VALÈNCIA. La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha desmentido este lunes las declaraciones realizadas por el president de la Generalitat, Carlos Mazón, y ha asegurado que entre las competencias de la Confederación están medir datos de pluviometría y el nivel de los cauces, pero "no está la de emitir las alertas públicas en materia hidrológica", cuestión de la que son responsables "las autoridades competentes en materia de protección civil".
Mazón había asegurado este lunes, respecto al aviso enviado a los móviles el día de la dana pasadas las ocho de la tarde, que la Confederación Hidrográfica desactivó durante ese día tres veces la alerta hidrográfica, y no fue hasta las 18:45 horas cuando avisaron de que la previsión de 200 l/m2 se elevaba 1.700, mientras que media hora después se avisó de la posible ruptura de la prensa de Forata, que finalmente no se produjo.
La Confederación aseguró este lunes que "las confederaciones hidrográficas tienen entre suscompetencias medir y proporcionar datos actualizados en dos instancias: datos de pluviometría y el nivel de los cauces, técnicamente calificado como "aforo". Entr esus competencias no está la de emitir las alertas públicas en materia hidrológica. Son las autoridades competentes en materia de protección civil las responsablesde evaluar las posibles afecciones de ese riesgo físico en la población y en el entorno, y, por tanto, de emitir los avisos que corresponda y adoptar las medidas de protección que consideren más adecuadas en cada caso".
En ese sentido, aclaró que "las confederaciones hidrográficas cuentan con una red automática de información hidrológica (SAIH) que permite monitorizar caudales permanentemente para que las autoridades de emergencias valoren la afección concreta sobre el territorio y determinen actuaciones para prevenir daños", para lo que las instituciones cuentan también "con datos meteorológicos de predicción proporcionados por la AEMET".
En el contexto de esta Dana, la Confederación subrayó que los servicios de medición "proporcionaron los datos del nivel de los cauces de los ríos" y que, ante la primera crecida del Barranco del Poyo que se produjo entorno a las 12:30 horas del martes, el Centre de Coordinació d’Emergències de la Generalitat Valenciana "emitió la alerta hidrológica" en la que se advertía a la ciudadanía del "peligro de acercarse a riberas y barrancos". "Este peligro venía precedido por una alerta roja de la AEMET emitida a las 7:31horas de la mañana del martes", apunta el organismo.
La Confederación explica que a partir de media mañana, se registró "una disminución progresiva del caudal del Barranco del Poyo", pasando de 264 m3/s a las 12:07 a 28,70 m3/2 a las 15:50 pero insiste en que "estos datos no supusieron ninguna desactivación de la alerta emitida por el Centre de Coordinació d’Emergències de la Generalitat Valenciana" sino que "son únicamente datos objetivos de medición de aforo".
Fue a partir de las 17 horas cuando se detecta "un aumento brusco del caudal" del Barranco del Poyo y en media hora alcanza "el mismo nivel de aforo que motivó la alerta emitida por el Centre de Coordinació d’Emergències de la Generalitat Valencianadel mediodía". "Sin embargo, esta vez las autoridades autonómicas no emitieron una nueva alerta", apunta el organismo
A las 18:55 el caudal alcanzó 2.282 m3/s: "En ese momento la fuerza del agua, que venía reflejándose desde dos horas antes, acaba por arrastrar los sistemas de medición". "Las autoridades competentes contaron con la predicción meteorológica proporcionada por la AEMET y los datos de las consecuencias de esa predicción, es decir, el aumento del caudal en el Barranco del Poyo, especialmente peligrosas desde las 17 horas", insiste.