundo que le rodeaba.
Dividida en cinco secciones temáticas, la exposición muestra una visión poliédrica de Andy Warhol, cuya mirada del arte como negocio (y el artista como empresario) revolucionó el mundo, una trayectoria que comenzó en el mundo de la publicidad para abrirse paso con su Golden Book, que se muestra en la exposición. "Lo que buscaba era crear una nueva cultura artística, su arte trataba temas más banales y los acercaba al público. A nadie antes se le había ocurrido poner una sopa Campbell que estaba en un supermercado en una galería". En la división de las secciones se analiza el diseño publicitario, la revolución productiva del Pop Art, el lado oscuro y la parte business en la que Warhol buscaba el beneficio económico directo a través del arte: “Warhol muchas veces veía el arte directamente como algo transaccional, era de los pocos que admitía que gran parte de su trabajo era por dinero”, explica el coordinador de la muestra.
¿Qué fue antes Warhol o el Pop Art? Lo cierto es que el movimiento existía antes de coronar a su máximo rey. Fue en el 1956, a través de la exposición This is Tomorrow, que en la Whitechapel Art Hallery de Los Ángeles mostró a través de 12 exhibiciones todas las versiones del arte contemporáneo y los símbolos de la cultura pop a través de la visión de una veintena de artistas: “Por extraño que pueda parecer, Andy Warhol vino después que el Pop Art”, explica Rozas, “sin embargo el artista quedó como icono de este movimiento, ya que se asocia a Estados Unidos la idea de la potencia mundial más capitalista, Warhol lo que hacía era traducir directamente ese capitalismo al arte”. Fue con su muestra individual en la Ferus Gallery de Los Ángeles cuando se consagró a través de su muestra de sopas Campbell, transformando aquello accesible para todos en arte.
Una vez establecida su visión del arte Warhol comenzó a atreverse con el retrato más intimista y personal, alejado de los "colorines" que generalmente se asocian a sus obras. La sección oscura es una novedad absoluta en València, es la primera vez que se muestran estas obras en las que retratan conflictos que atentaban contra la moral humana: “Se exhibe la muerte y directamente imágenes de recortes de prensa en los que aparece la silla eléctrica e incluso los retratos de trece prisioneros que eran los más buscados del mundo”, concreta el coordinador de la muestra. "Cuando la gente se acerca al Pop Art espera ver esa imagen colorida y divertida, por lo que este tipo de retratos no suelen exhibirse, comprenden una parte mucho más íntima del autor que le metieron en problemas con la justicia incluso”.
En el caso de los retratos de los prisioneros más buscados, el objetivo era que se exhibieran en un mural de cara al público, pero fue Nelson Rockefeller quien decidió que no llegarían a ver la luz, con motivo de no alterar su campaña política: "El gobierno se opuso a mostrar la imagen de estos prisioneros, en su mayoría italianos, porque podía suponer un insulto para parte de su electorado", explica Rozas, quien también cuenta que a pesar de que Warhol intentó por activa y por pasiva que esta obra viera la luz tuvo que acceder a que el mural fuera tapado.
Todo lo que Warhol hacía era una provocación que iba en respuesta al expresionismo abstracto, el movimiento artístico predominante en Estados Unidos hasta ese momento. “Lo que hacía era ir un paso más allá, hacer de lo accesible algo artístico y retratar a comunidades que nunca habían tenido un espacio”. Parte de todo ello se exhibe en la muestra con la serie Ladies and Gentlemen, un retrato de la sociedad trans estadounidense a través de la fotografía, con piezas sin nombre y retratos en blanco y negro, entre las que se pueden reconocer caras como la de la activista Marsha P. Johnson. Además, en esta parte de la muestra se contempla también el personaje de Lady Warhol, fotografiado por Christopher Mako en el año 1982, en el que se puede conocer “el por qué del artista” más allá de su obra.
Finalmente la muestra concluye con "el arte de los negocios", en el que se muestra la faceta "más transaccional de Warhol" a través de distintas colaboraciones. No temía la etiqueta de 'comercial'. Esta etapa es la que Rozas denomina como la del Business art, en la que Warhol se presenta como empresa e inversionista personal para acercarse al mundo de la música y la edición: "No solo hizo la famosa portada de The Velvet Underground, también trabajó con los Rolling Stones y hasta con Miguel Bosé", relata Rozas, "además fundó la revista Interview, con la que marcó el prototipo de las revistas de moda que se ven hoy en día". Con todo ello Warhol logró dejar su legado artístico y disfrutar en vida del beneficio económico, volviendo en cierta manera a sus principios en el arte empresarial, pero dejando constancia de todas y cada una de sus facetas: Warhol el publicista, retratista, preocupado por la sociedad estadounidense, con una mirada hacia la sociedad trans neoyorkina y por encima de todo el gran nombre del Pop Art sin ser él mismo el precursor de este movimiento.