Hoy es 16 de julio
GRUPO PLAZA

entrevista al coordinador general de Lambda

Fran Fernández (Lambda): "Soy muy aficionado a los juegos de mesa, tengo unos 300 en casa"

Foto: ROBER SOLSONA/EP
14/07/2024 - 

VALÈNCIA (EFE/Concha Tejerina). El coordinador general de Lambda, Fran Fernández (Hellín, Albacete, 1979), licenciado en Ciencias Químicas y profesor de secundaria, confiesa en una entrevista con EFE que una de sus aficiones son los juegos de mesa, de los que tiene alrededor de 300, es un maniático del orden porque le da "paz", no se le da mal la cocina y "algo que no mucha gente sabe" es que durante algunos años practicó bailes de salón.

-¿Cuál es el mundo que le gustaría dejar para las futuras generaciones?

-Lo tengo claro, mi sueño es la utopía donde de verdad el colectivo LGTBI+ no sufre ningún tipo de discriminación. Un mundo donde las infancias trans (y LGB) comparten su vivencia con sus familias desde el primer minuto y por su cabeza no pasa el miedo “¿Me dejará de querer?”. Si estuviera en mi mano… daría lo que fuera por esto.

-¿Tiene alguna manía, fobia o superstición?

-Durante los primeros años de convivencia, Carlos me decía que estaba cargado de manías: ordeno el menaje por usos, la despensa es como un lineal de supermercado… pero el orden me da paz.

Si vienes a casa y ves desorden… estoy con un pico de estrés.

-¿Algún escritor o género literario que le haya marcado especialmente?

-Desde bien pequeño siempre he devorado libros, menos románticas, no puedo con ese género. Me gusta mucho el terror y la novela policíaca pero no tengo autora o autor predilecto. Aunque es cierto que el trabajo últimamente me mantiene leyendo muchas horas y el tiempo libre lo dedico más a otras aficiones.

-Con respecto a la música, ¿qué le gusta escuchar?

-La música ochentera y de los noventa es esencial si en una fiesta quieren verme bailar. Algo que no mucha gente sabe de mí es que durante 4 o 5 años practiqué baile de salón, así que tampoco le hago ascos al vals inglés, tango, pasodoble, bachata, samba…. La gente joven diría que soy un 'boomer' total en cuestiones de música.

Imagen de archivo. Foto: KAROLINA KABOOMPICS
-¿Es más de series o de cine. Tanto en un caso como en otro ¿cuál es su preferida?

-El cine me gusta mucho, aunque reconozco que el ritmo de vida que llevo me hace más fácil seguir series. Podría hablarte del universo Marvel, DC, o el cine de intriga o terror, pero confieso que soy un fanático de algunas series míticas antiquísimas como 'V' y sus lagartos invasores o 'Las chicas de oro'.

-¿A qué afición o aficiones dedica el tiempo libre?

-Desde hace 15 años, antes incluso de conocer a mi marido Carlos, ya era aficionado a los juegos de mesa, y resulta que él también lo es. Así que en casa tenemos una ludoteca que puede tener 300 juegos de mesa. Son 20 años de acumulación de juegos y, durante la pandemia fue nuestro entretenimiento principal. Lo bueno es que ambos tenemos buen perder y jamás hemos discutido por un juego de mesa.

-¿Tiene mascotas o las ha tenido?

-No concebimos la vida sin ellas. Tenemos tres perros mestizos, dos de ellos rescatados de protectora y la mas mayor, Z, encontrada en la carretera. Hay quien no entiende que sacrifiquemos cosas en nuestra vida por ellos, pero para nosotros no es opcional, son familia.

-¿Cuáles son sus vacaciones ideales?

-Siendo familia numerosa -Carlos y “Z”, “X” y “H”, nuestros tres 'hijos perrunos'-, viajar se complica porque los perros suman más de 90 kilos. Así que, desde hace años, mis vacaciones ideales consisten en montar una piscina en el patio de casa y disfrutar de las pequeñas cosas como no mirar el móvil o el reloj. Con eso y poco más… soy feliz.

-¿Es más de cocinar o de qué cocinen para usted? ¿Cuál es tu plato favorito?

-En casa cocino yo, y no se me suele dar mal. Aprendí siguiendo el recetario de mi padre que a, su vez, aprendió de mi madre que cuando se puso a trabajar le dijo que le tocaba asumir tareas, y mi padre eligió la cocina. Mi cocina es bastante mediterránea y uno de los platos que mejor me sale es la boloñesa o los guisos de cuchara.

-¿Tiene tiempo para practicar algún deporte?. Si es así, ¿le gusta alguno en especial?

-Uf… no tengo tiempo, pero no voy a mentir, no me gusta mucho el deporte. Eso de que los gais estamos obsesionados con el gimnasio es un estereotipo. Caminar camino mucho, pero a eso no le llamaría deporte. Nadar también me gusta, pero en plan relax.

-¿Es más amigo de las nuevas tecnologías que de la época analógica? ¿Se mueve bien en las redes sociales?

-Solo tengo Facebook, antes tenía twitter e Instagram pero hay tanto odio en redes que por salud mental decidí cerrar todo. Reconozco su utilidad, pero al representar a una entidad tan importante como Lambda creo que es mejor que mis opiniones queden para mí.

Imagen de archivo. Foto: EKA/OCUV
-¿Qué es lo que más odia y lo que más ama?

-Odio la tibieza. No entiendo que se pretenda ir por el mundo sin mojarse. Quizá por eso me meto en tantos charcos.

Amo a mi familia, tanto la vital, mi marido y mis perros-, como la elegida, Lambda. No sé qué haré cuando deje la coordinación general de esta entidad, que por cierto ya va tocando, pero no entiendo mi vida sin estar vinculado a ella.

-¿Si pudiera perderse por un tiempo, dónde y con quién iría?

-Me perdería con mi marido y los perros en un chaletazo super lujoso y aislado en la montaña, con su piscina y todo eso, sin obligaciones ni interferencias para poder dedicarnos tiempo de calidad.

-¿Si pudiera cambiar algo sabiendo que puede hacerse realidad, qué sería?

-Borraría el machismo en nuestra sociedad. Tengo la firme creencia de que es la raíz de la mayoría de grandes males que vivimos -guerras, violencias, delincuencias- y que éstos se reducirían mucho (si no desaparecerían) si el machismo no existiera. Lo creo como hombre cis gay blanco cargado de privilegios. Y porque los tengo, lo creo.

-¿Algún sueño por cumplir?

-O soy muy conformista o muy afortunado porque no tengo ningún sueño personal por cumplir en el horizonte. No me falta para comer, tengo un techo digno (bueno, lo tiene el banco, pero voy pagando la hipoteca) y en lo afectivo soy tremendamente feliz. La gente que me importa me aprecia y he aprendido a apartarme de la que no me aporta.

-Sorpréndanos, el día menos pensado…

-¡Uf!… quien me conoce sabe que no soy ni de impulsos ni de sorpresas. Así que, esta puede que sea la pregunta más difícil… pero creo que sería una sorpresa mayúscula si digo que el día menos pensado… ¡me apunto a una maratón! Jajaja, esa si sería una sorpresa.

Noticias relacionadas

next

Conecta con nosotros

Valencia Plaza, desde cualquier medio

Suscríbete al boletín VP

Todos los días a primera hora en tu email


Quiero suscribirme

Acceso accionistas

 


Accionistas