El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido este jueves cumplir con el guión y bajar en 25 puntos básicos los tipos de interés, de forma que la tasa de depósito (DFR, por sus siglas en inglés) quedará en el 3,50%. La presidenta de la institución, Christine Lagarde, ha rechazado por su parte comprometerse con un calendario programado.
Los tipos de interés aplicables a las operaciones principales de financiación (MRO) y a la facilidad marginal de préstamo (MLF) disminuirán hasta el 3,65% y el 3,90%, respectivamente. Estos cambios tendrán efecto a partir del 18 de septiembre de 2024; en consecuencia, el diferencial entre la tasa de depósito y la de MRO será de 15 puntos básicos y el mantenido con la de MLF será de un cuarto de punto.
Tal y como daban por descontado los analistas consultados por Europa Press, el BCE ha reanudado su ciclo de flexibilización monetaria tras haberlo pausado en su reunión de julio, cuando se decantó por mantener el precio del dinero.
En cuanto a las proyecciones económicas, cabe reseñar que el 'guardián del euro' ha mantenido sin cambios sus previsiones de inflación general a tres años vista en comparación con las proyecciones de junio. En conjunto, se anticipa que la inflación general se sitúe de media en el 2,5% en 2024, el 2,2% en 2025 y el 1,9% en 2026.
Las estimaciones para la subyacente en 2024 y 2025 sí se han revisado "ligeramente al alza" por los servicios: se quedará en el 2,9% en 2024, el 2,3% en 2025 y el 2% en 2026. Por otra parte, el BCE ha rebajado las expectativas de crecimiento y ahora anticipa un crecimiento del PIB del 0,8% en este ejercicio, un 1,3% en 2025 y un 1,5% en 2026, lo que supone una modificación de una décima menos para los tres años analizados.
Respecto al resto de la agenda económica de este jueves, se ha conocido que la inflación en España se estancó en agosto en relación al mes anterior pero recortó cinco décimas su tasa interanual, hasta el 2,3%, su cifra más baja desde julio de 2023.
Al otro lado del océano Atlántico, se ha conocido en Estados Unidos que el índice de precios de producción registró en agosto una subida del 0,2%, lo que implica un repunte desde el estancamiento del mes previo.
Ante esta coyuntura, Inditex ha sido el valor más alcista (+2,98%) al cierre de sesión, seguido de CaixaBank (+2,62%), ArcelorMittal (+2,36%), Grifols (+2,16%), BBVA (+1,96%), Banco Santander (+1,9%), Banco Sabadell (+1,64%) y Repsol (+1,46%). En el extremo opuesto, han figurado Rovi (-1,73%), Enagás (-1,43%), Fluidra (-1,31%) y Puig (-1%).
En la agenda empresarial, se ha conocido que algunos grandes accionistas de Grifols, a través del bufete Araoz & Rueda, han mandado varias cartas a la compañía de hemoderivados, quejándose, entre otras cuestiones, por la cancelación del 'Capital Markets Day' hasta nuevo aviso, que tenía previsto celebrarse el próximo 10 de octubre, por la "falta de transparencia" en el proceso de la posible oferta pública de adquisición (OPA) del fondo Brookfield Asset Management y la familia fundadora sobre la empresa catalana, según ha podido saber Europa Press en fuentes del despacho.
De su lado, Inditex ha firmado un nuevo máximo histórico al elevar su acción en los 48,82 euros y situar su capitalización bursátil en 155.270 millones de euros.
El resto de las principales Bolsas europeas también ha registrado ganancias: París ha subido un 0,52%; Londres un 0,57%; Milán un 0,84% y Fráncfort un 1,03%.
El barril de Brent se situaba al cierre del Viejo Continente en 72,46 dólares, un 2,6% más, mientras que el West Texas Intermediate avanzaba un 3,05%, hasta los 69,4 dólares.
En el mercado de deuda, el rendimiento del bono español con vencimiento a 10 años ha cerrado en el 2,948% tras sumar dos puntos básicos. De esta forma, la prima de riesgo (el diferencial con el bono alemán) ha quedado en los 80 puntos.
Respecto a las divisas, el euro se apreciaba por la tarde, tras la decisión del BCE, un 0,32% frente al dólar, hasta alcanzar un cruce de 1,1047 'billetes verdes' por cada unidad de la divisa comunitaria.
Por su parte, el oro se encarecía un 1,6% y escalaba a un nuevo máximo en los 2.550 dólares, mientras que el bitcóin se mantenía estable en los 57.600 dólares.