VALÈNCIA. Las empresas familiares son un pilar fundamental para la economía de España y, en particular, para la Comunidad Valenciana. Según el estudio La empresa familiar en España 2023, realizado por el Instituto de la Empresa Familiar, representan el 90% del total de las empresas, generando el 60% del empleo privado y contribuyendo entre el 57% y el 67% del PIB.
Una de las razones más sorprendentes de su relevancia es su capacidad de supervivencia. En la Comunidad Valenciana, el 88% de estas empresas han superado los 20 años de existencia, lo que demuestra su habilidad para adaptarse a crisis económicas.
Más allá de sus objetivos económicos, las empresas familiares suelen reflejar la continuidad de un legado que atraviesa generaciones y enfrenta desafíos específicos, lo que les otorga un fuerte arraigo en el territorio y un enfoque en la creación de valor a largo plazo.
Aunque muchas de estas empresas son pequeñas o medianas, con menos de 10 empleados en la mayoría de los casos (89%), muestran una amplia diversidad sectorial. Operan en ámbitos tradicionales como el comercio, la construcción o la manufactura, aunque también están incursionando en sectores innovadores y tecnológicos.
Su capacidad para perdurar y adaptarse es clave para entender su papel en la economía española y valenciana, más allá de su peso en términos de empleo o PIB.
Con motivo del valor que la empresa familiar supone para la economía valenciana, Valencia Plaza edita este especial dedicado a la empresa familiar. Un trabajo donde se recoge el análisis en números y la experiencia empresarial de diferentes empresas referentes dentro de la Comunitat Valenciana, donde la adaptación al cambio y el crecimiento es su marca de valor.
Así, en este especial Plaza sobre la empresa familiar contamos la vivencia de entidades como Banca March, Cebollas Tara, Choví, PWC, Grupo Forlopd, Grupo La Plana, Grupo Mercadalia, GB Consultores,TM Group, Velarte, Datisa Forwarders y Gibeller.