NOVELDA. Fran Martínez Alted (1982) es alcalde de Novelda. Es su tercer mandato, aunque el primero tuvo muchos vaivenes. Asumió la Alcaldía en 2015 con apenas 33 años, y a los pocos meses, le hicieron una moción de censura. En 2019, su partido, el PSPV volvió a ganar, esta vez con mayoría absoluta, y en 2023, amplió esa mayoría. Desde hace un mes, Novelda vuelve a los titulares por el ERE de una empresa como Levantina, el segundo ERE en menos de cinco años, con centenares de afectados, y que prueba la decandencia del sector del mármol. Además, durante el últimos año, otras empresas señeras han tenido que bajar la persiana ante la falta de demanda del mármol frente a la irrupción de otras alternativas, más viables. La respuesta del consistorio ha sido lanzar un nuevo parque empresarial para reactivar la economía del municipio, que contempla el puerto seco logístico del Corredor Mediterráneo del que tanto se habló hace unos años.
-Hace un mes o menos aprobó el nuevo polígono industrial. ¿Qué supone para Novelda dar ese paso y ponerse algo en el mercado del suelo industrial que tan demandado está?
-Para Novelda supone sobre todo el futuro, la viabilidad futura de este municipio. El suelo industrial ya está prácticamente completado. Teníamos éste que estaba clasificado desde que un juez dijo que era suelo industrial de 2018, pero allí estaba. Nunca había habido los intentos que ha habido; siempre se han quedado en nada y ahora parece que ahora es la iniciativa buena. Aparte, la situación ahora mismo para Novelda es crucial. Sobre todo teniendo en cuenta las noticias de EREs y demás. Por tanto, como digo, es darle la viabilidad futura a este municipio en materia de empleo y sobre todo en materia económica.
-¿En qué situación queda el proyecto del puerto seco dentro del nueva área empresarial?
—Queda completamente integrado al final del futuro polígono. Dentro de toda esa tourneé mediática que hubo en su día desde el Ayuntamiento de Novelda podemos decir que hemos sido alumnos aplicados en el sentido de que todas las cosas o de todos los pasos que se dijeron los hemos cumplido. Se nos trasladaba que no íbamos a poner un puerto seco o una plataforma o un intercambiador logístico en un suelo en un secano sin tener industria ni nada. Por tanto, nos centraremos más en desarrollar esa zona industrial que le pudiera dar alcance a puerto seco. Así que el mensaje es que nosotros sí que vamos en serio. De hecho, en el sitio donde proponíamos para desarrollar ese millón y medio no era todo para puerto seco, sino que debía compaginarse con otras industrias. Así que, mientras se toma la decisión, nosotros lo que decimos, lo hacemos y continuamos con ese desarrollo industrial, dejando la reserva de suelo. Cuando la decisión se tome, aunque técnicamente he leído alguna noticia en la que ya nombraban que era Novelda a donde debía ir, la industria de alrededor ya estará desarollada.
—¿Quién debe tomar la decisión de la ubicación del puerto seco?
-En esta cuestión, he de reconocer que estoy verdaderamente confuso. En este caso, me gusta poner como ejemplo la película de Astérix y Obélix y las pruebas del César, donde se visualiza lo complicado que es validar un papel de una administración y empiezan a subir y bajar plantas y dicen. "Al final me he mareado y no sé dónde estoy". En este caso, por una parte creo que es una decisión que deben tomar muchas partes implicadas, tanto Adif y el Ministerio como la Generalitat. Eso era lo último que nos trasladaron.
—Hablemos de tema industrial para que algunas noticias últimamente, decadencia del mármol. Recientemente se ha producido el anuncio del ERE en Levantina. Algunas empresas grandes han cerrado. ¿Cómo ves esa industria tan arraigada en Novelda?
—A ver, es que es complicado hablar del mármol porque al final el boom que tuvo el mármol en Novelda estuvo especialmente ligado a la construcción. En ese momento todo era muy fácil; el revisionismo es muy fácil. Siempre se ponía el ejemplo de lo que estaba ocurriendo en Novelda, y a lo mejor ese era el momento en que había pensado que la época de "las vacas gordas no van a durar toda la vida" y que llegaría un momento en el que iba a haber de preparar el terreno del futuro. Por circunstancias, tanto decisiones políticas erróneas como gobiernos anteriores de querer mantenerse en la cresta de la ola, esas decisiones de futuro no se tomaron. Y ocurre lo que ocurre, ahora, 20 años después, toca tomar las decisiones, que era mi compromiso con la ciudadanía en su día. Ahora debemos hacerlo, y es esa diversificación, esa apuesta por otro tipo de industria. Está muy bien tener la industria potente, pero al tiempo debes empezar a sembrar por si llega un momento en el que la actividad decae.
