Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA (VP/EFE). La Fiscalía de Valencia ha iniciado una investigación sobre el incumplimiento del turno de vacunación contra el coronavirus por parte del alcalde de Rafelbunyol, Fran López, al exsecretario general de CCOO en la Comunitat Valenciana Arturo León y al secretario de Salud de UGT PV, Jesús García.
El Fiscal Portavoz de Valencia, Jaime Gil, ha informado de la apertura de diligencias tras la interposición de dos denuncias, una de ellas relativa al alcalde de Rafelbunyol y otra a los líderes sindicales. Ahora, la Fiscalía tiene seis meses –aunque no es necesario que cubra este plazo– para decidir si archiva la investigación o la presenta ante un juzgado.
La decisión desde Valencia coincide en el tiempo con la formulación de denuncia por parte de la Fiscalía de Alicante contra el alcalde de La Nucía y diputado provincial, Bernabé Cano (PP), y contra los alcaldes de El Verger y Els Poblets, Ximo Coll y Carolina Vives (ambos matrimonio y del PSPV) por haber vulnerado el orden de vacunación establecido en los protocolos oficiales. Así, considera que existen indicios de la comisión de un delito de cohecho impropio pasivo.
El alcalde de Rafelbunyol, el socialista Fran López, reconoció que se vacunó contra el coronavirus antes de su turno porque se lo ofrecieron y no lo pensó. Pidió disculpas, aunque no ha dimitido. El PSPV-PSOE le ha abierto un expediente disciplinario y le ha suspendido cautelarmente de militancia por su actuación, puesto que no estaba incluido en ninguno de los grupos de riesgo y no le tocaba el turno.
El exsecretario general de CCOO en la Comunitat Valenciana Arturo León confirmó que había recibido la primera dosis y defendió la legalidad y la ética de su vacunación, pero también insistió en que quería preservar "el buen nombre" del sindicato, razón por la cual renunció a su cargo ante la polémica desatada. La Fiscalía de Valencia también investiga estos hechos, aunque tuvieron lugar en el hospital General de Alicante, donde contaba con plaza como técnico de riesgos laborales, aunque no ejercía desde hacía 16 años por estar liberado.
Por su parte, el secretario de Salud de UGT PV, Jesús García, reconoció haber recibido las dos dosis de la vacuna contra el coronavirus a pesar de ser liberado sindical y, por tanto, no estar en la primera línea sanitaria. Puso su cargo a disposición del sindicato, pero la Ejecutiva respaldó su actuación.
Junto a ellos, también fue polémica la vacunación del que fuera el fiscal jefe de la provincia de Castellón José Luis Cuesta, quien dimitió a finales del pasado enero y desde mayo está incorporado en Valencia. Debido a que una de las denuncias también se dirige contra él, ésta se ha remitido a la Fiscalía de Castellón para que decida si abre igualmente diligencias.
