VALENCIA. La Policía de Mónaco luce vestimenta valenciana y la culpa de ello la tiene la empresa Insigna, poco conocida fuera de su sector pero que viste a policías locales de toda España. ¿Pero se puede llegar hasta Mónaco sin prestar atención al diseño? Lo cierto es que no.
Su concepción es que la policía es la primera imagen del Ayuntamiento en la calle, por eso confeccionan sus propios patrones, que se ajustan al cuerpo policial del siglo XXI. Producen 150.000 uniformes al año y facturan unos ocho millones de euros.
La empresa fue creada por Antonio Gil de los Ríos hace 45 años, padre de Mario y Antonio Gil, quienes actualmente dirigen la compañía. Empezó siendo una tienda de artículos militares, que estaba en la calle Calamocha de Valencia aunque ahora tiene su sede en el Polígono Industrial El Oliveral.
Hace 23 años, sus dos hijos entraron a la compañía y decidieron virar el modelo. "Nos apoyamos en el negocio base, de artículos militares, pero recondujimos el objetivo con el fin de crear uniformes para la policía local", explica Mario Gil. La intención era crear moda y tendencia implicándose en el diseño, mejorando la morfología de los uniformes que han pasado, por ejemplo, de tener mangas de murciélago a ser entalladas.
Cuando el negocio era de artículos militares tenía clientela de mostrador, sobre todo Guardia Civil. La tienda estaba en frente de la comandancia de Patraix y en algún caso también entraban policía locales y guardas jurados. No solo era textil, había de todo, como un ultramarinos militar.
Sin embargo, Mario Gil tuvo la visión del nicho de mercado. "Elegí al cliente que no cierra", asegura. "La Guardia Civil es un concurso a nivel nacional, pero la policía local eran muchos pequeños clientes al ser un país de comunidades autónomas y municipios que funcionan de manera independiente".
"En 40 años hemos vendido a Gobiernos de todos los colores", explica, y es que sus uniformes llegan a toda España, además de a otros países como Portugal, Francia o Alemania. En el mercado internacional no existen muchas empresas especialistas en uniformes de policía, sino que están enfocadas a la ropa laboral. Por ejemplo, la policía de Alemania, lleva las prendas que visten los de carreteras.
Su llegada a Mónaco ha sido un hito a tener en cuenta en su carrera en el mercado internacional. Han despertado interés en los Emiratos Árabes, y ahora tienen operaciones en marcha con Dubai, Abu Dhabi y Qatar. En España, las empresas fuertes en este terreno también se pueden contar con la palma de la mano, pero durante la crisis han aflorado nuevos competidores satélite que se dedicaban a la ropa laboral y que han decidido entrar en la ropa de policía. "Esto ha estropeado mucho el sector", lamenta.
Gil asegura que lo que les permite marcar la diferencia es que su ropa es técnica. "La prenda tiene que mantener una imagen perfecta del policía, lo que no se puede producir es que la administración se gaste dinero y a los tres meses tenga el pantalón descolorido, el polo decaído, la ropa mermada...", explica. "Nosotros hemos hecho un desarrollo técnico potente basado en el diseño, la durabilidad, el confort, la elegancia y la presencia".
También han aplicado toda la tecnología posible del mercado textil sobre el producto. Todos sus tejidos son ecológicos y reciclables, una exigencia que se han encontrado al salir de España. "Hemos conseguido crear marca en el sector".
Hace 23 años la empresa tejió una red de interproveedores que controla y le permite llegar puntual a cualquier pedido. Son nueve, solo producen para ellos y están repartidos por toda España. "En cambio, nuestros competidores trabajan mucho con importación", asegura.
Su sede es otra de las enseñas de la empresa, en la que trabajan 49 empleados. Se trata de un espacio domotizado con una boutique que en nada parece un tienda de uniformes para policía. Además, se definen como un sastre a medida. "Tenemos diseños, pero nos ajustamos a lo que nos pide cada cliente". En sus hitos, ser la primera empresa en realizar un patrón del uniforme específico para mujeres de la policía local.