Foto: RAFA MOLINAALICANTE. El cambio de etapa en el grupo Iberian Sports Retail Group (ISRG), propietario de la cadena alicantina de artículos deportivos Sprinter, no se detiene. Tras adquirir a sus hasta ahora socios su 49,9% de la 'joint venture' el pasado octubre, la británica JD Sports ha situado a Francesc Casabella como nuevo director general de la enseña alicantina, y ahora los cambios llegan al consejo de administración.
Esta misma semana han cesado como consejeros del grupo, al tiempo que dejan de ser apoderados de sus numerosas sociedades (Sprinter, JD Spain, Bodytone, Deporvillage...), tanto la familia fundadora del retailer deportivo alicantino como sus socios portugueses. El Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme) publica los ceses de Emilia Soria y Silvestre Segarra, matrimonio cofundador de Sprinter, así como de su hijo David Segarra, también consejero y hasta hace poco alto directivo de JD. Asimismo, sale del consejo Miguel Mota, el directivo portugués que ejercía como consejero delegado en representación de Sonae.
Como ha venido contado este diario, JD y sus socios (la sociedad patrimonial de los Segarra, dueña del 20%, y Sonae, que controlaba el otro 30%) rompieron su idilio el pasado verano, al poner en marcha la alianza ibérica la opción de compra prevista en el acuerdo de 2018, por sus discrepancias con el cambio de rumbo emprendido por JD. Un cambio que llegaba después de que el gigante británico relevase a su histórico presidente Peter Cowgill, con quien la sintonía era máxima, por el francés Regis Schultz. Dicha cláusula obligaba a JD a comprar la parte de sus socios o vender la suya propia, y finalmente optó por la primera.
La operación se cerró el mes pasado por 500 millones de euros, y de hecho el mismo Registro Mercantil ha inscrito esta semana la declaración de unipersonalidad de ISGR. JD Sports Fashion, que hasta ahora mantenía el 51,1%, se convierte en único accionista del grupo en España. Iberian Sports se ha convertido en el último lustro en un gigante del retail deportivo que factura más de 1.000 millones de euros al año y ha adelantado a Decathlon en número de puntos de venta con las últimas aperturas de Sprinter. La enseña nacida en Elche, además, ha realizado una importante inversión en 2023 para cambiar el concepto de sus tiendas hacia un modelo experiencial.
Sprinter se ha beneficiado enormemente de la alianza con JD y Sonae, pues ha doblado su número de tiendas (en 2017, antes de la joint venture, gestionaba 125 puntos de venta, y ahora son casi 220 sin contar Holanda) en un lustro, periodo en el que su facturación ha pasado de los algo menos de 200 millones de euros de 2017 a los prácticamente 520 millones que ingresó el año pasado. Es decir, dos veces y media el negocio que tenía en solitario. Además, desde el año pasado ha comenzado a operar en Países Bajos, donde cuenta ya con cerca de una decena de tiendas, al comprar el negocio en el país de dos marcas secundarias de JD.
