Martín (Zubi Group): "Queremos ser un unicornio de impacto de más de 1.000 millones de valoración"

VALÈNCIA. Zubi Group cumplía este año 2024 su décimo aniversario. Una década en la que el grupo, liderado por Iker Marcaide, ha conseguido grandes hitos en sus cuatro divisiones: Zubi Labs, Zubi Cities, Zubi Capital y Zubi Education/Imagine Montessori School. Así, ha invertido cerca de 70 millones de euros en 60 startups y ha participado en 30 alianzas nacionales e internacionales. No obstante, su apetito va más allá y encara 2025 con importantes retos por delante.

"Queremos convertirnos en un unicornio de impacto. Unicornio porque tengamos una valoración de más de 1.000 millones de euros y de impacto porque afecte positivamente a la vida de más de 1.000 millones de personas", subraya Carlos Martín, CEO de Zubi Group.

- Zubi Group ha cumplido una década, ¿qué es lo que más destacaría de estos diez años de historia?

-Ahora mismo, Zubi es la compañía de inversión en impacto líder en el mercado español. Somo alrededor de 300 personas y tenemos cuatro divisiones. Una que es Zubi Education, donde getionamos y operamos colegios de educación especial Montessori; Zubi Labs, que es un venture builder, por lo que creamos desde cero compañías de impacto en el área de cambio climático y social; Zubi Capital, que es una gestora regulada por la CNMV con tres fondos de inversión uno en venture debt, otro en venture capital y ahora vamos a lanzar otro en Sanidad. Y, finalmente, la cuarta pata es Zubi Cities, dedicada a vivienda sostenible. 

En cuanto a hitos, en el área de educación estamos ampliando el colegio que tenemos en Paterna y el año que vienen tendremos el mayor colegio de educación Montessori de Europa para casi 1.000 niños. En Zubi Labs, tenemos una compañía que se llama Mattecco, que es pionera y líder en producción de hidrógeno verde y que acaba de levantar una ronda de 15 millones de euros. También, contamos con las firmas Nido en aerotermia, y Woodea, que construye en madera, y que ya han sido financiadas por los principales fondos de sostenibilidad que operan en España. 

Por otro lado, en el área de Zubi Capital, el fondo de venture debt lleva ya tres años operando y tiene unos resultados que lo sitúan en el cuartil superior de todos los fondos comparables. Y en Zubi Cities estamos con el gran proyecto del barrio de La Pinada en Paterna. Es un ecobarrio de 1.500 viviendas integrado en la naturaleza a tan solo 10 minutos en coche del centro de Valencia, respetuoso con el medio ambiente y orientado a las personas. En este proyecto, apostamos por una movilidad sostenible apoyada en el modelo de ciudad de los 15 minutos.

- A día de hoy, ¿cuáles son los números de la compañía a nivel de empleados, facturación y de inversión?

-Somos unas 300 personas y hemos invertido alrededor de 70 millones de euros de capital propio. A nivel facturación, nosotros no consolidamos a nivel grupo, sino que cada pata tiene su propia sociedad.

-¿Alguna de sus cuatro áreas pesa más que otra en el grupo?

-Depende. En facturación, la más importante es la rama de colegios porque es la que primero lanzamos y la más madura. No obstante, a nivel de valoración, por ejemplo, Zubi Labs tiene un porcentaje de valor de mercado importante.

-Analizando cada una se sus divisiones y empezando por vivienda, ¿cuáles son los proyectos actuales de Zubi Cities?

-Además del barrio de La Pinada, en el que se lleva trabajado años porque es a largo plazo, tenemos dos promociones pequeñas en marcha. Una, que ya está en construcción en Burjassot de 15 viviendas y que estará funcionando a finales de 2025; y otra también en este municipio de 60 unidades, que empezaremos en 2025 para entregar en 2026. Ambas son bajo el modelo del build to rent (BTR). Todo ello se alinea con el triple impacto: no solo buscamos rentabilidad económica, sino un impacto social y medio ambiental. 

-Hace unos meses decidieron vender un suelo a Firmus en Torrent, ¿por qué tomaron la decisión de desinvertir?

-El motivo principal es que compramos muchísimo suelo hace 2-3 años y nos hemos dado cuenta de que promover y construir ese volumen va a costar mucho esfuerzo. Por ello, decidimos que una parte tenía mucho sentido desinvertirla.

