VALÈNCIA. Congreso histórico en el PP de València ciudad tras siete años sin cónclave y después de atravesar un contexto "delicado" en la organización a nivel local. Tiempos difíciles que ya han pasado, explica la única candidata a presidir el partido en el Cap i Casal, María José Català. Candidata a la Alcaldía de València en 2019 y líder de la oposición desde los últimos comicios, Català asume que la mala época "está superada" y que nadie está "en condiciones" de dar lecciones "de nada" al PP.
Así, este congreso se presenta como la oportunidad para "reiniciar el proyecto" del anterior equipo popular, con la exalcaldesa Rita Barberá al frente. De ella y su equipo, y de su herencia, muestra "orgullo". "Somos grandes porque ellos hicieron grande este proyecto", asegura. Pero ahora toca adaptarse, insiste, con planteamientos más próximos a la sociedad actual, con el medioambiente, la movilidad sostenible, la cultura o el deporte como estandartes.
La ponencia política constituye casi un programa electoral, algo "bastante atípico porque a tres años vista es poner todas las cartas sobre la mesa". Destierra, eso sí, la idea del antiguo equipo popular de prolongar la avenida de Blasco Ibáñez a través del Cabanyal. "Un decreto del Ministerio de Cultura lo hace inviable", explica, por lo que "no es una renuncia", sino que "hay que mirar hacia adelante".
Sobre quién será su 'número dos', prefiere no pronunciarse, y sobre la presencia de València en la organización provincial tras su propio congreso, asegura que la ciudad ha de estar presente en "el discurso provincial", pero también "de forma muy clara en la organización". Y lo tiene que hacer "de manera acorde a su peso"; esto es, próximo al 50%. A nivel nacional, es tajante: "Yo soy generación Casado y creo que vamos a dar mucho que hablar".
Sobre estas y otras cuestiones, Valencia Plaza conversa con la futura presidenta local en la nueva sede del PP de la ciudad, todavía por inaugurar.
- En la ponencia ya se habla de que no es un proyecto nuevo, sino un proyecto renovado. ¿Es este congreso un renacer del PP de València?
- Sí, por supuesto. El congreso parte de nuestro orgullo por la herencia y el legado en la ciudad del PP. Pero sabemos que es un momento para reiniciar el proyecto, la estructura orgánica y rearmarnos. Estamos muy orgullosos de lo que hemos hecho hasta ahora, pero somos conscientes de que hay que reiniciar el proyecto. Hace falta un proyecto de ciudad y un proyecto de partido diferentes, acordes al modelo de sociedad que tenemos hoy. Es decir, adaptarse.
- Ha hablado del legado. ¿Qué presencia tiene en el congreso y en el nuevo PP el antiguo proyecto con la exalcaldesa Rita Barberá al frente?
- Para mí, el PP de Rita Barberá es nuestro punto de partida. Somos grandes porque ellos hicieron grande este proyecto, y esta ciudad le debe mucho a ese liderazgo y a ese equipo. A partir de ahí, siento que ha tenido absoluta generosidad para transmitirnos todos sus conocimientos, dar un paso atrás en el momento oportuno, e intentar ayudar en el momento en que los necesitamos, pero dejando que hiciéramos nuestro camino.
- Se ha elaborado una extensa ponencia política. Es casi un programa electoral.
- Es un programa. Percibimos, sobre mí y sobre el PP de València, la necesidad de transmitir nuestro proyecto. Se nos pregunta permanentemente. Es bastante atípico porque a tres años vista es poner todas las cartas sobre la mesa y adelantarnos mucho en los tiempos. Pero percibimos inquietud por conocer nuestro proyecto de ciudad, y si existe, creemos que se nos entiende como una alternativa muy real dentro de tres años para tener la gestión del Ayuntamiento.
- ¿Qué diferencia hay con el anterior proyecto del PP para la ciudad?
- La ciudad es distinta a la que cogió Rita Barberá hace casi 30 años. Urbanísticamente, la ciudad está muy resuelta, aunque falta terminarla con algunas actuaciones concretas. Queda pendiente la apertura de València al mar, nosotros la hemos resuelto a través del PAI del Grao. El proyecto responde a una sociedad con otras inquietudes. Existe mucha inquietud por la preservación del medio ambiente, por disfrutar de las ciudades y ganar espacio para el peatón, hay inquietud por la movilidad sostenible, por la política social y por cuestiones por las que hace 30 años no existía. El PP se ha adaptado a esas nuevas inquietudes.
Hay un punto de vista muy personal, el cultural. No puedo evitar haber sido consellera de Cultura, ser músico, y estar sensibilizada con la cultura. Hay una apuesta por hacer de València una ciudad de la cultura, de referencia en Europa y no sólo en la cultura en general, ni en las artes gráficas o escénicas, sino concretamente de la música. También hay otro punto muy personal: la educación. Hay una apuesta que responde al contexto actual, donde la gente se preocupa mucho por los hábitos de vida saludables. En la parte cultural, esta ciudad tiene mucha materia prima para ser una capital del deporte. Hasta ahora, inversores privados han hecho posible que se nos sitúe como la ciudad perfecta para algunas disciplinas deportivas, pero ahora toca a la ciudad apostar por eso.
- Sobre la apertura de la ciudad al mar: aunque ya se había entendido con su abstención en el Pleno sobre el nuevo Plan Especial del Cabanyal, parece explicitarse en la ponencia que se rechaza ya la opción de prolongar Blasco Ibáñez.
