BENIDORM. Entre los frentes que se abren al Gobierno de España por la escalada de costes de producción, de alimentación y de energías, se suma uno nuevo, en este caso un viejo conocido sin resolver: el programa de vacaciones de mayores del Imserso. "Este programa ya estaba en claro riesgo de quedar obsoleto y fuera de las condiciones del merco al no haberse ajustado a los costes mínimos de las empresas hoteleras para producir una estancia de estas características, pero en estos momentos urge una reformulación urgente ante la escalada de los precios de la energía, de la alimentación y de los costes laborales, que son los tres principales componentes de la prestación del servicio hotelero", dice la patronal hotelera Hosbec en un comunicado.
Según los informes económicos y los cálculos realizados por la asociación, en 2020 este programa acumulaba un desfase de un -25% sobre el precio de producción. En diciembre de 2020 se estimó que producir una pernoctación del Imserso costaba entre 27 y 33 euros de media, 27 euros sólo coste operativo de producción, que se eleva a 33 euros si se tiene en cuenta los costes de estructura (IBI, hipotecas, alquileres, préstamos, etc.).
"En contraposición a este coste, el Gobierno de España estableció a través de su contrato que la retribución a los hoteleros españoles que participen en este programa sea de 22 euros, mediante un sistema de adjudicación que prima las ofertas a la baja pero obliga a trabajar con hoteles de cuatro estrellas", dicen en un comunicado los empresarios, que recuerdan que estas rebajas en el precio de licitación tienen que ser luego soportadas por los diferentes proveedores de servicios.
El encarecimiento de la energía, de los alimentos y las revisiones que se han tenido que hacer en los convenios colectivos del sector, o que están en curso de negociación, suponen que producir una pernoctación hotelera se haya incrementado al menos un 20%, según los cálculos de Hosbec. Ahora, el punto muerto del Imserso está entre los 32 euros y los 40 euros. "Todo ello sin contar el drama que la pandemia ha supuesto para el sector turístico y las millonarias pérdidas que tiene que afrontar y enjuagar con la producción futura", señala la asociación.
La última adjudicación se realizó a finales de 2021 para una anualidad con la posibilidad de dos prórrogas que "prácticamente no permiten introducir ninguna modificación ni mejora". Por ello, desde el sector se solicita al Gobierno de España que en el paquete de medidas que tiene previsto aprobar para solventar los graves problemas de los incrementos de costes, se incluya una reformulación del Programa Imserso para las próximas anualidades que contemple una dotación presupuestaria y un ajuste económico de los precios que lo hagan viable.
El presidente de Hosbec, Toni Pérez, ha sido muy claro: "Si este programa antes era una ruina, ahora es técnica y económicamente inviable. El Imserso no encontrará hoteles que puedan trabajar a esos precios". Como ya está ocurriendo en otros concursos de obras y servicios públicos "el hotelero será un sector más que deje desierto un concurso público por falta de ajuste a la realidad. Ahora sí que es más rentable cerrar que trabajar con estas pérdidas que ya no se pueden aguantar", ha declarado Mayor sin olvidar el impacto que va a tener en los puestos de trabajo: "Hará que se pierdan miles de puestos de trabajo. El coste para el Estado será muy superior a lo que tendría que invertir para el ajuste económico, pero hay mentes dirigentes que no son capaces de verlo. No es posible que de nuevo se imponga la injusta e injustificada tacañería del Imserso con los hoteleros españoles".