-¿Cuál es su cartera actual de suelo y qué planes tienen en marcha para ellos de cara al próximo año? ¿Promover o, por el contrario, desinvertir?

-Tenemos más de 300.000 metros cuadrados de suelo en la provincia de Valencia. La idea sería promover y construir todo en los próximos años y desarrollar 1.600 viviendas. De ellas, la mayoría está en La Pinada y luego los otros dos proyectos en Burjassot. La parte de desinversión fue algo muy puntual y muy oportunista. Para 2025, vamos a comprar suelos para promover en otras partes de España. Estamos todavía identificándolos y todavía no hay nada cerrado, pero queremos hacer promociones más pequeñas en otras localizaciones como Madrid y Barcelona.

- ¿Cree que tras la Dana se hace más necesaria todavía la vivienda asequible?

-Completamente. De hecho, la familia Markaide-Albors tiene dos fundaciones: Socialnest y la Fundación Felisa. A través de esta última, han lanzado un fondo de apoyo a la reconstrucción de la Dana y parte de esos esfuerzos van a ser inmobiliarios. Básicamente va a consistir en ayudar a los que han perdido su casa a reformarla, incluso proveer, a través de prefabricados, soluciones habitacionales transitorias hasta que se reformen las casas que se han perdido. 

-Me refería al problema de la vivienda actual y el hecho de que Zubi se posicione el mercado del alquiler asequible.

-Nosotros lo que hemos detectado es que la gente joven no tiene acceso a la vivienda porque no puede pagar el 20% de la entrada. Con los precios de mercado actuales y el poco ahorro no pueden acceder y, por eso, nosotros apostamos por el build to rent -construir para alquilar- para que sea asequible y el alquiler no suponga más del 30% del salario medio de los usuarios. 

- ¿Cómo avanza el desarrollo del barrio de La Pinada en Paterna? ¿Cuándo podría ser una realidad?

-Actualmente, se encuentra en la fase de ordenación urbanística, y su tramitación sigue avanzado con el Ayuntamiento de Paterna y la Generalitat. Por tanto, nos encontramos en la fase de ordenación estructural, y aunque estamos avanzando a buen ritmo, todavía queda bastante tramitación urbanística por delante que no depende de nosotros sino de las administraciones, por lo que nos resulta complicado estimar un plazo.

-Han lanzado dos fondos de inversión para invertir en emprendimiento de impacto. ¿En qué punto se encuentran?

-Tenemos un fondo de venture debt que lleva operando tres años y ya está en el cuartil superior de rentabilidad. Lo que estamos haciendo es lanzar un segundo fondo para el año que viene  porque hay inversores que nos dicen que quieren participar en este nuevo producto. Por tanto, vamos a abrir un segundo fondo de venture debt para levantar 100 millones de euros el año que viene. Todavía no hemos cerrado su comercialización porque a día de hoy estamos cerrando el primero, pero se empezará el año que viene. 

Además, tenemos otro fondo de venture capital que va focalizado en diversidad e inclusión social y que invierte en equity. Lleva ya seis o siete inversiones, pero solo un año y medio de vida y, por tanto, este todavía está en fases muy tempranas. Finalmente, tenemos un tercer fondo que operará en el sector de la sanidad y que todavía está en fase de registro en la CNMV. Por tanto, no está operativo, pero esperamos que esté en 2025.

- También cuentan con Zubi Labs, su venture builder. ¿Cómo es actualmente el modelo? 

-Estamos integrados verticalmente. Es un modelo en el cual nosotros tenemos un equipo de estrategia, que idea conceptos novedosos y que puedan tener ese impacto medio ambiental y social que buscamos, pero que, a la vez, sean buenos negocios económicamente. Empezamos desde la fase de ideación y después buscamos un equipo de gestión de cofundadores que puedan ser management de esa startup. Ponemos el primer millón de euros de capital para la compañía y si funciona, después hay otros inversores, como ha sucedido con Matteco, Nido y Woodea, que ya acompañan en las fases de crecimiento. 

-¿Cuáles son las últimas compañías que han puesto en marcha?

-Tenemos un el portfolio 10 compañías. 

- ¿En qué áreas o sectores quieren incidir?

