MADRID. Técnicamente hablando, el movimiento desarrollado entre 8-6€, aproximadamente, del ejercicio 2015-2016 difícilmente lo podemos encajar dentro de una consolidación. Si bien es cierto que el movimiento correctivo hasta la zona 4€ es producido por un evento inesperado (Brexit), lo cierto es que dicha corrección daña seriamente la estructura de medio plazo.
Es cierto que por encima de la zona 4-3,50€ no ha pasado nada, pero también lo es que porcentualmente hablando las desviaciones necesarias para que el precio entre en un proceso menos volátil, y más direccional, son operativamente hablando difíciles de encajar.
Así, si tiramos de histórico un proceso parecido al actual lo tendríamos entre los ejercicios 2007-2009 en términos de precio, y nos estaría advirtiendo de un periodo relativamente largo de tiempo antes de encontrar tendencia. Si nos vamos, a formatos algo más cortos, observamos que por debajo de los 6€, todavía tenemos un grado intermedio en movimiento correctivo, y que en términos proporcionales estamos corrigiendo parte del tramo 8-4, sin que se pueda hablar de nada más. Del lado positivo, doble mínimo en 4€ + cruce medias 50-200 sesiones.
Entendemos que estos niveles no permiten tomar decisiones de incorporación, en términos de riesgo/beneficio, que todavía nos quedan al menos unos meses, antes de encontrar un suelo definitivo. Por tanto, las decisiones habría que retrasarlas en tiempo y en precio.
Lo que si sabemos es que la zona 4€ funcionó en su momento, que difícilmente vamos a poder comprar ahí otra vez, sin eventos de tipo extraordinario, pero que para estar cómodos necesitamos desviaciones menores frente a la zona de control relevante, y eso implica posicionarse al menos en 4,70€, o bien esperar a que se forme algo más interesante en los próximos meses.
Óscar Germade es analista de BNP Paribas