Grupo parlamentario Unides Podem. Foto: EPVALÈNCIA. De todo, menos tranquilo. Así fue el último episodio del serial de Unides Podem para formalizar el relevo de Naiara Davó por Pilar Lima como síndica del grupo parlamentario en Les Corts. Un rifirrafe como colofón final a unas semanas de tensiones internas tras el que Lima fue ratificada como portavoz de la confluencia en el Parlamento. La quinta que tienen los morados en cinco años y medio de representación en la Cámara valenciana.
La jornada comenzó con la confirmación de Davó a la radiotelevisión valenciana, À Punt, de que sus diputados afines -Ferran Martínez, Irene Gómez y Beatriz Gascó- acatarían el mandato del Consejo Ciudadano Valenciano (CCV) de Podem y no se opondrían al cambio. Intervención en la que, eso sí, envió algún que otro recado a la coordinadora de la formación y sucesora en el 'trono' de la portavocía, Pilar Lima.
"Los últimos días he estado intentando que volviéramos al consenso, a la unidad y a garantizar el mandato que nos habían dado las inscritas. Parece que frente a la irresponsabilidad y ambición de algunas, nosotras volveremos a ser las más responsables y cederemos una de las cuatro firmas para poder hacer efectivo el cese y el cambio para que Lima sea síndica mostrando así nuestra disconformidad por alejarnos del proyecto que nos habían dado nuestros militantes", manifestó Davó. Y apenas eran las 9:30 de la mañana.
Llegó la hora del encuentro y los afines de Davó no cedieron una, sino todas las rúbricas. Pero en el acta, y no en el comunicado a la Mesa. Y este fue, precisamente, el motivo del último desencuentro en el grupo parlamentario: si el escrito a trasladar a la Mesa de Les Corts lo debían firmar todos o no.
En este punto, conviene apuntar que el artículo 24 del Reglamento de Les Corts, el que se toma como referencia para el caso, establece la forma en la que se constituyen los grupos parlamentarios al inicio de la legislatura y recoge que el grupo parlamentario "designará, de entre ellos y en el mismo escrito, al síndic y a los portavoces adjuntos que, eventualmente, pueden sustituirle". En base a ese artículo, el grupo parlamentario Unides Podem que se constituyó en 2019 "reconoció" a Davó como su portavoz. Los servicios jurídicos planteaban entonces que si se quería realizar un cambio sobre la sindicatura, los diputados que representan a ese grupo -o al menos la mayoría absoluta- deberían volver a trasladar y reconocer ante la Mesa de Les Corts a su nueva síndica. En este caso, Pilar Lima.
Con esta premisa, el sector afín a Davó acudió a la reunión dispuesto a ceder la firma de solo uno de ellos: Ferran Martínez. Sin embargo, tras una nueva consulta a los servicios jurídicos a través de su representante en la Mesa, Cristina Cabedo, los letrados advirtieron que bastaría con que les trasladaran un escrito firmado por alguien de la dirección -la síndica o portavoces adjuntas; es decir, Davó, Lima o Estefanía Blanes- "en el que se expusiera que el grupo parlamentario había debatido y acordado el cambio de portavoz tal y como quedaba recogido en el acta de la reunión celebrada", explican fuentes del grupo.
Así pues, el debate se centró en qué recogería el acta de la cita. La nueva dirección planteó que quedase plasmado que el grupo acataba por "unanimidad" la decisión del partido -hace dos semanas el CCV de Podem apoyó con 27 votos el nombramiento de Lima como síndica-. Los afines a Davó, sin embargo, no estaban de acuerdo con ese redactado.
Si bien planteaban que sí asumirían el mandato de Podem, Davó, Martínez, Gascó y Gómez ponían reparos a que el acta incluyera la palabra "unanimidad", ya que los tres últimos habían interpuesto un recurso a la Comisión de Garantías del partido al entender que se habían producido "deficiencias" en el proceso para relevar a la portavoz y el redactado les parecía incongruente.
Finalmente, tras una fuerte tensión en la que, incluso, los diputados afines a Davó interrumpieron unos minutos la cita para debatir su postura, los ocho diputados firmaron el acta en el que reconocían que el grupo parlamentario acataba la decisión del partido por unanimidad y reconocía que Lima era su nueva portavoz. La decisión ahora será trasladada a la Mesa de Les Corts mediante un texto que, por el contrario al acta, tan solo firmará una diputada, Blanes, y no los ocho.
En definitiva, un debate sobre cuestiones -quién firmaba qué- de cuestionable -o nula- trascendencia, pero que demuestran que nadie quería salir del encuentro como "perdedor" de nada. La fórmula mixta (acta aprobada por unanimidad y comunicado a la Mesa de Les Corts solo con una firma) consiguió desbloquear el debate y Unides Podem ya tiene nueva síndica.
