VALÈNCIA. PSPV y Compromís vuelven a distanciarse a cuenta de la custodia compartida. El pleno de Les Corts aprobaba este martes una iniciativa para instar al Consell a dirigirse al Gobierno para que se incorpore en el Código Civil la custodia compartida como modalidad "más deseable" en caso de separación o divorcio. Una Proposición No de Ley del Partido Popular que contó con el respaldo de Ciudadanos y Compromís, pero con la oposición de los socialistas y Podemos.
Mientras la diputada popular María José Ferrer San-Segundo, impulsora de la iniciativa, justificaba la necesidad de aprobar esta PNL por una cuestión de "igualdad y corresponsabilidad de ambos progenitores en la crianza del niño", el PSPV criticaba la iniciativa.
En su intervención, la diputada socialista Rosa Peris, cuestionaba si "no habiendo acuerdo" entre los progenitores se podía "imponer" esta modalidad. Y, además, advertía que con esta proposición no de ley podía darse apoyo a "padres que sufren ataques de corresponsabilidad sobrevenida con el divorcio, que solo se acuerdan tras él".
No obstante, el PSPV no se quedó solo en la oposición. Se encontró con el respaldo de Podemos. La diputada de los morados Llum Quiñonero, pedía al PP "dejar de marear la perdiz" e ir al fondo del debate: "Es hora de que se proponga cambiar la Constitución, menos rogando y más con el mazo dando", sentenciaba.
Aún así, la propuesta salía adelante. La parlamentaria del PPCV Maria José Ferrer San-Segundo, consensuaba con el grupo de Fran Ferri la PNL. Tras la negociación, se añadía al texto una enmienda para exigir al Ejecutivo central "buscar todas las fórmulas posibles para garantizar la capacidad normativa plena en materia civil de la Comunitat Valenciana, incluidas aquellas que puedan comprender una reforma de la Constitución".
Una exigencia que circula en la misma dirección que las conclusiones a las que llegaron el grupo de expertos de la Comisión de Codificación sobre Derecho Civil, quienes han estado elaborando un informe sobre las posibles vías que puede seguir el Consell para recuperar las competencias en esta materia. En él se apuntaba un único camino posible para recuperar el derecho civil valenciano: la reforma de la carta magna.
Las diferentes posturas entre los socios de gobierno -los socialistas no iban a apoyar esta iniciativa- sorprendía en la Cámara. De hecho, el propio president de Les Corts, Enric Morera, tildaba la votación de "histórica" por la división de voto entre PSPV y Compromís. Pero cabe apuntar que la postura que iban a adoptar los nacionalistas en este asunto podía adelantarse, pues en 2011 los populares ya pactaron con Compromís la ley valenciana de custodia compartida.
Como también podía adelantarse la de los socialistas, pues en abril de 2016, siete meses antes de que el Tribunal Constitucional anulara la ley valenciana de custodia compartida, el síndico del PSPV, Manolo Mata, reiteró su oposición a esta norma. Pero no sólo eso: anunciaba, además, que presentaría una proposición de ley para derogar la ley porque no creían "justo" que esta modalidad fuera "automática".
Lo hizo, además, en una fecha significativa: ese día se debatía en Les Corts la propuesta de Compromís para solicitar los recursos de inconstitucionalidad contra leyes de desarrollo de derecho civil valenciano. Una propuesta que finalmente obtuvo el apoyo de los socialistas por "lealtad al Consell".
En aquel momento, la tensión entre los socios del Botànic se elevó. Fue la misma vicepresidenta del Consell y titular de Igualdad, Mónica Oltra, quien defendió la norma que hacía cinco años habían respaldado. Entendía que la "obligación de compartir la crianza y cuidado de los hijos" trascendía "el vínculo matrimonial" y que las "obligaciones" debían persistir "de la manera más paritaria posible". Aunque las tiranteces entre los socios del gobierno solo han sido dialécticas y de votos, este sigue siendo, un año después, un asunto que divide a nacionalistas y socialistas.