VALENCIA, (EP). El centro tecnológico AINIA investiga técnicas más rápidas, automatizadas y económicas para mejorar el control de la contaminación de alimentos en el marco del proyecto Microdet. Las nuevas técnicas servirían para facilitar la detección de microorganismos, así como métodos para automatizar las tareas de recuento de cultivos que se hacen habitualmente en los laboratorios.
Según ha informado AINIA en un comunicado, bacterias como la salmonella, el campylobacter y la escherichia coli enterohemorrágica están entre los patógenos de transmisión alimentaria más comunes y los efectos de su presencia en los alimentos afectan a millones de personas cada año en todo el mundo, "a veces, con consecuencias muy graves para la salud".
Por este motivo, garantizar la inocuidad de los alimentos en toda la cadena alimentaria es un "objetivo prioritario". Una manera de reducir los efectos negativos causados por alimentos en mal estado consiste en desarrollar nuevas técnicas más rápidas, automatizadas y económicas que faciliten el control de la contaminación de los alimentos.
Para lograrlo, el proyecto Microdet, que cuenta con el apoyo del Ivace y los Fondos Feder, está trabajando con tecnologías ópticas avanzadas (tecnologías de excitación multiespectral, nuevos sensores de imagen de alta resolución, sensores microelectrónicos hiperespectrales), que permitan detectar y medir de manera más eficaz las colonias de diferentes microrganismos presentes en los alimentos.
Además, se están investigando nuevos métodos para automatizar el recuento de cultivos de los microorganismos más habituales en la industria alimentaria y que obligan en la actualidad a hacer un procesado manual por operarios para su lectura y análisis, puesto que los sistemas disponibles "no funcionan bien y tienen una tasa de acierto en el recuento muy baja".
Disponer de nuevas herramientas que permitan realizar un control "más exhaustivo y automatizado" ofrecerá resultados "más seguros" sobre la inocuidad de los productos alimenticios y reducirá los costes de los análisis, mejorando la competitividad de las empresas del sector agroalimentario y reduciendo el impacto ocasionado por alimentos en mal estado en la salud de los consumidores.