CASTELLÓ. Medio centenar de proyectos fotovoltaicos. Es el despliegue que está preparando la compañía de energías renovables EnerHi desde la provincia de Castellón para su expansión hacia el norte. La compañía está impulsando numerosas iniciativas vinculadas con la energía solar en Cataluña y Aragón, en concreto en las provincias de Barcelona y Huesca.
La empresa, radicada en Andalucía pero con origen en territorio castellonense, tiene en marcha un plan de crecimiento que tiene el foco en dos tipos de proyectos: iniciativas de mediano tamaño en Barcelona y, en paralelo, proyectos para el autoabastecimiento y las comunidades energéticas en municipios pequeños de Huesca. En total, en ambas regiones EnerHi busca desarrollar hasta 53 iniciativas de energía renovable.
El mayor esfuerzo inversor se va a hacer en Cataluña. "El plan de negocio allí consiste en alcanzar los 350 MW de potencia", explica el presidente y CEO de EnerHi, Antoni Llorens. Más concretamente, cifra entre 30 y 40 los proyectos de renovables que se están redactando en la comunidad catalana y explica que serán iniciativas de entre 5 y 10 MW de potencia unitaria.
El objetivo es que las nuevas plantas fotovoltaicas estén vinculadas de alguna manera al tejido industrial y que se conecten a la red eléctrica. Para ello, se tramitarán las solicitudes de puntos de conexión. "En Cataluña, a diferencia de lo que ocurre aquí -en la Comunitat Valenciana-, la capacidad de la red está todavía sin ocupar", asegura Llorens, quien presenta este como uno de los motivos que le van a permitir poner en marcha allí proyectos de tamaño mediano.
Se trata de una estrategia que, al menos en un principio, no va a seguir la compañía en Huesca, donde el horizonte pasa por otro modelo de plantas de potencia reducida y más vinculado al autoconsumo. Empezará a implantarse en localidades de pequeño tamaño de la comarca de La Litera, al noreste de Aragón. "Queremos impulsar proyectos de autoconsumo y comunidades energéticas, en colaboración con ayuntamientos de la zona" en el ámbito rural, subraya en ese sentido Llorens, quien contó hasta 13 proyectos previstos en esta región.
La compañía ya tiene prevista la apertura de dos sedes, una en cada zona: "Constituiremos dos sociedades, con domicilio fiscal en cada sitio". Y es que uno de los valores añadidos con los que se identifica la compañía es el del arraigo: "Nosotros, en cada lugar donde ponemos en marcha proyectos, abrimos una sede para estar cerca de ellos". Así lo ha hecho en la provincia de Castellón, donde la tiene en Borriol, municipio natal de Llorens, y con ese sistema va a seguir funcionando en las provincias del norte.
En ese sentido, hasta ahora ya se ha contratado a dos empleados en Cataluña y uno en Aragón, que "de momento tienen un perfil más institucional y comercial". De esta manera, Llorens destaca que el diseño técnico y el desarrollo energético y de ingeniería se va a pilotar desde Castellón. "Conforme vayan saliendo más proyectos, iremos ampliando la estructura allí", prevé el presidente de la firma. Se trabaja para que estén en tramitación en un par de meses.
Con estas proyecciones, la entidad busca ampliar horizontes y sumar iniciativas a las que ya tiene en marcha en territorio castellonense, donde maneja ya 11 proyectos con una capacidad de 2.100 MW. Uno de los principales proyectos fotovoltaicos de la firma está ubicado en Segorbe, Nules y Moncofa, con una potencia nominal de 210 megavatios, la ubicación de más de 466.000 placas solares.
Con la iniciativa, el promotor además plantea "volver a poner en producción" el doble del suelo del que ocupen las placas solares -previsiblemente 225 hectáreas-. En este caso, la cifra de inversión alcanza los 140 millones de euros y para su construcción espera emplear a más de 350 personas, además de otras 30 para el funcionamiento de la planta. Además de generar impuestos por valor de 3,3 millones en ICIO y cambio del uso del suelo y de 273.000 euros anuales por IBI e IAE.
Asimismo, para tratar de sortear las hipotéticas reticencias locales plantea diferentes inversiones en los municipios, al estilo de otras iniciativas sociales que ya ha anunciado. Por ejemplo, el convenio con el Ayuntamiento de Segorbe prevé la inversión de casi 110.000 euros anuales en actuaciones de interés social y ambiental y otros 50.000 (ambos revisables en base al IPC) para la mejora de caminos.
