CASTELLÓ. El azulejo no se da un respiro. Al menos en lo que a ventas en el exterior se refiere, el verano también ha estado marcado por el ímpetu de la principal industria castellonense. Y es que, aunque el porcentaje de incremento de las exportaciones de julio fue significativamente menor al de los meses precedentes (+6,9%), esto se debe a que el séptimo mes de 2020 fue el mejor de aquel año, una vez ya superado el bache inicial de la pandemia sanitaria.
De esta manera, los 320 millones de euros en ventas de baldosas y recubrimientos cerámicos fuera de las fronteras españolas en el pasado mes de julio suponen la tercera mejor cifra de este año... y en toda la historia del azulejo español.
Con ello, a pesar de que en el acumulado del año baja la tasa de incremento respecto al ejercicio pasado (en el primer semestre era del 35%), las cifras están todavía un 30% por encima de las de 2020. No en vano, en los siete primeros meses del año ya se han superado los 2.120 millones de euros en exportaciones. Así, aunque hay compañías que han bajado un poco el pistón en los meses de verano, los principales grupos siguen tirando del sector, al menos en lo que a cifras de ventas se refiere.
Y todo, en puertas de la primera feria que el sector vivirá de forma similar a lo que solía ser antes de la pandemia. A partir del próximo lunes Cersaie abre sus puertas en Bolonia y 84 fabricantes españoles de azulejos y pavimentos cerámicos asociadas en la patronal Ascer participan en el certamen, con el que quieren dar un nuevo impulso comercial al sector.
No en vano, todos los expertos destacan que la pandemia ha contribuido a destacar las propiedades higiénicas de los revestimientos cerámicos y esto le servirá para mantener el crecimiento en las ventas en los próximos años.
En concreto, se espera que esto sea especialmente beneficioso en Estados Unidos, un mercado donde hasta ahora predominaban otras superficies, como la moqueta, con un peor tratamiento antibacteriano. De hecho, esto ya se está notando y el país norteamericano ha pasado a ser, este mes de julio, el principal cliente del azulejo castellonense tras desbancar a Francia.
Y no es porque el mercado galo crezca poco (lo hace un 30,3%), sino porque el estadounidense lo hace ligeramente por encima (34,9%) y el año pasado ya acabó como primer destino de la cerámica española, con más de 360 millones en ventas. Ahora ya acumula casi 260 y junto con Francia acapara un cuarto de la facturación de producto en el extranjero.
Y ello a pesar de que todos los países del top ten crecen. Algunos de forma más que destacada, como Marruecos (61%); Israel (50%), Reino Unido (43%) o Italia (40%).