Y eso es lo que venimos haciendo desde 2019. Afortunadamente, el polígono que teníamos y la zona comercial prevista se han desarrollado, pero debemos dar un paso, más precisamente porque lo estamos viendo: el sector del mármol y las grandes empresas ya no van a ser o ya no son tan grandes. ¿Siguen teniendo viabilidad? Evidentemente, es un sector que sigue siendo viable y ahí está la labor que está realizando la propia asociación de empresas para poner en valor ese producto. Pero mantener los niveles que teníamos a principios de 2000 es imposible. Por tanto, ahí entra en juego tanto la apuesta privada como también la pública a la hora de generar ese clima para poder desarrollar alternativas empresariales.
—¿En qué situación están otros sectores económicos de Novelda, como las especias, la agricultura y los servicios?
-El mármol, a pesar de las últimas noticias, está bastante estable. Como digo, hay más vida, además de Levantina. Afortunadamente tenemos otras grandes empresas que funcionan, pero en su momento tomaron decisiones y les va bien, y que continúan. Luego tenemos el sector especias, el agroalimentario, que funciona muy bien, pero su crecimiento es sostenible en el tiempo. Por tanto, si al año generan 20 empleos, son empleos seguros, pero no pueden dar abasto al ERE de Levantina. Estamos hablando de unas cantidades bestiales o brutales que no pueden absorber toda esa masa laboral. Luego tenemos también el sector agrícola, que en el caso de Novelda sí que se está dando esa transformación del terreno para que sigamos teniendo la uva embolsada, pero cada vez es menos y estamos viendo cómo se está derivando hacia más hortaliza. Esa transformación está motivada por el cambio climático y los recursos hídricos. Al final el mercado manda y la situación es la que es. Quien más, quien menos viene de la agricultura y el contacto que tenemos con ellos es siempre permanente. Y también se está dando esa profesionalización y esa adaptabilidad a las nuevas circunstancias.
"El sector especias, el agroalimentario, que funciona muy bien, pero su crecimiento es sostenible en el tiempo. pero no pueden dar abasto al ERE de Levantina"
Después está el sector comercial y el sector servicios, que también va bien. Vemos cómo año tras año las licencias de aperturas aumentan. También la nueva zona comercial es un éxito. No sólo damos alcance a Novelda, sino a toda esa subcomarca dentro de la comarca que tenemos del Medio Vinalopó. Y también tenemos otro sector económico que se está desarrollando de forma adecuada y sostenible como es el turístico. En Novelda no podemos competir con un Benidorm. Evidentemente no tenemos playas, pero sí que podemos competir con otro turismo como es el turismo de interior y, sobre todo, el cultural y el patrimonial. Dentro de la apuesta que hicimos por el modernismo ya se están dando algunos frutos; ya hay actividad turística y, como tal, el sector privado está invirtiendo en unos apartamentos turísticos, pero alejados de la vorágine que tienen algunas ciudades.
-¿Cómo será el crecimiento del futuro de Novelda?
-Aquí el crecimiento se está haciendo de forma consensuada entre los inversores. Lo primero que hacen es venir a hablar con el Ayuntamiento para ver cómo hacemos ese crecimiento. Por tanto, esa diversificación que planteamos se está dando. Y el siguiente paso y muy importante ha sido el futuro parque empresarial. Es un crecimiento sostenible, pero el boom realmente viene a ese parque industrial porque estamos hablando de un millón y medio de metros cuadrados. Por lo que a mí me dicen, ese futuro polígono de Novelda tiene buena situación geográfica, además de una buena ubicación y buena conectividad, que lo hace un sitio apetitoso sobre el que hay demanda. Por tanto, creo que era el momento de tirar hacia adelante. Los promotores de ese suelo también lo consideran, así que si juntas que sacamos adelante la inversión y hay demanda, creemos que la situación es inmejorable para dar un buen paso adelante.
