VALÈNCIA (EP). La Generalitat y las universidades valencianas han constituido la Comisión Interuniversitaria de Salud Mental de la Comunitat Valenciana, que tiene el objetivo de "abordar de forma conjunta todos aquellos aspectos identificados con la salud mental en la comunidad universitaria".
La puesta en marcha del órgano es el resultado del trabajo llevado a cabo en distintas reuniones previas mantenidas entre el gobierno autonómico y las instituciones de educación superior.
De la mano del comisionado de Presidencia para el Plan Valenciano de Acción para la Salud Mental, Drogodependencias y Conductas Adictivas, Rafael Tabarés, la directora general de Universidades, Pilar Ezpeleta, y representantes de todas las universidades públicas y privadas, se ha creado esta comisión, que cuenta con representación de Salud Mental de todas las universidades públicas y privadas de la Comunitat Valenciana. El acto ha tenido lugar en la sala de juntas de la sede Ciudad de Alicante de la Universidad de Alicante.
Se pretende de este modo "abrir un espacio de diálogo que permita conocer las experiencias de buenas prácticas que se desarrollan en materia de salud mental en las diferentes universidades, que son centros promotores de salud mental, para optimizar recursos y trabajar de forma conjunta".
También se quiere "establecer mecanismos de coordinación entre las universidades y las consellerias con competencias en Salud Mental, además de definir los objetivos, funciones y un plan de trabajo para la Comisión".
Durante la reunión, los distintos representantes de las universidades valencianas han expuesto tanto los objetivos que persiguen, como actuaciones llevadas a cabo en sus respectivas instituciones en materia de salud mental.
Por su parte, los representantes de la Generalitat han reconocido la necesidad de atender el problema de la salud mental de forma global y la oportunidad que ofrece esta nueva comisión para plasmar en un informe cuál es la situación exacta de cada universidad, conocer sus protocolos y tener la capacidad para hacer una auditoría que permita valorar las actuaciones que se están realizando. El objetivo es obtener algún certificado que garantice un mínimo de los principios salutogénicos.
Tabarés ha declarado que "la comunidad universitaria es una de las grandes afectadas por los traumas colectivos como la guerra en Europa o la pandemia que provocan malestar emocional y problemas de salud mental".
En este sentido, el comisionado ha apuntado que "se va a establecer un espacio de trabajo común que permita abordar de forma coordinada las diferentes situaciones relacionadas con la salud mental a las que se enfrenta la comunidad universitaria".
"Pretendemos un cambio de paradigma. Frente a la competitividad, el individualismo y 'sálvese el que pueda' buscamos la cooperación, el trabajo colaborativo para salir juntos de esta situación. Es la vía del bien común para mejorar y garantizar el bienestar de los jóvenes y de toda la comunidad universitaria", ha precisado Rafael Tabarés.
Por su parte, Pilar Ezpeleta ha asegurado que "con esta comisión se da un paso adelante en la evolución de las universidades para tratar el bienestar emocional y apostar por campus saludables como espacios que van más allá de la transmisión de conocimientos". "Es fundamental abordar la salud mental y atender al estudiantado de manera integral", ha concluido.