VALÈNCIA (VP). La Junta General Ordinaria de Accionistas de CaixaBank ha aprobado hoy la gestión y los resultados del ejercicio 2019. CaixaBank ha obtenido el apoyo mayoritario de los accionistas, que han aprobado, entre otras propuestas formuladas por el Consejo de Administración, la reelección como consejera de María Verónica Fisas Vergés y el nombramiento como nuevo miembro del Consejo de Administración de Francisco Javier García Sanz.
Durante su intervención ante los accionistas, el presidente de CaixaBank, Jordi Gual, ha agradecido a Marcelino Armenter “su dedicación, apoyo y compromiso con la entidad durante el tiempo que ha formado parte de nuestro Consejo”, y también al profesor Xavier Vives, “que deja el Consejo tras muchos años de gran servicio a la entidad”.
El presidente y el consejero delegado han trasladado su “apoyo y solidaridad a las personas que han sufrido los estragos de la covid-19 y al personal sanitario por su labor encomiable”. También han agradecido el esfuerzo del equipo humano de CaixaBank, que ha demostrado su compromiso con la entidad, clientes y sociedad. “Gracias a ellos el banco se ha mantenido plenamente operativo y ha podido dar respuesta y ser proactivo en el momento en que más se le necesita”, han manifestado.
En la primera parte de su discurso, Jordi Gual ha reconocido que estamos en una situación de incertidumbre y ha querido trasladar un mensaje de confianza y esperanza por las medidas decisivas que se están tomando desde varios frentes para combatir la caída de la actividad económica. “En CaixaBank estamos preparados para contribuir a la recuperación económica: cubriendo las necesidades de financiación de nuestros clientes, ofreciendo ayuda a aquellos que más la necesitan e intensificando nuestra labor social”, ha declarado en la primera Junta de Accionistas celebrada de forma telemática como consecuencia del estado de alarma. “Siendo fieles a nuestro compromiso con los clientes y con el conjunto de la sociedad, como viene haciendo ‘la Caixa’ desde hace más de 110 años”, ha añadido.
En este sentido, Gual ha estimado que la recuperación económica dependerá del grado de éxito en la contención del virus, de la capacidad para evitar posibles rebrotes y de si se accede pronto a una vacuna o terapias efectivas. “También dependerá de la efectividad de las políticas económicas que se han comenzado a desplegar para hacer frente a este desafío”, ha matizado.
Sobre las políticas económicas que se han implementado ante la covid-19, el presidente de CaixaBank ha reconocido que son medidas que van en la dirección correcta aunque ha considerado que “la situación actual merece, además, un esfuerzo fiscal coordinado y sustancial a nivel europeo y la implementación de mecanismos de compartición del gasto entre países para evitar la distorsión del mercado único”.
Jordi Gual ha puesto en valor la contundencia de la respuesta del BCE con programas de compras de deuda pública, inyecciones de liquidez al sistema financiero y la relajación de los requisitos prudenciales. Para la integridad de la zona euro, “es fundamental que el BCE continúe garantizando que su política monetaria se transmite con efectividad a todos los países de la Eurozona, independientemente de su situación fiscal”, ha señalado.
El presidente de la entidad ha reconocido que CaixaBank se enfrenta a la situación actual desde una posición de fortaleza, tanto financiera como comercial. De esta manera, Gual ha explicado que la misma prudencia que ha llevado a la entidad a esta posición de fortaleza “es la que nos ha hecho provisionar en el primer trimestre de este año 400 millones de euros para anticipar los efectos de la covid-19. Una decisión responsable y que refleja una estrategia conservadora respecto a la cobertura de riesgos”.
En este sentido, ha destacado que “esta misma responsabilidad es la que se traslada a la decisión del Consejo de Administración del 26 de marzo de reducir el dividendo propuesto originalmente para el ejercicio 2019 de 15 céntimos a 7 céntimos brutos por acción”. Jordi Gual ha recordado la modificación de la política de dividendos para el ejercicio 2020 y la distribución de un dividendo en efectivo no superior al 30% del beneficio neto.
