VALÈNCIA. La dirección de Ford España ha comunicado a los representantes sindicales de la factoría su decisión de presentar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) urgente para toda la plantilla, unos 7.400 trabajadores, ante la crisis provocada por el coronavirus.
Desde UGT, el sindicato mayoritario en la factoría, explican que la compañía les ha trasladado que el ERTE era inevitable a raíz de los últimos acontecimientos y ante la incertidumbre sobre cuándo se recuperará la normalidad en la fábrica valenciana, que está sin actividad productiva desde este lunes. "Ante esta situación imprevisible e incontrolable, la empresa anuncia que va a acudir a un ERTE urgente", explican desde el sindicato.
Asimismo, quedan suspendidas sine die las negociaciones sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) planteado por la dirección debido "a las circunstancias excepcionales que estamos viviendo toda la sociedad", explican. Este expediente de carácter extintivo que la empresa ha planteado afecta a 410 personas en Almussafes: 255 trabajadores del área de montaje; 102, en Carrocerías; 30 en Pinturas; 12 en Calidad y 11 en el área de Logística.
La posibilidad de un ERTE sobrevolaba en el ambiente desde hace días y después de que compañías como Seat o Renault ya lo hubieran anunciado. Desde este lunes Almussafes está sin actividad productiva para evitar la expansión del virus en la fábrica donde ya se han confirmado tres positivos.
Con el fin de evitar el ERTE en la planta valenciana, UGT había propuesto adelantar las vacaciones de Semana Santa a la próxima semana coincidiendo con el cierre de la fábrica, pero no ha podido ser. Según explican, la dirección ha agradecido la propuesta, pero la situación ha abocado a este expediente.
Precisamente, este mismo martes la compañía anunciaba la paralización temporal de todas sus plantas de vehículos y motores en Europa a partir de este jueves 19 de marzo y durante varias semanas para evitar la expansión del brote.
"Si bien el impacto del coronavirus hasta ahora en nuestras instalaciones ha sido limitado, sus efectos en nuestros empleados, distribuidores, proveedores y clientes, así como en la sociedad europea en general, no tienen precedentes", señalaba el presidente de Ford en Europa, Stuart Rowley en un comunicado en el que indicaba que esta suspensión puede durar "varias semanas", dependiendo de cómo se vaya desarrollando la pandemia, las restricciones nacionales que sean impuestas y la situación de los proveedores de componentes.
"Debido al impacto dramático que esta crisis está teniendo en el mercado europeo y en la industria de componentes, junto con las recientes acciones de los países para restringir todos los viajes menos los esenciales y el contacto personal, hemos decidido parar temporalmente nuestras principales factorías en Europa continental", añadía Rowley.
