VALÈNCIA. (EP) La Cámara de Comercio de España prevé que el Producto Interior Bruto (PIB) español aumentará un 2,8% en 2023, frente al crecimiento del 4,3% previsto para este año, y estima que la tasa de inflación se reducirá en el próximo ejercicio de manera significativa desde el 7,6% estimado en 2022 hasta el 3,3% de media anual.
"El crecimiento de la economía española continuará desacelerándose en los próximos meses", ha advertido el organismo que preside José Luis Bonet en la primera estimación que realiza para la economía española de cara al próximo año.
La explicación de esta ralentización se encuentra, por un lado, en el menor vigor de la inversión en bienes de equipo --cuyo incrementó será la mitad que este año-- y, por otro, en el menor dinamismo del sector exterior.
En el primer caso, la esperada subida de los tipos de interés y la incertidumbre asociada al actual entorno económico podrían frenar las decisiones de inversión empresarial. De su lado, el menor crecimiento de la economía mundial debilitará la demanda internacional, lo que repercutirá en un menor avance de las exportaciones españolas.
Con todo, la Cámara prevé que el crecimiento de la economía en 2023 se basará sobre todo en la demanda interna, que aportará 2,5 puntos porcentuales al crecimiento del PIB. El avance tanto del consumo privado como del público se situará en niveles similares a los previstos para este ejercicio, un 2% y un 0,7%, respectivamente.
Sin embargo, la formación bruta de capital fijo será menos robusta, con un aumento esperado del 2,7%, frente al 4,5% previsto para este año, debido al menor crecimiento de la inversión en bienes de equipo, que será la mitad que el estimado para 2022: un 5,3% en 2023 frente al 10,6% de 2022. La inversión en construcción mantendrá una tasa de aumento en el entorno del 1,2%.
En esta primera aproximación al comportamiento de la economía española en 2023, el Servicio de Estudios de la Cámara de Comercio de España anticipa un menor dinamismo en el sector exterior. En concreto, prevé que las exportaciones aumentarán un 4,5%, frente al 11,5% estimado para el actual ejercicio, mientras que las importaciones se incrementarán un 4,4% en lugar del 6,8% previsto para este año.
Por lo que se refiere a la inflación, se espera una moderación significativa de la misma en 2023, que llevará a un crecimiento medio del IPC del 3,3% en el conjunto del ejercicio frente al 7,6% previsto para 2022. Igualmente, el IPC subyacente bajará del 4,1% al 3%.
En consonancia con el menor ritmo de crecimiento económico, se espera también una ralentización en la creación de puestos de trabajo. El empleo aumentará un 1,9% en 2023 frente al 3,2% previsto para este año, lo que supondrá la creación de unos 354.000 puestos de trabajo adicionales. La tasa de paro se reducirá cinco décimas, hasta situarse en el 13,4% de media anual en 2023.
En cuanto al déficit público, se prevé una reducción de cuatro décimas, hasta el 5,5% del PIB.