-Una de esas herencias (y errores) del pasado es el edificio del Instituto del Mármol. En su día, se estuvo trabajando en una que fuera acogerá a empresas del tejido digital. ¿Pero qué se puede hacer ahora? ¿Qué está buscando ahora?
—Pues la verdad es que el Instituto del Mármol es de esa época en la que igual esas inversiones no hubiesen paliado el fin del boom, pero sí le hubieron dado otro tipo de viabilidad al sector, con más en innovación en I+D, ahora de I+D+i.
—Para buscar productos distintos y alternativos…
—Sí, pero bueno, mirar atrás con las cosas que no se han hecho no tiene sentido. Es un edificio que le cedió el Ayuntamiento para que la Generalitat hiciera algo. No se ha hecho nada. Ahí está. Yo siempre digo que es un mamotreto, o un helipuerto espectacular, pues parece que tenemos ahí una pista de aterrizaje. En su día, cuando estuvimos viendo de cederlo al Distrito Digital, vimos que el problema de ese edificio es que está sobredimensionado. Hay un problema tan grande que a veces no sabemos qué hacer allí. Y acabar el edificio supone mucho dinero, y esa etapa de los proyectos megalómanos que se hacían en esta comunidad espero y deseo que no vuelva. Aunque no nos corresponde, nosotros como Ayuntamiento debemos buscar una solución y, ante nuestra ciudadanía, debemos empezar a tomar decisiones y exigir a quien corresponda. Creo que ya toca plantarnos delante de la Generalitat y exigir. "Mira, yo te lo di. Tú no lo acabaste. No me has puesto nada, pues tendrás que indemnizar daños y perjuicios. Algo vas a tener que hacer y si no, pues devolverme y pagarme lo que tenías que haber hecho". Ese es el camino en el que estamos para que tenga viabilidad futura. Incluso llegamos a plantearlo como un apéndice de una universidad o una escuela de negocios. En ese sentido, cuando estaba toda la crisis de Fundesem, dije si hacía falta, ahí estaba, pero al final fue que no. Nadie sabe qué debe hacer en ello.
Alguna persona que ha venido a preguntar por ello en base a lo que hay en Ciudad de la Luz. La Ciudad de la Luz está más hecha para rodajes. En este caso, sería para destinarlo a formación respecto a la industria cinematográfica, platós y demás. Por ahí pueden ir los tiros, pero el tiempo pasa, y el edificio está ahí. Creo que comienza a ser uno de esos elefantes blancos que tiene la Generalitat y, como decimos en Novelda, esto empieza a oler, en el sentido de que ya empieza a ser vergonzoso tener esto.
—Recientemente, el ayuntamiento ha adquirido la propiedad del Centro de Salud, Agua y Deportes después de tener que pagar 5 millones a una entidad bancaria. Se trata de otro edificio de la etapa del 'boom' que lleva 15 años abandonado. ¿Alguna idea de futuro para este proyecto?
—Por bien o por mal, el edificio es nuestro. Al menos esta es la parte clara. El que quiera, única y exclusivamente debe hablar con el Ayuntamiento, y está libre de cargas. Nosotros tenemos unos fondos europeos asociados a ese centro de salud que al final es una piscina o un gimnasio climatizado. Ponerlo en marcha al ayuntamiento le suponía un desembolso de casi 9 millones de euros. Esto para un ayuntamiento como Novelda no es viable porque no sólo es ponerlo en marcha, sino además mantenerlo. No era viable. Sin embargo, la hoja de ruta tuvo que variar. Ahora sí que tenemos algunas propuestas, sobre todo ligadas a ese turismo deportivo, que es una de las cuestiones que está empezando también a asentarse en nuestro municipio, porque está muy cerca de la zona del Velódromo, de las pistas deportivas, del Rally Parc, etcétera. Ese centro tiene pistas y unas piscinas. Están en buenas condiciones. Evidentemente, hay que poner la maquinaria, pero se pueden poner en marcha con relativa facilidad y todo apunta a que todo irá por ahí. Pero no me aventuro porque es otro de los proyectos de megalomanía o tremendo en esta época de grandes fastos del Partido Popular que 20 años después tenemos que pagar las consecuencias, en este caso directamente el municipio de Novelda. Pero ese es un proyecto que tenemos que sentarnos y mirar con detenimiento. No podemos volver a cometer errores del pasado.