VALÈNCIA. La adquisición del edificio de Correos, situado en la plaza del Ayuntamiento, por parte de la Generalitat Valenciana ha añadido algo de picante a las relaciones entre PSPV y Compromís, especialmente en esta época de celebraciones falleras. La compra del histórico inmueble por parte del Ejecutivo presidido por el socialista Ximo Puig se ha considerado un golpe de efecto por el simbolismo de la construcción y su privilegiada ubicación. Además, el coste de la operación, 24 millones de euros, es "razonable" para los distintos consultores inmobiliarios a los que ha preguntado este diario, si bien habrá que ver la utilidad y funciones de las que se va dotando a la instalación para poder calificar con mayor concreción la inversión.
Mientras se estudian las posibilidades del edificio -se habla de un posible centro europeo para las regiones-, desde Presidencia se ha planteado para los próximos días un uso más mundano y terrenal. Tal y como informó Valencia Plaza, el Palau ha programado desde el día 9 de marzo hasta el 19 una serie de visitas enfocadas a distintos colectivos y organizaciones de la sociedad civil que incluirán la posibilidad de disfrutar de la tradicional 'mascletà' que se dispara en la plaza del Ayuntamiento a las dos del mediodía.
De hecho, la primera de ellas será dedicada a distintos responsables de medios de comunicación de la Comunitat Valenciana y está previsto que sea el propio presidente de la Generalitat, Ximo Puig, quien ejerza de maestro de ceremonias en la visita al recién adquirido edificio, así como en la posterior comida programada cuando concluya la 'mascletà'.
Curiosamente, este mismo jueves, el Ayuntamiento de València que dirige Joan Ribó, de Compromís, remitió a los medios de comunicación la invitación para la tradicional recepción que hace a los periodistas en el consistorio, que suele consistir en un catering de pie en el Salón de Cristal en el que participan él mismo y concejales de todos los grupos políticos. ¿La fecha? también el 9 de marzo y, la hora, 14.30, justo después de la 'mascletà': es decir, que las dos comidas falleras de los medios con los dos referentes políticos coincidirán en el espacio y tiempo.
Aunque la situación no deja de tener morbo político, desde ambas instituciones se evita el enfrentamiento público. En Presidencia insiste en que las invitaciones irán dirigidas a representantes de colectivos, organizaciones, asociaciones... que por la gran demanda y reducido espacio en el Ayuntamiento de València no tienen a menudo la ocasión de poder asistir a una 'mascletà' en el citado recinto. Por otro lado, en el consistorio señalan que la recepción a los periodistas se hace todos los años y la fecha estaba programada con antelación a la cursada desde Presidencia de la Generalitat.
Por otro lado, este mismo jueves pudo verse a varios de los colaboradores del jefe del Consell, Ximo Puig, en los alrededores del edificio de Correos revisando distintas posibilidades del inmueble de cara a las recepciones previstas a partir del 9 de marzo.
Así, y aprovechando que se había despejado la calle Laura y la calle Correos antes de la 'mascletà' como vías de evacuación en caso de emergencia, pudo verse a miembros del equipo del presidente de la Generalitat comprobando accesos y otras cuestiones relativas al operativo para las próximas visitas.