GRUPO PLAZA

DISEÑO PARA EL PENSAMIENTO

Fútbol y la involución del diseño: del cartel galáctico al amateur

Hace no tanto tiempo, cuando los jugadores de fútbol no eran galácticos, existía una tipología de cartel que con sus ilustraciones y diseños actuaba como reclamo para atraer al público al campo

9/01/2017 - 

VALENCIA. A mediados del siglo pasado el televisor era un electrodoméstico recién llegado a España, y sin abonos de tv por satélite ni paquetes de pay per view, el reclamo publicitario de los clubes para llenar sus campos era el cartel. A partir de esta función anunciadora y comercial, con los años el cartel de fútbol adquirió una tipología muy clara con una evolución similar a la del cartel taurino del último siglo o el cartel festivo regional, con ilustraciones decó o fondos pictóricos que se completaban con composiciones tipográficas estandarizadas para dar agilidad a la producción semanal.

Algunos carteles basados en fondos del artista valenciano Salvador Donat Saurí

Llama la atención la cantidad de material histórico relacionado con el Valencia CF en la segunda mitad de siglo, debido al auge de las artes gráficas valencianas que generaron toda una industria en sí misma, lo cual motivó a su vez la prosperidad de artistas, pintores y grafistas al servicio de los carteles anunciadores de corridas de toros, Fallas o la Feria de Julio.

Viendo en perspectiva estos carteles, observamos la repetición de algunos de estos fondos de escenas de partidos para ilustrar a diferentes equipos, causa precisamente de la búsqueda de soluciones rápidas, por lo que diferentes talleres litográficos disponían de sus propios fondos de obra al igual que hoy los diseñadores tenemos a nuestro alcance bancos de imágenes y fotografías para encargos en los que no hay tiempo o presupuesto para generar nuevo material.

Algunos fondos de los que disponía la mítica Imprenta y Litografía Ortega de Valencia

Mientras el prolífico cartel anunciador de partidos en España adquiría este tono autóctono a partir de las obras que los ilustraban, en el resto del mundo eran hitos como el Mundial los que servían de reclamo a nivel internacional con tintes mucho más políticos, con estilos en ocasiones más cercanos al cartel de propaganda o a tendencias nacionales como los carteles polacos o el mítico Miró que anunció el Mundial de España ’82.

Cartel del Mundial de Francia de 1938 obra de Henri Desmé, cartel polaco de Henryik Tomaszewski en 1948, cartel del Mundial de España por Joan Miró y cartel del Mundial de Sudáfrica de 2010

El cartel de fútbol fue uno más de los fines mediante los que el cartelismo español se posicionó a nivel internacional, con un estilo con denominación propia, algo que se fue perdiendo en las últimas décadas del siglo pasado, acrecentándose desde la entrada del ordenador lo que motivó el intrusismo profesional y la desaparición completa de esta tipología de carteles. Las obras de artistas locales dieron paso a los filtros de Photoshop, una curva inversamente proporcional al presupuesto de los clubes y a la astronómica inversión en publicidad, y así es como el cartel clásico ya histórico dio paso a la desprofesionalización más absoluta donde los únicos atisbos interesantes parten de los sponsors, las televisiones de pago o proyectos personales de aficionados con cierta destreza por su cuenta.

Y aunque fuera de las grandes capitales y de la primera división sigue existiendo la necesidad de llenar el campo, tampoco allí han sido capaces de recuperar este recurso tan tradicional, ni siquiera en invertir en ello para obtener piezas que resulten efectivas, y es donde más se evidencia esta ausencia de profesionalidad al no existir un respaldo de multinacionales con experiencia en diseño, marketing o publicidad que patrocinen el cartel.

Evolución (involución gráfica) en carteles del Valencia de los años 1931, 1973, 1999 y 2011Al margen de estos escandalosos desastres gráficos, las propuestas más interesantes ya no buscan anunciar partidos, sino promocionar a ilustradores y diseñadores a partir de sus proyectos personales. Y así es como encontramos en la actualidad series de carteles como los del bosnio Zoran Lucić que combina fotografía tratada con un estilo vintage para crear unos curiosos pósters de leyendas del fútbol, la obra ‘Galactics’ de Tactel Graphics, la serie de retratos Playmakers del rumano Daniel Nyari o las ilustraciones del valenciano Lawerta (entre su obra encontramos muchas referencias y trabajos sobre el mundo del fútbol).

Gráfica para el Levante UD, proyecto personal sobre el Valencia CF, serie del Calcio y cartel para ESPN sobre capitales del fútbol, todo obra de Lawerta

Viendo la cantidad, y calidad, de estos proyectos independientes de profesionales, no es de extrañar que compañías como Nike tengan ojeadores en plataformas y portfolios de creativos freelance para echar mano de frescura en sus campañas deportivas.

Cabe destacar también el intento de aproximación del diseño al fútbol que en 2012 realizó la exposición ‘El fútbol (también) es así’ inaugurada en el MuVIM de Valencia y comisariada por el diseñador Manuel Camacho. Esta muestra, actualmente itinerando por medio mundo, ofrece una nueva visión sobre la relación entre el diseño y el fútbol a partir de varias disciplinas como el gráfico, tipografía o diseño de producto, explorando la influencia del fútbol como fenómeno global y cómo es un deporte que sirve de referencia para materializar distintos proyectos.

Como uno de los casos más recientes y curiosos de gráfica aplicada al cartel de fútbol encontramos al madrileño Club Deportivo Leganés, que aprovechando su ascenso a Primera División ha sorprendido con una campaña de carteles con la que anunciar cada encuentro en su campo. Una campaña publicitaria low-cost (donde no siempre prima el diseño) a cargo de su equipo interno de comunicación, desenfadada y que transmite a la perfección el espíritu de este modesto club.

Noticias relacionadas

next

Conecta con nosotros

Valencia Plaza, desde cualquier medio

Suscríbete al boletín VP

Todos los días a primera hora en tu email


Quiero suscribirme

Acceso accionistas

 


Accionistas