MADRID (EP). La cotización de la criptomoneda bitcóin proseguía este jueves su meteórica escalada tras superar la cota de los 38.000 dólares, con una revalorización superior al 10% en la sesión y por encima del 30% en lo que va de 2021, lo que amplía a alrededor del 377% la subida acumulada en un año. Según datos de Coindesk, la criptomoneda ha llegado este jueves a cambiarse por un máximo de 38.368,01 dólares, más de un 10% por encima de los valores registrados ayer.
"Otro día y otro récord", comenta Simon Peters, analista de la plataforma de inversión en multiactivos eToro, señalando que la demanda de activos alternativos está aumentando y las instituciones de todo el mundo están viendo bitcóin como un activo de crecimiento y como una forma de protegerse contra el gran temor de 2021: la inflación".
"La generosidad financiera que hemos visto de los bancos centrales y los gobiernos ha erosionado el valor de los activos tradicionales como el efectivo y los bonos. Esto no muestra signos de disminuir, por lo que es poco probable que el impulso detrás de bitcóin se desvanezca en el futuro cercano", augura el experto, para quien el mercado de criptoactivos se está moviendo hacia el 'mainstream'.
En este sentido, en una reciente entrevista con Europa Press el cofundador y consejero delegado de Bitpanda, Eric Demuth, afirmaba que "bitcóin es oro digital y, en varios aspectos, incluso mejor que el oro físico (más barato de almacenar y mover; mejor divisibilidad; a prueba de manipulaciones y fácilmente verificable). Eso es algo que muchos inversores pequeños ya entienden y a lo que se están adaptando inversores institucionales". El más reciente impulso en la escalada del bitcóin vino esta semana de la mano de JP Morgan, cuyos analistas planteaban la posibilidad de que la criptomoneda compita con el oro como activo refugio, lo que en el largo plazo podría disparar su cotización al entorno de los 146.000 dólares.
Esta postura contrasta con la posición mantenida hace unos años por el presidente y consejero delegado del banco estadounidense, Jamie Dimon, quien en 2017 tachaba de "fraude" al bitcoin, aunque meses después rectificó señalando que las emisiones de criptomonedas (ICOs) deben mirarse "individualmente". Asimismo, esta semana la Oficina del Controlador de la Moneda de EEUU aclaraba que los bancos nacionales podían usar stablecoins para realizar actividades de pago y otras funciones.
Desde IG, Diego Morín explicaba que las fluctuaciones que se están observando alrededor de las criptomonedas "se deben al fuerte posicionamiento de los inversores institucionales, entre ellos, los bancos de inversión que ven factible la conquista de los 50.000 dólares en los próximos dos meses".