Carbonell y Micó se borran del equipo negociador para el 26J

VALENCIA. Los dos aspirantes a liderar el Bloc, Àgueda Micó y Rafa Carbonell, no formarán parte de la comisión negociadora encargada de muñir el nuevo acuerdo con Podemos y otras formaciones como Esquerra Unida de cara a las próximas elecciones generales que se celebrarán el 26 de junio.

Esta fue una de las conclusiones que se extrajo de la Ejecutiva de Compromís celebrada este martes. No obstante, esta decisión no era la que se planteó inicialmente tras la reunión celebrada por la dirección del Bloc un día antes, donde se había propuesto que los cuatro miembros del equipo negociador fueran el diputado nacional, Joan Baldoví, Lluismi Campos, Àgueda Micó y Rafa Carbonell.

Una medida dirigida a que los dos candidatos a la Secretaría General del Bloc formaran parte del proceso de negociación. Una circunstancia favorable al consenso y que, al mismo tiempo, buscaba también que Carbonell -actualmente fuera de la Ejecutiva a diferencia de Micó, secretaria de Organización- compartiera la responsabilidad del posible acuerdo electoral.

En este sentido, cabe recordar que precisamente el grueso de las críticas vertido por el sector de Carbonell hacia Micó se han centrado en la forma de llegar a un pacto con Podemos de cara al 20D, al considerar que no se respetó el mandato de la militancia.

Sin embargo, fuentes de la formación nacionalista señalaron a este diario que Carbonell había declinado finalmente formar parte de la comisión negociadora. Una maniobra ante la que Micó decidió reaccionar y también renunciar a su puesto en este equipo, que tiene la responsabilidad de llegar a un pacto. Así, las fuentes consultadas señalaron que fue incorporada a este grupo a la diputada nacional del Bloc Marta Sorlí.

La Comisión de Garantías tumba el voto telemático que pedía Carbonell

Por otro lado, esta misma semana la Comisión de Garantías del Bloc ha trasladado a la Comisión Organizadora del Congreso su postura de rechazo sobre el voto telemático -por internet- que defendía la candidatura de Carbonell.

Así, según la resolución trasladada, el voto deberá ser presencial dado que "de acuerdo con los vigentes Estatutos del Bloc es necesaria la efectiva presencia de aquellas personas delegadas en el régimen de debate y votación regulado por los mismos así como en el reglamento precongresual".

Una decisión que causó malestar en el entorno de Carbonell, algo que algunas fuentes del partido creen que contribuyó a la renuncia del aspirante a formar parte del equipo de negociador. 

En esta línea, tal y como informó este diario, las últimas conversaciones entre miembros de ambas candidaturas se habían aproximado en cierta medida en los últimos días en torno a la propuesta  de consenso que dibuja dos coportavocías.

Ahora, y aunque es probable que produzca una reunión entre Micó y Carbonell esta semana, fuentes de ambas candidaturas admiten que el posible consenso no está avanzando y que los dos sectores se velan armas de cara al Consell Nacional que tendrá lugar el sábado, una cita en la que debe decidirse si se aplaza el Congreso a julio por las elecciones generales -Micó en contra, Carbonell a favor- y si se ratifica que se mantendrán las candidaturas en el Bloc si no se producen primarias en el ámbito de Compromís.

En ese ámbito de integración, al término de la Ejecutiva de Compromís celebrada este martes, se produjo una larga charla en la plaza del Pilar entre Lluismi Campos, mano derecha de Enric Morera y próximo a Micó, Natxo Bellido, cercano a Carbonell, y Joan Baldoví, que está tratando de mantener un papel neutral en el proceso en aras del consenso.