La ANIH señala que las modificaciones en el Estatuto del Investigador son "un mal apaño"

VALÈNCIA. La Asociación Nacional de Investigadores Hospitalarios (ANIH) ha lamentado las últimas modificaciones planteadas por la Conselleria de Sanidad al proyecto de decreto del Estatuto de Investigador tras el informe de la Abogacía de la Generalitat. Desde la Abogacía, apuntaban a cuestiones que van desde la competencia por parte de la administración autonómica para regular la materia a la necesidad de negociación colectiva. 

Sin embargo, desde la dirección general, lideraba por Javier Burgos, entendían que no es necesario negociar ni modificar el contenido del decreto, al entender que no están estableciendo nuevas categorías y su concepto no está en la normativa vigente. Una cuestión que, según señalan desde la asociación, limita sobremanera el escalar y la consolidación de forma adecuada.

"El texto es bastante grave porque lo que ha cambiado estropea mucho la cuestión", señalan desde ANIH . "Donde antes había una cierta trayectoria y detalles a corregir, ahora ha limitado en cada una de esas etapas a un tipo de contrato según la ley de contrato de la ley de la ciencia que no tiene sentido y rompe bastantes cuestiones de la trayectoria", lamenta. Y es que, para evitar el razonamiento de la Abogacía de que se necesita negociación colectiva, desde la dirección general de Investigación ha hecho encajes con contratos de la Ley de la Ciencia.

"Entre las cuestiones extrañas pone al R3 como un contrato indefinido de actividades científico técnicas que va a desaparecer o el R4 está marcado con modalidad de investigador distinguido, que es para fichajes singulares para la dirección de centros,  y que permite el libre despido", lamentan, a la vez que insisten en que la norma en la que se basa el Estatuto cambiará en los próximos meses con la nueva Ley de la Ciencia.

"Lo han hecho así para cubrirse y todas las ventajas que podía tener este texto se caen, ya crea una cierta obligación de usar esas figuras que es contraproducente. Ha sido una justificación, para evitar la negociación colectiva", insisten. "Se trata de una mal apaño para la carrera investigadora. Es mejor hacer una incorporación en las plantillas de los trabajadores y, en el caso de que no, mejor una buena negociación colectiva. Han hecho una pirueta jurídica que pone esto en un sinsentido".