Hoy es 12 de octubre
VALÈNCIA (EP/EFE). La ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha eludido responder hoy expresamente si el Ejecutivo está de acuerdo o no a la decisión del 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, de deflactar la tarifa del IRPF para rentas inferiores a 60.000 euros. Pero de manera genérica sí ha pedido un "discurso responsable" a todas las CCAA porque cada vez que se reducen ingresos "está el debate de qué recortar".
Así lo ha afirmado durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en la que ha evitado concretar la posición del Gobierno, pese a que los informadores la han preguntado en varias ocasiones si respalda la decisión de Ximo Puig y si va a tomar una decisión similar.
Rodríguez ha insistido en que la política fiscal del Gobierno es la de la "justicia social" para que esta crisis "no la pagan los de siempre" y ese será, ha dicho, el enfoque del paquete fiscal que prepara el Ejecutivo con el fin de que los que más tienen más contribuyan y que no se produzcan "regalos fiscales" de la clase media y trabajadora a los más ricos.
Ha añadido también que el paquete de medidas en el que trabaja Hacienda, que se baraja presentar el jueves de esta semana, "va a paliar el problema de raíz", es decir, evitar que la "inflación siga subiendo".
Pero dicho esto, ha dejado claro que la política fiscal no se puede diseñar "en abstracto" porque cada vez que se toma una decisión en materia fiscal y se reducen ingresos hay que plantearse "dónde se reducen y a quién afecta esa reducción".
En este sentido, ha precisado que el Gobierno "respeta a las CCAA", pero ha pedido a todas que tengan un "discurso responsable", aunque lo ha hecho de manera genérica y sin mencionar expresamente el anuncio realizado esta mañana por Ximo Puig, de deflactar la tarifa del IRPF a las rentas de menos de 60.000 euros.
No obstante, fuentes del Ejecutivo han tratado de diferenciar la medida anunciada por Ximo Puig de la propuesta de deflactación de la tarifa del IRPF realizada por el Partido Popular. Incluso, desde el Gobierno se afirma que el presidente valenciano tiene toda la legitimidad para hacer lo que considere oportuno.
En cualquier caso, la Portavoz ha insistido en que cada vez que se habla de reducir ingresos hay que tener en cuenta que son recursos que después se van a necesitar para contratar más maestros, sanitarios, para ayudar a las personas más desfavorecidas o para la dependencia.
"Cada vez que hablamos de rebajar está el debate de qué recortar", ha exclamado para acto seguido precisar que "este es un Gobierno que no quiere recortar derechos y prestaciones a las personas que más lo necesitan en este momento de dificultad".
Por lo tanto, ha recalcado que esa será la política fiscal que el Gobierno está "ultimando con absoluto rigor y coherencia con la política europea".
Además, ha argumentado que España tiene que ser "coherente" con sus políticas porque ha pedido ayuda a Europa y va a recibir 140.000 millones de euros.
Por otro lado, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, considera que el 'president' de la Generalitat Valenciana "se ha puesto del lado del PP" porque sabe que "la cosa está complicada, empieza a oler que están al final del ciclo" del PSOE y que "hay que soltar un lastre que se llama Pedro Sánchez".
"Sabíamos que el Gobierno era de todo menos un Gobierno unido, pero el PSOE ha comenzado la desbandada. Sánchez comienza a desmoronarse como presidente y secretario general del PSOE", ha manifestado el regidor capitalino.
Así, Puig, "uno de los grandes referentes de política de armonización fiscal, ha hecho una enmienda a la totalidad" y "se ha puesto del lado del PP", algo que la parece "muy bien". "También le digo a Puig que la gente prefiere al original antes que a la copia, y que él es una copia", ha finalizado.
Además, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha saludado este martes la bajada fiscal que ha anunciado el 'president' de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, porque, a su juicio, va en el "camino correcto" y ha señalado que este paso confirma que hay una "rebelión" dentro del Partido Socialista. Es más, ha asegurado que "el sanchismo" es un movimiento dentro del PSOE que "empieza a tener claros síntomas de debilidad".
En una rueda de prensa en el Congreso, tras la reunión de la Junta de Portavoces, la también portavoz del PP ha saludado que Puig haya tomado esa decisión que va "en un camino correcto, siguiendo la iniciativa del PP en el ámbito fiscal que tiene que ver con deflactar el IRPF".
En este sentido, ha destacado que están viendo cómo "día a día" hay "más barones que se van sumando a iniciativas de estas características". "Y hacemos un llamamiento a que esto se apruebe también con carácter general para todos los españoles en todos aquellos tramos que son los tramos autonómicos", ha demandado.
También, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha afirmado que en su región no habrá subidas de impuestos "adicionales" que sirvan como "ingeniería fiscal para arreglar decisiones políticas erróneas" ni como "moneda de cambio" como hace, según ha criticado, el Gobierno central, que cambia las reglas fiscales "constantemente" cuando se trata de administraciones de su mismo signo político.
La presidenta regional ha señalado que los impuestos en Madrid "no van a ser de moneda de cambio, como estamos viendo estos días en la prensa, donde distintas administraciones, sobre todo de los mismos signos políticos, cambian estas reglas constantemente".
“Con las cosas del comer no se juega, sobre todo cuando son de los demás, del contribuyente, del autónomo y del empresario, porque para disparar el gasto público bien que muchas veces nos entendemos entre administraciones”, ha añadido.
Después, el portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, ha puesto en duda este martes el anuncio de rebajas fiscales del 'president' de la Generalitat y ha sostenido que "es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja a que un político de izquierdas baje los impuestos".
En rueda de prensa en el Congreso, Espinosa de los Monteros ha ironizado además con el hecho de que Puig haga este anuncio a solo ocho meses de las elecciones. "Cuando lo veamos lo consideraremos, me cuesta mucho creer que vayan a bajar los impuestos", ha insistido.
En cualquier caso, como aviso general, ha explicado que toda reducción impositiva debe conllevar una bajada del gasto público para no aumentar el déficit y la deuda. "Si no, es un brindis al sol", ha aseverado.
Luego, la síndica de Ciudadanos (Cs) en Les Corts, Ruth Merino, ha calificado la propuesta de reforma fiscal presentada este martes por el president de la Generalitat, Ximo Puig, de "insuficiente y rácana" y ha augurado que "está llegando la era final del Botànic".
"Tenemos un panorama económico nada halagüeño, nos llegan menos fondos europeos, tenemos un tripartito gobernando que ahuyenta la inversión en muchas ocasiones, que rechaza oportunidades de crecimiento, y un Gobierno de España que ningunea a la Comunitat y que nos quiere infrafinanciados", ha lamentado Merino durante su intervención en el debate de política general.
La síndica de Cs ha cuestionado la rebaja de impuestos anunciada por Puig "porque sus socios están diciendo continuamente que no están de acuerdo" y la ha calificado de "totalmente insuficiente" y "rácana". Ciudadanos propone una rebaja fiscal "generalizada, más amplia y ambiciosa" por la que "cada valenciano podrá ahorrarse 650 euros anuales al rebajar un punto los tramos de la base imponible del IRPF hasta los 65.000 euros".