DE AGILIZAR LOS TRÁMITES A LA TRANSICIÓN ENERGÉTICA

Emprendimiento B2G: tecnología al servicio público

19/02/2024 - 

VALÈNCIA. “He vuelto a cometer un error... Trabajar con la administración pública, pensé que al ser a través de un tercero iba a cambiar algo... Pero no, un sinsentido de justificaciones y documentación que está extendiendo un proyecto de 4 meses a 2 años…”. Estas palabras corresponden un post que publicaba el pasado 13 de febrero en la red social X el emprendedor Alex Bryszkowski.

“Siempre digo que los tres momentos más felices de mi vida fueron los nacimientos de mis dos hijas y el día que nos caducó la certificación para hacer contratos con el estado”, era el comentario con el David Pardo, otro emprendedor, compartía el mismo parecer. En ninguno de los casos se concluye que el grado de satisfacción de tener a las Administraciones como cliente sea elevado, algo que cualquier otro cliente se lo haría mirar.

Un modelo de negocio B2G (Business-to-Government) es cualquier empresa que tiene un producto que podría aportar valor a las necesidades de las Administraciones públicas, ya sea en provisión de servicios, eficiencias internas, infraestructura digital o en calidad institucional. 

Existen muchas oportunidades para las startups de acercar sus soluciones a una inmensa cantidad de personas a través de la Administración por eso, pese a los inconvenientes, muchas insisten. No obstante, salvo en contadas excepciones, es preferible enfocarse primero a un modelo B2B y, probada su eficacia, dirigirse al sector público como cliente adicional, entre otras cosas, como señala Bryszkowski, porque ninguna empresa de nueva creación puede sustentarse con los ritmos que llevan en la Administración. De aquí que las nativas B2G sean más bien escasas.

Agilizar los trámites

Por otro lado, en este tipo de ventas, los procesos de compra suelen estar regulados por normas y procedimientos específicos. A menudo se exigen licitaciones públicas y una serie de requisitos con una burocracia tediosa para poder participar, motivo por el cual buena parte de las convocatorias quedan desiertas.

Para la difusión y tramitación de licitaciones públicas, se crean soluciones como las de Tamiz, Equal Tenders o Tendios. En esta última presumen de disponer de la base de datos de licitaciones más grande de Europa, España y América Latina. 

Reducir las listas de espera para acceder a determinados servicios y no frustrar a los usuarios, es otro de los grandes retos de la Administración. Con el foco puesto en la Sanidad, una de las startups que está siendo acelerada en Gobe Ventures, la primera aceleradora especializada en el sector Govtech de España, es EniaxCare UE. Se trata de una empresa tecnológica de origen chileno con presencia en siete países que gestiona más de 50 millones de citas sanitarias al año a través de un asistente virtual de salud que facilita, automatiza y mejora la interacción entre los prestadores de salud y sus pacientes. 

Acelerar y hacer eficientes los procesos internos de las compañías es lo que persiguen, también, con la tecnología que desarrollan en Serimag basada en inteligencia artificial, visión por computación o NLP. Aunque su cliente principal sean las empresas, ofrecen también sus herramientas a las Administraciones públicas para su proceso de transformación digital. La promesa es ayudar a reducir los cuellos de botella que demoran los tiempos de respuesta y reforzar la calidad del servicio al ciudadano.

“Al aprovechar las tecnologías de IA, los gobiernos pueden mejorar la prestación de servicios, optimizar la asignación de recursos y mejorar la gobernanza en general”, afirman en Serimag.

La transición energética de las ciudades

ImpactE, por su parte, es una startup nacida en el seno de Universidad Politécnica de Valencia con el propósito de ayudar a los ayuntamientos en su planificación para conseguir una transición energética justa y de calidad. Para ello, la empresa desarrolla modelos, plataformas y herramientas que evalúan, optimizan y priorizan las distintas actuaciones de eficiencia energética en los municipios. 

Otra de las funciones para la que están diseñadas las herramientas de ImpactE atañe a la movilización de la ciudadanía y su capacidad para ser usadas en procesos participativo. Actualmente ImpactE esta presente en más de 30 municipios a escala nacional. Entre las Administraciones e instituciones públicas que trabajan ya con la startup, muchas de ellas de la Comunitat, se encuentran la Generalitat Valenciana, la Diputación, el Ayuntamiento de Valencia o el de Castelló.

Wozalabs, por su parte, desarrolla productos de deep-tech geoespacial para ayudar a los gobiernos y grandes compañías a afrontar grandes desafíos globales, como son la sostenibilidad, el cambio climático y los riesgos asociados.

Ciudades más inclusivas

Ya conforme a lo dispuesto en el punto número 11 de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS), lo que plantea Virginia Real con la fundación de Accesscity es “impulsar la toma de acción de las entidades locales para la creación de espacios urbanos, inclusivos, seguros y accesibles”. La startup proporciona recorridos accesibles, inclusivos y seguros desde una perspectiva de género, con especial atención a niñas y mujeres de todos los perfiles. En esta dirección trabajan con corporaciones locales como la de Aspe, Elda, Requena, Crevillent o el de Villajoyosa, entre otros. 

Algo similar, aunque con el foco en personas con discapacidad visual, se persigue con Blind Explorer, una solución de Geko Navsat que guía a estas personas por caminos desconocidos utilizando interfaces sensoriales (ojos/manos/mente libre) para mejorar su autonomía, seguridad y experiencia.

Pero una de las startups que más lejos ha llegado en cuanto a inclusión ciudadana es NaviLens surgida de la colaboración de la empresa Nuevos Sistemas Tecnológicos con la Universidad de Alicante. Se presentan como “una empresa de desarrollo de soluciones altamente innovadores orientadas a la mejora de la autonomía y la calidad de vida de las personas con dificultades visuales a través de la tecnología”.

El esta línea han creado unos códigos QR accesibles para que personas ciegas o con baja visión se orienten tanto en la vía pública como en espacios cerrados. Sus códigos se pueden ver ya repartidos por el sistema de metro y transporte público de España, pero también en el metro de Nueva York, Singapur o Melbourne.