El primer ministro ordenó a a la cúpula militar abortar la revuelta y el presidente Erdogan intervino vía Skype para pedir a los ciudadanos que se lanzaran a las calles para frenar a los golpistas
VALENCIA/MADRID (VP/EP). Una facción de las fuerzas armadas turcas protagonizó a última hora de este viernes un intento de golpe de Estado para "garantizar la democracia y el respeto a los Derechos Humanos", según comunicaron las Fuerzas Armadas en un mensaje transmitido por televisión.
El Servicio de Inteligencia de Turquía (MIT) dio por abortada la intentona golpista entrada la madrugada de este sábado, horas después de que el presidente Recep Tayyip Erdogan pidiera a los turcos que salieran a la calle para frenar a los golpistas.
El balance provisional del levantamiento deja al menos 200 fallecidos y más de un millar de heridos en distintos puntos del país y más de 2.800 militares arrestados por colaborar con la movilización militar.
Los sublevados llegaron a hacerse con el control durante unas horas de la televisión estatal turca, TRT, a través de que la que aseguraron haber tomado el control de la administración, al tiempo que declararon la ley marcial y establecieron el toque de queda en todo el territorio nacional. También anunciaron la creación de un "consejo de la paz" y el inicio de un "proceso constituyente".
El primer ministro, Bilan Yildirim, admitió la sublevación de un grupo de militares al margen de la cadena de mando para tratar de tomar el poder, pero rechazó hablar de golpe de Estado. "Es una revuelta", afirmó.
Yildirimi explicó en una intervención telefónica en la cadena turca NTV que este grupo de militares había tomado ilegalmente las armas, por lo que dio órdenes a las tropas leales de "hacer todo lo necesario" para poner fin a la sublevación militar. "Les castigaremos de la forma más dura", amenazó.
Al mismo tiempo, los medios de comunicación locales informaron de la presencia de aviones y helicópteros militares que sobrevolaron la capital Ankara y la ciudad de Estambul.
En Ankara se escucharon disparos, de acuerdo con testigos citados por Reuters. Los tanques concentrados alrededor del parlamento llegaron a abrir fuego, así como uno de los aciones que sobrevolaron la ciudad.
Ya de madrugada medios locales informaron de la muerte de al menos 17 policías y varios heridos por disparos disuasorios efectuaros por los sublevados.
Minutos más tarde de la intervención del primer ministro, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, realizó un llamamiento a la rebelión callejera contra el golpe de Estado declarado en Turquía.
Lo hizo mediante una intervención vía Skype en CNN Turk, en su primera declaración tras la sublevación militar, para acusar a "una estructura paralela de poder" -el término empleado habitualmente para describir a su enemigo declarado, el clérigo Fethullah Gülen- del golpe, ejecutado por "una minoría del Ejército".
Erdogan explicó que tenía previsto regresar a Ankara esa misma noche desde su lugar de descanso familiar en Bodrum, en el suroeste del país. El presidente pronosticó que la situación "se resolverá en poco tiempo" y anunció que los responsables "pagarán un alto precio ante los tribunales".
Tras el mensaje a la nación de Erdogan, centenares de ciudadanos salieron a la calle para manifestarse contra los sublevados. El presidente turco aterrizó en Estambul pasadas las 4 de la madrugada, hora local.
Al mismo tiempo, los principales partidos de la oposición turca se pronunciaron a favor de mantener el orden constitucional. El líder del Movimiento Nacionalista (MHP), Devlet Bahçeli, llamó a Yidirim por teléfono para expresarle su total respaldo a la voluntad del pueblo en las urnas.
"Este país ya ha sufrido demasiado por los golpes de Estado. No queremos que esas dificultades se repitan", dijo. Por su parte, el líder del Partido Republicano del Pueblo (CHP), Kemal Kiliçdaroglu, también respaldó el orden establecido.
Desde el exterior, los principales líderes internacionales han hecho un llamamiento al orden constitucional y pidieron evitar un derramamiento de sangre. "Naciones Unidas espera clarificar la situación en el terreno y llama a la calma", declaró declarado Farhan Haq, portavoz del secretario general de la organización internacional, Ban Ki Moon.
La Alta Representante de Política Exterior de la Unión Europea, Federica Mogherini, pidió "contención" y "respeto" por las instituciones democráticas. Mientras, Barack Obama declaró su respaldo al "Gobierno turco democráticamente elegido" a través de un comunicado divulgado por la Casa Blanca..
Hasta que el Servicio de Inteligencia de Turquía (MIT) dio por fracasada la intentona golpista, el país vivió instantes de extraordinaria tensión. Aunque indicó que aún quedaban algunas bolsas de resistencia, el MIT aclaró que los militares rebeldes serán juzgados por traición.
El caos se concentró en Estambul y Ankara. En la primera, la Gendarmería cerró al tráfico los puentes Bósforo y Fatih Sultan Mehmet, que cruzan el estrecho, en sentido Europa, y el aeropuerto internacional de Ataturk ha cancelado todos los vuelos desde la ciudad turca.
En la capital, Ankara, se escucharon disparos y, según CNN Turk, los golpistas ocuparon el cuartel general de las Fuerzas Armadas.
La entidad presidida por Francisco González indica que podría verse significativamente afectado por la evolución de los acontecimientos tras el fallido golpe de estado en Turquía