Génova se empecina en salvar a Betoret mientras los 'contellistas' ya cavan trincheras

VALÈNCIA. Cuando el avezado lector pensaba que no podría existir un siguiente episodio más dantesco en el PP de Valencia que el anterior, Génova se superó este jueves con las declaraciones en RNE de su coordinador general, Fernando Martínez Maíllo, quien directamente amenazó con "intervenir lo que fuera necesario" en la provincia para propiciar una candidatura única de cara al futuro congreso todavía sin fecha concretada.

Un paso más en el contradictorio ridículo en el que ha decidido adentrarse la dirección nacional del PP: regeneración y aperturismo un día, autoritarismo e imposiciones al siguiente. Una cúpula caprichosa que trata de impedir la participación de la militancia según los intereses que aparecen en su hoja de ruta. Solo así se explica el intento de manipulación de un proceso que debe permitir la decisión libre sobre las opciones que tratan de presentarse en la provincia de Valencia.

Unas aspiraciones que tienen nombres y apellidos. Así, el presidente actual, Vicente Betoret, trata de mantener su puesto frente a otras candidatas: por un lado, la portavoz de la Diputación de Valencia, Mari Carmen Contelles, y por otra, la ex alcaldesa de la Font de la Figuera María José Penadés, con muchas menos opciones a priori.

Los protagonistas tomaron este jueves la palabra. Contelles anunció públicamente por primera vez su intención de presentarse para liderar el PP de Valencia. "Presento mi candidatura por dos motivos: porque es necesario recuperar el orgullo de ser del PP y porque necesitamos hacer juntos un proyecto para 2019", afirmó la dirigente en un vídeo. El tuit en el que compartió este mensaje incluía los hashtags #FemPartit, #FemProvincia y #QueNadaTePare.

Sobre lo ocurrido en la Junta Directiva de Provincial (JDP) acaecida el miércoles, Contelles calificó de "lamentable" y "rocambolesco" el episodio y lamentó la "falta de democracia brutal" acerca de lo sucedido. "Se retrataron los que jugaron con listas antiguas y desactualizadas adrede para que votaran personas que ya no están vinculadas al partido", criticó la aspirante, quien puso en valor que la militancia "dijo no a esas actitudes". Unas afirmaciones que, unidas a la presentación de su candidatura, indican su fortaleza de cara a seguir planteando la batalla pese a las reticencias de Génova.

Betoret carga contra el 'rusismo'

En la otra orilla, Betoret expuso las razones por las que perdió la votación en la propuesta en el JDP del Comité Organizador del Congreso (COC), fundamentadas en el pasado 'rusista' del órgano. "Era una Junta que heredé y no cambié; no me beneficiaba nada", apuntó quien fuera secretario general del partido desde 2004 hasta 2015.

En esta línea, el líder del PP de Valencia se mostró "abochornado" por la situación de gran tensión que se produjo en la Junta -donde hubo gritos de "tongo" y "pucherazo" por parte de los partidarios de Contelles, quienes habían planteado una propuesta alternativa al COC-, y pidió "disculpas" a los votantes y militantes del PP. "Ayer se escenificaron dos modelos: el del consenso y el diálogo y el de los gritos y las malas actuaciones", aseguró el presidente provincial de los populares, quien puntualizó que no tiene "ningún interés en retrasar esto", en referencia a la elección del Comité Organizador (COC) para la celebración del Congreso, que aún no tiene fecha.

Bonig defiende la participación de "cualquier candidato"

Por otro lado, desde el PPCV que lidera Isabel Bonig se defendió públicamente la participación de los militantes y que se pueda votar y presentar "cualquier candidato" a los congresos de la formación para elegir a la dirección del partido en la Comunitat y las provincias, algo que ya salió de las convenciones celebradas por la formación popular en 2015.

En esta línea, desde la cúpula popular añadieron que el PPCV "siempre" ha defendido la unidad del partido "desde la lealtad y la legalidad que marcan los estatutos" del PP porque consideran que "somos más fuertes trabajando y defendiendo la unidad y lealtad al proyecto del PP y a los ciudadanos", de acuerdo con lo que establecen esos estatutos. Unas reflexiones que no esconden el malestar de la dirección regional con Génova por el intervencionismo que está llevando a cabo en el proceso valenciano, una circunstancia que no se ha dado con semejante intensidad en otras regiones y provincias hasta el momento.