VALÈNCIA. (EFE). El conseller de Hacienda, Vicent Soler, ha informado este miércoles de que su departamento contará en los Presupuestos de la Generalitat para 2018 con 300 millones de euros para impulsar un banco público, la futura Agència Tributària Valenciana y una Generalitat sin papeles.
Soler, quien ha cerrado la ronda de comparecencias de los miembros del Ejecutivo valenciano en Les Corts para explicar los presupuestos de la Generalitat para 2018, ha detallado que, en conjunto, su Conselleria contará con un presupuesto de 299,1 millones de euros, lo que supone un 2,7 % más que el ejercicio anterior.
En el turno de debate, el diputado de Podem David Torres ha indicado que, pese al "esfuerzo" del Consell por reflejar sus reivindicaciones en materia de política social, "todavía no se ha llegado a las cifras necesarias" y su grupo no está "en disposición de dar" su voto favorable, aunque "queda tiempo para llegar a acuerdos".
Soler ha anunciado que el Institut Valencià d'Administració Tributària aumentará su presupuesto un 8,9 % para dotarse de personal y medios; que los fondos gestionados por el IVF crecen un 25,8 % y que durante el próximo curso se instalarán unos 15.000 ordenadores en los centros educativos.
Por otra parte, ha informado de que la Agencia Valenciana de la Innovación, que comenzará a funcionar a pleno rendimiento en 2018, contará con un presupuesto de 28 millones y que Presidencia contará con 309,5 millones para el impulso del turismo, la innovación y la respuesta a las emergencias.
Las cuentas de Hacienda para 2018 giran en torno a tres objetivos: "la puesta en marcha del Banco Público, la dotación de personal y medios para la futura Agència Tributària Valenciana (IVAT) y la modernización de la Administración y apuesta por las tecnologías en educación". En conjunto, la Conselleria contará con un presupuesto de 299,1 millones de euros, lo que supone un 2,7 % más que el ejercicio anterior.
En su intervención, el conseller ha destacado que en materia tributaria la prioridad se centra en mejorar la eficiencia de la gestión y en la lucha contra el fraude fiscal, al tiempo que se establecerá la cita previa y un servicio de ayuda para rellenar determinadas autoliquidaciones, dada su especial complejidad, como es el caso de la de Sucesiones y Donaciones.
Se destinarán 25,5 millones de euros, un 35,5 % que el año anterior, a inversiones en materia educativa que permitirán, junto a la Conselleria de Educación, dotar del adecuado equipamiento informático a los centros educativos.
Por su parte, el programa Sistemas de Información cuenta con una dotación de 102,6 millones, lo que supone una reducción del 15,7 %. "Este ahorro se ha podido conseguir gracias al cambio de contrato que hemos negociado en el Consell y que nos ha permitido pasar de un modelo de 'tarifa plana' a uno de pago por uso", ha explicado Soler.
Además, el presupuesto para Actuaciones sobre el Sector Financiero crece un 25,8 % debido principalmente a la contratación de nuevas plataformas tecnológicas para la gestión de la cartera crediticia, inversión "esencial" para culminar el proceso de conversión del IVF en una institución de crédito público.
Torres (Podem) ha cuestionado diversas subvenciones nominativas, como los tres millones de euros que se prevé conceder a Air Nostrum, que ha calificado como "Plan PIVE aéreo", u otra ayuda a la patronal hotelera de Benidorm, y ha anunciado enmiendas al respecto.
También el diputado del PP Rubén Ibáñez se ha opuesto a esta ayuda por considerar que contraviene la normativa europea, y ha preguntado si el Consell ayudará también a transportistas o taxistas a renovar su flota. Estoy ansioso por saber qué técnico firmará esta ayuda, no le llegará la camisa al cuello", ha advertido Ibáñez.
El conseller ha insistido en que esta ayuda tiene el respaldo de la Unión Europea por tratarse de una inversión que redunda en mejoras medioambientales y que "los técnicos no tendrán problemas".
Respecto a la posibilidad de implantar una "mal llamada tasa turística", Soler ha afirmado: "No hay que demonizarla, la tiene media Europa, pero se ha de hacer con la aquiescencia del sector".
Asimismo, ha advertido de que, al contrario que otros modelos turísticos como el balear, el valenciano "es muy heterogéneo, y por tanto no puede haber un planteamiento uniforme" respecto a la citada tasa.
Jordi Juan (Compromís) ha apuntado que le parece bien que se incluya una partida "reivindicativa" de 1.325 millones de euros en el capítulo de ingresos de una forma "más honesta" que "planificando la venta de inmuebles que nunca se materializa".
Por el contrario, Toni Woodward, de Ciudadanos, ha lamentado la "falta de rigor" de estas cuentas, que "deberían ser más realistas ante la situación de incertidumbre económica", y reducir la previsión de crecimiento del 3,1 % del PIB.
El socialista José Muñoz ha destacado la lucha contra el fraude y la apuesta por un "sistema fiscal justo y redistributivo", al tiempo que ha aplaudido que "se vuelva a apostar por municipalismo a través del fondo cooperación local, dotado con 40 millones de euros".
Soler asegura que no sabe si el PP valenciano se fía del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, pero ha dicho que él sí y que cree que "cumplirá su palabra" y "antes del 31 de diciembre" habrá un nuevo modelo de financiación autonómica.
Soler ha hecho estas declaraciones en Les Corts, donde hoy cierra la ronda de los miembros del Consell para presentar los presupuestos de la Generalitat para 2018.
El portavoz de Podem en la comisión de Economía y Presupuestos, David Torres, le ha preguntado "qué es lo que le dijo el ministro Montoro a Puig que están tan convencidos de que el año que viene tendremos un nuevo modelo de financiación".
En respuesta a esta cuestión, Soler ha señalado: "Yo no sé si el PP se fía de Rajoy; yo sí, y creo que cumplirá su palabra antes del 31 de diciembre y, por tanto, el tema estará solucionado".
"Si por algo extraño no pudiera, por algún tsunami, una desgracia natural -ha ironizado-, entonces hay dos escenarios posibles: pedir una aportación 'ad hoc' para las comunidades infrafinanciadas para que se atenúen las diferencias de ingresos respecto de la media y no se deterioren los servicios, o recurrir al FLA extraordinario, pero no queremos ampliar la ola de la deuda".
Instantes después, Soler ha abundado en la crítica de este sistema, por considerar que "llega cuando quiere Montoro, sin correlación alguna con nuestras necesidades".
"Así no se puede planificar la tesorería, así no se puede gestionar, porque no se sabe cuándo llega el dinero", ha lamentado el conseller.