Tres activistas se enfrentan al juicio por el ataque al bus de Hazte Oír en València y la Fiscalía pide multa

VALÈNCIA. Tres activistas se enfrentan este jueves a juicio por el ataque al autobús que la organización Hazte Oír intentó exhibir en València en marzo de 2019 con el lema "#StopFeminazis. No es Violencia de Género, es Violencia Doméstica". Un mensaje que, además, iba acompañado del rostro de Hitler maquillado. 

La Fiscalía pide una multa de 10 euros al día durante dos meses para las acusadas por un delito leve de daños, mientras que Hazte Oír les solicita penas de 8 años de cárcel y 37 meses de multa por los delitos de coacciones, desórdenes públicos y delito leve de daños. 

El vehículo fue inmovilizado por la Policía Local junto al Palacio de Congresos nada más llegó a la ciudad por incumplir la normativa debido a la instalación de láminas adheridas a las superficies acristaladas que constan como salida de emergencia. Al no estar dado de alta como publicitario y no poder circular en esas condiciones, se trasladó a la central de policía para retirar los vinilos. 

En ese momento, relataba el auto de procesamiento de los acusados, "llegó un grupo de personas, de entre los cuales pudieron ser distinguidos los investigados, abalanzándose estos sobre el autobús y arrancándole el vinilo de los laterales". Unas acciones que ocasionaron daños valorados en 423 euros según tasación pericial.

Hazte Oír pidió entonces la apertura de juicio, mientras la Fiscalía solicitó que se siguieran los trámites por el procedimiento para el juicio de delitos leves. El juez recordó en el auto de apertura de juicio que el Ministerio Público no recurrió el de procesamiento, lo que habría sido "la vía correcta" para, a continuación, formular acusación en esos términos, sino que "interesó una nueva transformación procedimental sobre la base de consideraciones jurídicas que afectan al resultado de delito de daños". De manera que, concluía, el camino procesal debía continuar considerando la posición de la otra parte acusadora (Hazte Oír).  

Tras el episodio de marzo de 2019, el Ayuntamiento de València sancionó con 200 euros al propietario del autobús fletado al entender que cometió una infracción grave al incumplir el reglamento relativo a vehículos de tráfico. Ese mismo junio, la Fiscalía de Delitos de Odio archivó la denuncia presentada por la plataforma contra el alcalde de València, Joan Ribó; la primera teniente de Alcalde, Sandra Gómez; y otras personas que se congregaron en el Palacio de Congresos para protestar contra el mensaje del vehículo. 

La Asamblea Feminista de València ha convocado una concentración para apoyar a las acusadas a las puertas de la Ciudad de la Justicia este jueves a las 10.30.