En cuanto a la cotización de la acción, Gual ha reconocido que la crisis sanitaria actual ha penalizado a los mercados bursátiles en general y al sector financiero en particular. No obstante, ha sostenido que “el comportamiento relativo de la acción durante los últimos meses ha reflejado la resiliencia del modelo de negocio y la confianza en la capacidad de la entidad de generar valor a largo plazo”.
Jordi Gual y Gonzalo Gortázar han subrayado el compromiso social de CaixaBank. Por ello, han explicado que “la entidad está trabajando para ayudar a mitigar los efectos económicos y sociales de la pandemia para dar respuesta a las necesidades de los colectivos más afectados” y ha repasado las principales medidas que desde la entidad se han adoptado:
Por su parte, el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha iniciado su intervención con un repaso del ejercicio 2019. Gortázar ha subrayado como principales avances del año, “la buena evolución del negocio con ganancias en cuota de mercado en los principales productos, una actividad comercial centrada en apoyar a las familias y las empresas, el impulso de los proyectos de transformación del Plan Estratégico y la fortaleza financiera para seguir apoyando la economía”.
CaixaBank ha continuado creciendo significativamente en las cuotas de mercado de productos retail, a pesar de contar ya con una posición de liderazgo. “Tenemos una cuota en nóminas del 27,1%, en productos de ahorro a largo plazo del 22,9%, del 16% en crédito al sector privado; además, alcanzamos una penetración de clientes particulares del 27,8% y del 29,4% en clientes digitales, lo que nos afianza como el banco de referencia del sistema”, ha destacado el consejero delegado.
En cuanto a la rentabilidad de CaixaBank, Gortázar ha señalado que “en 2019 se situó en niveles adecuados, superiores al 10%, afectada por el coste del acuerdo laboral”. Esta rentabilidad recurrente, ha explicado, “se apoyó en una mejora de la calidad de los ingresos, con un crecimiento de los ingresos core del 1,2%”.
Para Gonzalo Gortázar, las prioridades de los próximos años pasan por “mantener la posición de fortaleza financiera que nos permita seguir apoyando la economía ante la actual crisis sanitaria y económica”. La entidad parte con una ratio de morosidad en mínimos, una elevada posición de liquidez y unos holgados niveles de solvencia. Además, ha alabado que el banco se haya adaptado a la nueva situación para que sea operativo y accesible en todo momento, y “todo gracias a un equipo comprometido con la sociedad y con la misión de CaixaBank”.
Por otro lado, el consejero delegado ha destacado el impulso de CaixaBank a los proyectos de transformación del Plan Estratégico, “con la adaptación de la red a las expectativas del cliente y un fuerte incremento de las oficinas Store del 70%”. Gortázar ha subrayado que “CaixaBank fomenta su modelo de asesoramiento y especialización, mantiene la capilaridad de la red de oficinas y la cercanía con el territorio, con una presencia en más de 2.000 municipios”. Además, el consejero delegado ha apuntado también que “la red rural permanece estable y eficiente, con un total de 1.099 oficinas AgroBank, buscando la máxima orientación al cliente”.
Gonzalo Gortázar ha señalado que, “con el fin de mejorar la experiencia del cliente, hemos seguido invirtiendo en el desarrollo de nuestras capacidades digitales, reforzando nuestro liderazgo en banca digital con un total de clientes digitales del 62,9%”.
“Estamos comprometidos con los sectores más vulnerables y con los más afectados por la crisis”, ha señalado Gortázar en la parte final de su intervención. Para el consejero delegado, “es importante que miremos hacia el futuro con compromiso y responsabilidad ante la actual crisis sanitaria y económica que supone una oportunidad para poner en valor el modelo diferencial que distingue a CaixaBank, basado en los valores de calidad, confianza y compromiso social".