VALÈNCIA. Ford Almussafes cerró por vacaciones el pasado viernes con su mayor producción de vehículos en toda una década. La cifra alcanzada fue de 417.002 unidades -22.891 más que el año anterior, cuando la enseña del óvalo produjo 394.111 coches-. Se trata del mejor dato desde el año 2007, cuando la compañía fabricó en su planta valenciana un total de 418.983 unidades, según el histórico de la industria automovilística.
A su vez, supone la cuarta mayor cifra de los 40 años de historia de Ford Almussafes. La más alta se registró en 2004, con 449.101 coches; seguida de la de 2006, que fue de 420.544. En aquellos años el modelo estrella de la planta era el Focus, seguido del Fiesta y el Ka. También se producían unidades del Mazda 2.
En a actualidad, Ford Almussafes -tras superar la crisis de producción que tuvo en 2012 su momento más delicado- ensambla vehículos de mayor valor añadido y complejidad de montaje, de modo que resultaría difícil alcanzar aquellos récords de unidades. No obstante, la compañía ha logrado rebasar al los 400.000 tras dos intentonas en 2015 y 2016, años en los que ya ha producido a pleno rendimiento los cinco modelos que fabrica: Kuga, Connect, Mondeo, S-Max y Galaxy.
Según los datos de 2017 desglosados por UGT-Ford, el principal impulsor del crecimiento en 2017 ha sido el Ford Kuga, que ha pasado de 149.523 unidades en 2016 a 193.955 en el año que ahora acaba. En consecuencia, el modelo estrella de Almussafes ya supone el 46,5% de la producción de vehículos de toda la factoría.
Por contra, a excepción de la Connect, que ha pasado de 108.154 a 113.700 unidades, el resto de los modelos han caído. El Mondeo ha pasado de 77.192 a 60.728; el S-Max, de 39.980 a 30.125; y el Galaxy, de 19.262 a 18.494.
Tal circunstancia ha supuesto que, pese a la excepcional cifra de producción, 2017 haya sido un año agitado en lo laboral. Y todo pese a haberse adjudicado a finales de año la fabricación para los próximos años del nuevo Ford Kuga, que supondrá una inversión en la planta de 750 millones, según cifró la compañía.
El escenario es que el resto de modelos están flaqueando y la multinacional ya da por hecho que sufrirá bajada en la producción en 2018 hasta los alrededor de 403.000 vehículos fabricados. Tanto es así que, pese al logro del Kuga, no dejó pasar ni una semana para solicitar a la plantilla nuevos ajustes laborales que hagan atractiva la planta da cara a nuevas adjudicaciones.
En estos momentos empresa y sindicatos están en negociaciones para tratar los recortes propuestos por Ford, si bien la multinacional ya ha anunciado que prescindirá de 280 trabajadores eventuales.
La mercantil ya ha concretado a la plantilla los pluses y complementos salariales en los que quiere recortar de cara al próximo convenio laboral de la factoría. "Se trata de hasta 20 conceptos de remuneración en los que es posible conseguir reducciones de coste que mejorarán la competitividad de la planta", resumía la propia dirección de la planta.