El presidente de Finlandia, Sauli Niinisto. Foto: BERND VON JUTRCZENKA/DPAVALÈNCIA (EP). El presidente de Finlandia, Sauli Niinisto, ha fijado el 12 de mayo como la fecha límite para declarar su posición sobre su posible incorporación a la OTAN, día que coincide con un encuentro de los grupos parlamentarios, y dos días antes de que el partido Democrático de la primera ministra, Sanna Marin, también declare su postura.
Si coincide la postura de ambos a favor de la adhesión, el Gobierno finlandés podrá iniciar los trámites de incorporación, según declaraciones del presidente al periódico 'Ilta-Sanomat', realizadas este sábado.
Si bien hay muchos indicios de que Finlandia podría solicitar su ingreso en las próximas semanas, el país está en estrecho contacto con la vecina Suecia para tomar una medida consensuada de protección ante la invasión rusa de Ucrania.
El ministro de Exteriores de Finlandia, Pekka Haavisto, destacó el viernes, tras una reunión con su homóloga sueca Ann Linde en Helsinki, la importancia de que los dos países tomen decisiones "en la misma dirección y en el mismo plazo".
La invasión rusa de Ucrania ha llevado a una nueva urgencia de seguridad para Estocolmo y Helsinki, que verían con buenos ojos unirse a una organización militar. Para ello mantiene un proceso de consultas parlamentarias y se espera que a mediados de mayo emitan una decisión final sobre unirse a la alianza militar.
Suecia y Finlandia no forman parte pero son los dos socios más estrechos y participan ya en misiones y operaciones. Eso hace que las negociaciones formales para entrar en la alianza se puedan resolver "en un par de días", ha señalado un portavoz aliado a Europa Press.
El paso más arduo es el que tiene que ver con la ratificación por los distintos trámites que hay en cada miembro de la OTAN. Este procedimiento burocrático se demorará meses y es lo que hace que el ingreso formal no llegaría hasta finales de 2022 o principios de 2023, algo que inquieta a Suecia y Finlandia que quieren contar con garantías de seguridad para este interregno, después de que Moscú haya amenazado con represalias si se unen a la OTAN.
