PACO POYATO/EUROPA PRESSCASTELLÓ. La textil Marie Claire avanza en la resolución de su concurso de acreedores. El administrador concursal ya ha redactado un informe provisional y ahora se ha desarrollar un convenio con los acreedores que contemple un plan de viabilidad y un calendario de pagos. La empresa de Vilafranca cuenta con 477 acreedores que suman una deuda de 38 millones. Y el Institut Valencià de Finances (IVF), dependiente de la Generalitat, concentra un 62 % de la misma con 24 millones.
El administrador concursal ha evaluado de forma desfavorable la primera propuesta de de viabilidad presentada por la compañía, pero añade que la textil es viable y tiene futuro si se promueve una reestructuración con otras condiciones, según subraya en su informe provisional avanzado por Castellón Plaza.
Los 24 millones, según la memoria presentada por el responsable concursal, corresponden a Instrumentos Financieros de la Comunitat Valenciana (Fininval), adscrito a la Conselleria de Hacienda y que gestiona el Institut Valencià de Finances. Una cantidad vinculada a cuatro préstamos concedidos por el IVF para intentar reflotar una empresa que arrastra problemas desde hace años. En junio de 2019 se firmó uno por 2,4 millones, en junio de 2021 se impulsaron otros dos de 7,9 y 1,9 millones respectivamente, y en junio de 2022 un cuarto de 12,4 millones.
El IVF apoyó a la textil especialmente en 2021 con dos préstamos de 9,5 y 12 millones, una financiación, señala la documentación del administración concursal, que se condicionó a un cambio en la dirección de la sociedad y a una reestructuración integral de la misma a fin de recuperar su rentabilidad. En el ejercicio 2020-2021 la actividad de Marie Claire había caído de manera significativa y la Ebitda se situó en dicho año en los 7 millones negativos. En este contexto. el IVF aportó su ayuda tras la entrada de otro equipo gestor en junio de 2021 (la firma fue comprada por A2D Business Projects Retail) y el desarrollo de nuevos planes de negocio.
El administrador concursal valora los intentos de los nuevos gestores para reflotar la histórica firma de Vilafranca, que cuando fue adquirida ya arrastraba una importante deuda y pérdida de competitividad. Destaca desde 2021 la elaboración de planes de comercio y negocio, la reestructuración del layout de la planta de Vilafranca, la unificación y reubicación de áreas, las actuaciones de ahorro y el cierre de la planta de Borriol y oficinas en València y Castelló.
Pero estas medidas, agrega, fueron insuficientes para mejorar la situación de la fábrica. El negocio siguió en descenso y el momento de insolvencia se situó en el último trimestre de 2022. Los nuevos planes de negocios contemplaban, explica el trabajo del responsable concursal, la compra de material sanitario por parte de la Administración, pero dichas ventas, remarca, "no se produjeron en su totalidad debido a la evolución de la pandemia". De manera que esta financiación, asevera, fue empleada por la sociedad principalmente para reestructurar deuda antigua existente con proveedores, personal y deuda financiera. 8,5 millones se dedicaron a proveedores y 7,6 millones a nóminas del personal.
No obstante, el administrador califica 14,8 de los 24 millones de la deuda del IVF como crédito subordinado. Es decir, un proceso concursal divide en tres categorías los créditos: ordinarios, privilegiados y subordinados y estos últimos se cobran cuando se han pagado los primeros y no cuentan a la hora de aprobarse el convenio con los acreedores.
De los 38 millones del pasivo, 15 millones son créditos ordinarios y 6,7 privilegiados. Cabe tener en cuenta que la deuda financiera total se sitúa en los 30 millones. Además de los 24 millones del IVF, la compañía también cuenta con cerca de dos millones de obligaciones correspondientes a otras entidades financieras, 1,3 millones con proveedores de inmovilizado por la adquisición de la fábrica de Vilafranca; 1,2 millones con el Fogasa por el pago de ERES llevados a cabo en 2010 y 2019 y cerca 840.000 euros con la Seguridad Social.
El administrador ha rechazado la primera propuesta de viabilidad de la empresa, pero incide que a pesar de ello Marie Claire tiene viabilidad. Indica que sería posible con otra estructura de la deuda y masa salarial, otro plan de pagos, con la revisión del plan de negocio, y con acreedores que individualmente o conjuntamente no superen 1/5 parte del total del pasivo pueden presentar una propuesta de convenio.
Ahora se debe resolver otro plan de viabilidad y de pagos. Al respecto, anima a los acreedores interesados a que presenten su propuesta de convenio "lo antes posible".
La firma también tiene en su haber sus activos valorados en 16 millones de euros.