-De esas 10, siete están en el área de clima. Queremos continuar esa labor, pero también queremos añadir compañías que trabajen en el área de impacto social. Por ejemplo, tenemos una compañía como es Kämpe, que lo que hace es ayudar a jóvenes que quieren trabajar en oficios como electricistas o fontaneros a encontrar trabajo en empresas y, a la vez, nosotros mismos les damos formación mientras trabajan. Al final, después de tres años, han conseguido unos ingresos y acabar con una titulación. Eso es impacto social porque es un colectivo en riesgo de exclusión.

-¿Tienen pensado poner en marcha nuevas compañías?

-Lanzamos una nueva compañía cada tres meses. Al año, hablamos de entre 4-5 nuevas firmas. De cara al 2025, nuestra idea es 5-6 compañías nuevas.

- ¿Cree que es necesaria una mayor inversión en impacto? 

-Absolutamente. La inversión en impacto ahora mismo es menos del 1% de la inversión total en todo el mundo. Para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)  se calcula que tendría que ser más del 10% del total. Por tanto, estamos en una fase muy incipiente.

-¿Por qué se invierte tan poco?

-Es una cuestión cultural y de mentalidad. Todavía mucha gente asocia la inversión en impacto a la no rentabilidad financiera y a una cuestión de filontropía. No se dan cuenta de que haciendo inversión de impacto puedes conseguir incluso mejores retornos económicos. Eso la gente lo está aprendiendo ahora.

-Por tanto, ¿se irá afianzado este modelo de inversión en los próximos años?

-Absolutamente. Hace tres años nadie sabía lo que era la inversión de impacto y está surgiendo ahora. Es una ola que está aquí para quedarse y que está muy favorecida por la regulación de la Unión Europea, que prácticamente solo invierte en fondos de impacto. Por tanto, ha comenzado una ola, pero es imparable y seguramente en los próximos años lleguemos al 10% de ese objetivo.

-En este contexto, ¿es difícil encontrar inversores?

-Hay dos tipos de inversores. Está el institucional, que son los grandes fondos internacionales, y ellos por el empuje de la regulación están obligados a invertir en impacto. Con ellos, el diálogo es muy fluido. Luego está el inversor privado, que sería un family office. En este caso, hay dos generaciones: la más antigua y las nuevas. Obviamente es más fácil el diálogo con las nuevas generaciones porque están más motivadas y lo entienden mejor.

-Por otro lado, está su división de colegios. Actualmente tienen dos centros bajo la marca Imagine Montessori School. ¿Se plantean nuevos proyectos?

-Sí. Estamos planteando una nueva ubicación en Barcelona, que se abrirá en dos años. Tenemos el suelo y en los próximos años empezaremos a construir, pero todavía queremos mantener la confidencialidad porque estamos negociando detalles con el Ayuntamiento.

- Tras la Dana pusieron en marcha Zubi Help. ¿Qué necesidades vieron que había que cubrir? ¿Hasta cuándo esperan tener en marcha esta línea?

-El grupo ha dado apoyo en dos fases. La primera, es decir, el primer mes y medio, consistió en ofrecer ayuda urgente e inminente de comida, materiales de primera necesidad... Para ello, pusimos a disposición una fábrica de Matteco en Paterna para recepcionar trailers que venían con ayuda de toda España. Paquetizábamos los pedidos que, a través de furgonetas, iban a la zona cero. Ahora, queremos seguir apoyando en la labor de reconstrucción y vamos a hacer un esfuerzo más a largo plazo. Para eso, dentro de la Fundación Felisa se ha creado un fondo Dana, que irá destinado a dar soluciones de renovación de casas, provisión de vivienda temporal... Por tanto, Zubi Help se ha integrado en Fundación Felisa.

- ¿Se plantean la apertura de alguna nueva área?

-No. Lo que queremos hacer es consolidar las cuatro áreas que tenemos y llevar a cabo estos ambiciosos proyectos que tenemos de crecimiento.

 -¿Qué objetivos se marca Zubi Group para el próximo año?

-Lo que queremos es convertirnos en un unicornio de impacto. Unicornio porque tenga una valoración de más de 1.000 millones de euros y de impacto porque afecte positivamente a la vida de más de 1.000 millones de personas. Por tanto, de cara a 2025 queremos tener el colegio Montessori más grande de Europa; el fondo venture debt más rentable de España y lanzar otros dos; en Zubi Labs, que las empresas Nido, Woodea y Matteco sigan creciendo con capital extranjero; y en Zubi Cities progresar muy positivamente con el barrio de La Pinada.