VALENCIA, (EFE). El adjunto al presidente ejecutivo de los Premios Rey Jaime I, Javier Quesada, reclama a la Generalitat que "refuerce" su apoyo a estos galardones, ya que la cantidad económica que aporta en la actualidad, por debajo de los 120.000 euros, "no llega para financiar ni la mitad de un premio".
"Sabemos que no es un buen momento financiero y presupuestario, pero lo que más daño hace es estropear lo que siempre ha funcionado bien", afirma Quesada, en la que lamenta el descenso de la cantidad económica que el Consell destina a los premios.
Quesada recuerda que la Generalitat llegó a aportar a los premios "hace muchos años" la "importante" cantidad de 800.000 euros, pero en la actualidad la aportación no llega a los 120.000 cuando cada uno de los premios "cuesta 240.000 euros".
"El dinero que pedimos no es para nosotros sino para devolvérselo a la sociedad; el coste de transformación, que es cuánto dinero necesitamos gastar para poder hacer esa actividad, es el más bajo de cualquier fundación que se quiera comparar con nosotros por la poca estructura que tenemos", reivindica.
A su juicio, "si los demás no ven que las instituciones se vuelcan parece que no te dan la importancia que mereces", y agrega que más que el dinero, le preocupa que les digan que no les hace caso su gobierno más próximo. "No queda bien", añade.
Sin embargo, valora el apoyo de las empresas privadas, que son las principales patrocinadoras de las seis categorías -Investigación Básica, Economía, Investigación Médica, Protección del Medio Ambiente, Nuevas Tecnologías y Emprendedor-, dotadas cada una de ellas con un premio de 100.000 euros.
A apenas dos semanas para que se entreguen los Premios Rey Jaime I en la Lonja de Valencia, el 24 de noviembre, en un acto en el que se espera la presencia de los reyes Felipe VI y Letizia, Quesada reivindica la importancia de estos galardones, que buscan atraer la atención sobre la actividad investigadora "que transforme el país y lo mejore".
Descarta compararlos con los Premios Princesa de Asturias, porque afirma que son "distintos", ya que los Jaime I son "muy ajustados" a la ciencia y al emprendimiento y premian trabajos hechos en España aunque el premiado sea extranjero, y espera que estos galardones, que ya han llegado a su vigésimo octava edición, "continúen veintiocho años más".
Reconoce como escaso el número de mujeres en estos premios, ya que no llegan ni al 10 % en las candidaturas, pero lo achaca a que la mujer ha llegado al mundo de la ciencia "con retraso" pero se muestra seguro de que esto "va a cambiar en muy pocos años".
Además, después de que uno de los premiados, Francisco Martínez Mojica, aspirara al último Nobel de Medicina y Química, que finalmente no obtuvo, Quesada afirma que en España hay "materia prima" para ganar este preciado galardón en el futuro.
Quesada considera que es "significativamente peyorativo" que en España la ciencia, la tecnología y la investigación "no lleguen a ser tan importantes" como para "merecer" un ministerio específico para esas áreas.
"La mejor fortaleza de un país hoy en día la dan la ciencia y la tecnología y echo en falta un ministerio" que los englobe, asegura el también director general de la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados (FVEA).
A su juicio, España ha ido a "contracorriente" en Europa y, frente a otros países que se han reforzado en innovación e investigación para salir fortalecidos de la recesión, nuestro país "ha recortado sin darse cuenta de que los daños causados son irreversibles".
Considera que el Gobierno de España ha priorizado en problemas "más inmediatos" como el empleo pero recuerda que el "empleo de mañana depende de la investigación y el desarrollo". "A lo mejor -apunta-, lo que tenemos es algo de miopía porque tratamos lo inmediato como más urgente, pero lo importante puede no ser lo más inmediato".
La falta de inversiones en ciencia e investigación en los últimos años pasará factura a España, que tendrá que recuperar los "diez años perdidos" en estas áreas. Además, reclama la puesta en marcha de un modelo estable de financiación que no dependa del partido político de turno o de los vaivenes económicos.
"Para I+D+i los compromisos presupuestarios deberían ser consensuados y de quinquenio a quinquenio", asegura Quesada, quien también confía en que España cuente pronto con una Ley de Mecenazgo, una materia en la que países como Francia, Alemania, Reino Unido o Estados Unidos le llevan "una gran delantera".