VALÈNCIA. El Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) ha adjudicado a la UTE formada por las empresas Serveis Marítims Port Eivissa, S.L. y la firma Ocibar S.A. la explotación en régimen de concesión administrativa de las instalaciones náutico-deportivas de la zona norte del recinto portuario en La Marina de València. El plazo de la concesión será de 35 años, ampliables con hasta un máximo de dos prórrogas sucesivas de 8 y 7 años, respectivamente. La inversión prevista asciende a 84.820.348,93 euros, según detalla la APV en un comunicado.
El proyecto contempla la gestión de 370 amarres en la dársena interior (de 12 metros hasta 130 metros de eslora); 74 amarres en la dársena norte (de 24 metros a 115 metros de eslora); y 227 amarres en la dársena sur (desde 6 metros hasta 40 metros de eslora).
En el varadero del proyecto, la capacidad de la maquinaria de izada y botadura propuesta abarcará embarcaciones desde 10-15 metros de eslora hasta 60 metros. Además, se dispondrá de una marina seca capaz de albergar 228 embarcaciones de hasta 8 metros.
Concretamente, las empresas se encargarán de la adecuación y explotación de las instalaciones náutico-deportivas de la zona norte del Puerto de València a través de la prestación de la gestión de los puestos de amarre; el servicio de control marítimo; y el suministro de carburantes a embarcaciones, así como de agua, energía eléctrica, telefonía y transmisión de datos. También, la concesión incluye el servicio de aparcamiento de vehículos y el desarrollo de actividades de carácter formativo y educativo y de apoyo al deporte náutico en el campo de la náutica deportiva, como pueden ser cursos de vela en sus distintas variantes.
De igual modo, la UTE adjudicataria se encargará de la organización de eventos y competiciones deportivas y actividades culturales; así como de la explotación de locales comerciales, ocio y/o restauración, u oficinas.
Según destaca la APV, "la ordenación de los amarres propuesta mejorará la productividad y la competitividad, y permitirá aumentar la presencia de embarcaciones tanto de gran eslora como de pequeña y mediana eslora". "Todo ello sin dejar de atender a embarcaciones de carácter social, con la construcción de una marina seca para atender más adecuadamente este tipo de barcos más pequeños", señala la institución.
Por otro lado, en el encuentro extraordinario celebrado este lunes se ha formalizado la adjudicación por 590 millones de euros de las obras de la nueva terminal de contenedores en el Puerto a la UTE formada por Acciona Construcción, Jan de Nul NV y Grupo Bertolín, que ya figuraba como favorita para hacerse con este pedido al obtener la mejor puntuación entre las ofertas presentadas.
La nueva terminal de contenedores del Puerto de València será una infraestructura que aunará tecnología, ecoeficiencia, intermodalidad y sostenibilidad, ofreciendo un óptimo servicio y manteniendo el carácter interoceánico que garantiza la conectividad con los mercados de los cinco continentes. Además, será una infraestructura que generará un empleo y dinamizará la actividad económica de su hinterland, y reforzará el estatus de los puertos españoles como referentes europeos en el arco Mediterráneo, permitiendo al tejido empresarial mantener su competitividad en este mundo global.
Esta infraestructura, que se ubicará en aguas abrigadas de la ampliación norte cuyas obras finalizaron en 2012, tendrá una superficie de unas 137 hectáreas y 1.970 metros de línea de atraque, con una capacidad para albergar hasta cinco millones de contenedores. La terminal contará con diseño, tecnologías y equipamiento de última generación, con una instalación totalmente electrificada, que permita atender los grandes buques portacontenedores en servicio, con elevados rendimientos tanto en las operaciones marítimas como terrestres.