Igualdad dice que no ha bajado las ayudas para salud mental sino que ha reestructurado el sistema

VALÈNCIA (EP). La directora general de Atención Primaria y Autonomía Personal, Mercé Martínez i Llopis, ha explicado este viernes que no se han reducido las ayudas económicas destinadas a personas con problemas de salud mental, sino que se ha procedido a una reestructuración del sistema para proporcionar "una atención personalizada" y un incremento en su independencia.

Martínez respondía así a la denuncia de la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la Comunitat Valenciana (Aerte), que afirmaba que en el último decreto que regula el acceso a prestaciones de dependencia de la Comunitat Valenciana "se ha reducido a una tercera parte las ayudas económicas" para ese colectivo.

Al respecto, la directora general aclara que "no se ha reducido las ayudas" sino las que los recursos económicos que antes se daban para promoción "se han completado con ayudas de centro de día y asistente personal". De este modo, ahora "pueden tener más de un recurso y llegar a los 2.350 euros mensuales", la misma cuantía que antes se destinaba para cubrir el coste de una plaza en una vivienda supervisada de atención a salud mental.

Por su parte, destaca que las personas que necesitan viviendas asistidas "pueden seguir yendo a estas viviendas tuteladas, con una ayuda 2.350 euros" y además se han creado también el concierto social (Sasem) para personas con trastorno mental grave.

Martínez recalca al respecto que "no se bloquea ningún tipo de acceso sino que se ordena el sistema y se atiende a cada uno de forma individualizada para asegurar una vida independiente a las personas con trastorno grave".

De este modo, subraya que se ha querido subsanar las deficiencias de "un mercado desorganizado" en el que había usuarios que cobraban los mismo si eran asistidos en una vivienda con pocos profesionales que si estaban en otras con mejor ratio y más apoyo.

Por ello, se ha procedido a esta reordenación para que los que necesiten poco apoyo, porque tienen más autonomía, se les puede dar atención fuera de los centros y los que precisan de una mayor supervisión que se acrediten para proporcionárselo.