VALÈNCIA. Marines Viejo, perteneciente a la comarca de Camp de Túria, ha amanecido repleto de pancartas y con más de 100 carteles reivindicativos en los balcones y espacios públicos. Los vecinos y vecinas exigen soluciones frente a lo que consideran una situación de "abandono".
Actualmente, unas 100 personas están empadronadas y viven habitualmente todo el año en Marines Viejo "sin servicios esenciales de limpieza y mantenimiento" y con las calles e instalaciones públicas "en total estado de abandono", tal y como expresan los denunciantes, quienes insisten en que entre los afectados hay menores de edad.
Las familias aseguran llevar décadas reivindicando al Ayuntamiento de Marines su derecho a los servicios esenciales y lamentan que los argumentos del Consistorio siempre son los mismos: "El presupuesto es muy limitado, la capacidad de gestión reducida y dependemos de subvenciones". Sin embargo, cuestionan la veracidad de estas afirmaciones, ya que, según indican, la alcaldía ha comunicado en varias entrevistas que se dispone de un "importante superávit".
El término municipal de Marines cuenta con dos núcleos urbanos, uno de ellos es Marines Viejo, situado en plena Sierra Calderona, cuyos habitantes autóctonos se trasladaron al nuevo emplazamiento en 1967 con motivo de un desprendimiento de tierras ocurrido en 1957.
El núcleo antiguo de Marines nunca quedó deshabitado, ya que varios vecinos se negaron al traslado. Además, las casas fueron vendidas a nuevos pobladores, que se encargaron de arreglar las calles, poner en marcha el suministro de agua potable, gestionar el alta de las cédulas de habitabilidad tras tomar las medidas de seguridad exigidas legalmente y en definitiva, devolver la vida al pueblo.