VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Alboraya ha abierto las puertas de "El Chalet de Alboraya". Se trata de una peculiar casa que durante años ha sido objeto de curiosidad e intriga, "con un aura casi mágica", por parte de vecinos, vecinas y turistas, tal y como ha relatado el alcalde, Miguel Chavarría, durante el acto de inauguración.
La apertura tuvo lugar el pasado viernes 25 de junio, y estuvieron presentes tanto miembros de la corporación municipal como vecinos y vecinas, así como Vicente Cristobal Monros Grau y representantes de su familia, que son quienes han donado la edificación el municipio.
El Ayuntamiento pasará a partir de ahora a hacerse cargo la gestión y mantenimiento, que adquirirá una función expositiva. En esta línea, el alcalde, Miguel Chavarría, ha manifestado: "Es un regalo inmenso que agradecemos enormemente, una donación que permitirá al pueblo conservar un trozo de su historia".
El primer edil explicó durante la jornada que el lugar será a partir de ahora "un punto de encuentro cultural y turístico del pueblo, un espacio emblemático donde poder hacer exposiciones y también donde las personas que nos visiten podrán empezar a conocer Alboraya y todo lo que somos y podemos ofrecer", de ahí que también vaya a ser un lugar de visitar para las personas peregrinas de la Ruta del Santo Grial
El chalet estará abierto de seis a ocho de la tarde hasta el próximo 11 de julio, como parte del programa de actividades que sustituye a las fiestas patronales. De esta manera, el vecindario podrá acercarse a conocer la que fuera una vivienda por dentro y disfrutar de una exposición con la historia del edificio y de la familia Monros Grau elaborada por la archivera municipal, Maria José Aguilar, en colaboración con Joan Carles Muñoz, diseñador del Ayuntamiento.
Construido en 1931 por el industrial carpintero Cristóbal Monros y Carmen Lluch, diversas generaciones de la familia han vivido en el llamativo edificio desarrollando no sólo la vida cotidiana de cualquier familia, sino también realizando diversas actividades como la fabricación de velas, la producción de puros, tintado de pieles y una tienda dedicada a la venta de artículos de droguería, papelería, etc.
