VALÈNCIA. El candidato del PSPV-PSOE y actualmente presidente de la Generalitat, Ximo Puig (Morella, 1959), participó días atrás en los encuentros que viene organizando Valencia Plaza con los diferentes aspirantes al Consell. En la cita, celebrada en el emblemático Café Madrid, el líder de los socialistas valencianos puso sobre la mesa algunas de las cuestiones fundamentales de su programa para los próximos cuatro años si vuelve a llevar el timón del Palau. Además, Puig respondió a las preguntas de varios miembros de la redacción encabezados por el director del periódico, Javier Alfonso, y el gerente del grupo, Miguel Miró, pero también se sometió al escrutinio de diversos invitados de este diario, que posteriormente puntuaron al candidato y opinaron sobre la impresión que les había transmitido durante el almuerzo.
En esta ocasión, en el encuentro participaron como invitados el profesor titular de Periodismo en la Universitat de València y experto en comunicación política Guillermo López, la politóloga y asesora en diversos proyectos de consultoría Andrea Kruithof y la también politóloga y profesora en este caso de Análisis y Liderazgo Político en el CEU-UCH, Blanca Nicasio.
En general, los invitados coincidieron en subrayar el perfil claramente "institucional y presidencialista" de Puig durante el encuentro. "Es sólido, moderado y prudente, aunque quizá demasiado", puntualizaron al considerar que en ocasiones su deseo de centralidad le deja algo alejado de sus aliados progresistas del Botànic.
El profesor Guillermo López incidió en este punto para considerar que el deseo del candidato socialista de "ocupar el centro" y la "transversalidad", le llevó durante la entrevista a defender propuestas que, en algunos aspectos, resultan "indistinguibles de las que haría un dirigente liberal o conservador, como por ejemplo la idea de que los alumnos que aprueben un curso completo en la universidad no tengan que pagar matrícula y lo haga la Generalitat en premio a su esfuerzo".
Un hecho que para López no indica, sin embargo, que la meta de Puig se dirija a alejarse del Botànic. "Su apuesta es inequívocamente de izquierdas aunque mantenga un discurso más centrado", opinó, para valorar el tono "didáctico" y el relato "bien hilado la mayor parte del tiempo" del aspirante socialista. "Se nota su experiencia y la formación periodística a la hora de tratar con los medios en un foro de estas características", concluyó.
Por su parte, Andrea Kruithof también destacó el "aire presidencial" de Puig. Un "aura institucional" que, a riesgo de hacerlo parecer "más rígido y distante", le proporciona "solidez para reivindicar como propio el legado de cuatro años de legislatura".
En general, la politóloga vio a Puig haciendo uso de líneas de argumentación "ligeramente manidas" aunque resultando "creíble" al menos "en su zona de confort". "No comete imprudencias a la hora de responder preguntas y es coherente para mostrase como el garante del espacio que ya ocupa, y que va dirigido a mantener el sistema de bienestar y los derechos sociales existentes".
Por otro lado, la profesora Blanca Nicasio también puso el acento en el "tono institucional" de Puig y en su deseo de "ganar todo el espacio posible del centro político". "Una manera de intentar asegurar el voto de la gran mayoría del electorado valenciano que opta por la moderación y la estabilidad frente a la exaltación y la confrontación".
Así, a juicio de la politóloga, Puig no llega a "entusiasmar en exceso con sus propuestas" pero "convence al explicar cuánto costarán y cómo se financiarán". "No lo logra en cambio en otras cuestiones, como a la hora de argumentar sus motivos para el adelanto electoral", subrayó Nicasio, quien sí vio habilidad en el candidato socialista para distanciarse de los asuntos que "más polarizan" con la intención de "captar el interés del ciudadano normal y corriente, que es a su juicio donde reside el alto porcentaje de indecisos que reflejan las encuestas".
PUNTUACIÓN MEDIA DE LOS INVITADOS (de 0 a 10)
1. Imagen, apariencia y primera impresión: 6,14
2. Contenido de su discurso: 6,57
3. Capacidad de argumentación en el debate: 6,35
4. Credibilidad y confianza: 6,57
Puntuación Media total: 6,40
La magistrada apunta a irregularidades administrativas y al desequilibrio en la distribución del dinero, pero no aprecia ilícito penal