- Partimos de una realidad incontestable: un decreto del Ministerio de Cultura hace inviable la prolongación. Por tanto, no es que el PP renuncia, sino que es inviable. Fui consellera de Cultura en esa etapa y debatí mucho con la alcaldesa, porque la Generalitat no podía levantar una protección patrimonial determinada por el Ministerio. Como consellera de Cultura que he sido, pienso que la fachada marítima tiene mucho valor patimonial. Por tanto no es una renuncia, sino que hay que mirar hacia adelante. Creo que aquel era un buen proyecto para aquel momento, y lo único que pasó es que colisionó con aquella protección patrimonial, con la que yo también estoy sensibilizada. Pero este momento requiere otra cosa: el PAI del Grao. Porque urbanísticamente hay que acabar la ciudad por ahí, porque el Jardín del Túria termina en seco y ha de acabar en el mar o en la fachada marítima.
- ¿Cree que hay consenso en el partido, entre militantes, afiliados y simpatizantes, acerca de esa solución?
- No lo sé. Hasta el domingo hay plazo de enmiendas. Si alguien considera que es viable otra solución, puede plantear enmiendas. Para mí resulta difícil desde el punto de vista del conocimiento profundo de la realidad legal.
- El congreso es una primera piedra para conseguir la Alcaldía en 2023. ¿Qué habrá cambiado para entonces que no ha existido en 2019?
- En primer lugar, yo tuve cinco meses. Me nombraron en enero y las elecciones fueron en mayo. Necesitaba más tiempo para la campaña, y aún así nos quedamos a las puertas de conseguirlo. También habrá cambiado algo que viene de la mano del congreso: el partido se habrá rearmado mucho. El contexto que hemos atravesado la última legislatura era delicado y era difícil que orgánicamente no nos resintiéramos. Habrá un partido fuerte, que está todos los días viendo cómo se acerca gente y se ilusiona con el proyecto, y un partido que va a estar contando los tres años su proyecto de ciudad. Desde ya voy a estar permanentemente contando el proyecto. Porque para mí es una alternativa clara a Ribó. El futuro que ofrece el PP a esta ciudad no tiene nada que ver con lo que ofrece Ribó y un PSOE amilanado a sus intereses e imposiciones.
- ¿En quién ha pensado para ser el secretario general de la ciudad?
- En muchas personas que me gustan, pero me voy a dar la próxima semana para aterrizar las piezas de mi puzle. Hay mucha gente que está trabajando conmigo de forma muy clara. Hay mucha gente identificable en ese camino, pero la próxima semana intentaré que de manera orgánica el partido responda al mensaje que hemos trasladado.
- ¿Será alguien próximo al grupo municipal?
- Bueno... Seguro que hay gente del grupo municipal en responsabilidades de nivel en el partido.
- Incluyen como novedad la figura del coordinador general. ¿Por qué es necesaria?
- Porque este partido tiene mucha riqueza territorial. Tenemos 10 distritos y Juntas Municipales. Eso hace que los partidos tengamos que tener gente en todos los distritos y que esté pendiente de ellos. Por ello un partido tiene que tener distritos y que estén muy vivos. Para mí, es necesario en este momento la figura de un coordinador general que trabaje de la mano de la secretaría general para responder a esa realidad.
- Van a recoger un código ético para pedir una conducta ejemplar a los representantes. ¿Es una forma de pasar página de la historia reciente?
- Más que de pasar página, es una manera de ofrecer a la ciudadanía lo que pide a la clase en este momento. La mala etapa está superada. Pero de esa etapa difícil para toda la clase política ha surgido una realidad, que es la necesidad de responder a la inquietud de la ciudadanía de ser transparentes, honestos, honrados, tener códigos éticos y ser absolutamente claros en nuestro discurso. No creo que nadie esté en condiciones para darnos lecciones de nada, y más con los últimos nombramientos en la delegación de Gobierno.
- A nivel provincial, ¿qué áreas le gustaría llevar?
- València tiene que intentar formar parte del puzle provincial de manera acorde a su peso en la estructura provincial. Muy cerca del 50% de votantes y afiliados son de la ciudad. Por tanto, hay dos partes importantes donde tenemos que estar. Una es el discurso provincial, porque València tiene que ser líder. Pero también de forma muy clara en la organización. No tanto por estar, sino por aportar. Soy consciente de que la provincia llega de una etapa muy difícil, y si València puede empujar a la provincia, y lo ha hecho según los últimos resultados electorales, vamos a estar ahí para hacerlo.
- ¿Qué le parece la posibilidad de que Susana Camarero sea 'número dos' en la provincial?
- Son quinielas sobre las que no me gusta pronunciarme. Conozco bien la forma de pensar de Vicente Mompó, hablamos mucho, y creo que es una decisión absolutamente suya. Yo voy a apoyarle mucho porque quiero que su proyecto sea exitoso. Me podré pronunciar cuando tome la decisión.
- ¿Se descarta María José Català para liderar PPCV?
- En este momento María José Català no contempla liderar el PPCV; contempla liderar la ciudad de València. En este momento, no contemplo otra cosa que no sea liderar la ciudad y ganar la Alcaldía en 2023.
- ¿Cómo ve el proyecto de Pablo Casado a nivel nacional?
- Yo soy generación Casado y creo que vamos a dar mucho que hablar.